ENTRE MITOS , LEYENDAS E HISTORIAS -- CRUZADAS Y GUERRAS POR "DIOS" - - BIOGRAFIAS
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Biografías
Las biografías de los genios militares de la Historia.
Personajes destacados
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*Abd al-Rahman I
734 - 788
Emir 755 - 788
Miembro de la dinastía omeya que gobernaba en Damasco, Abd al-Rahman I fue el único de la familia que consiguió escapar con vida en la fatídica tarde del 25 de julio del año 750, cuando los abbasíes acabaron con los omeyas para hacerse con el poder. Abd al-Rahman tenía sangre beréber por parte de su madre y puso rumbo al norte de Africa, tras una breve estancia en Irak. La tribu de Nafta le dio cobijo en Marruecos, en las proximidades de Ceuta donde estaba asentada. Desde allí decidió enviar algunos emisarios hacia al-Andalus donde podía encontrar partidarios, en un momento de revueltas y hambrunas. En efecto, entre las tropas sirias -la mayoría clientes de los Omeyas- la figura de Abd al-Rahman fue recibida con mucho cariño, aunque no experimentó la misma sensación entre los dirigentes del grupo del poder, los qaysíes. No obstante, los sirios se volcaron con el omeya y le dieron su total apoyo para cruzar el estrecho de Gibraltar y desembarcar en Almuñécar (agosto del año 755). Abd al-Rahman se puso al frente de un potente ejército formado por sirios, yemeníes y beréberes, derrotando al gobernador de Córdoba un año más tarde, en mayo de 756. En la mezquita de la capital andalusí Abd al-Rahman era proclamado emir. De esta manera se instauraba el primer poder musulmán independiente del califato.
No será fácil la tarea a la que se tuvo que enfrentar el joven omeya, ya que los levantamientos fueron continuos, encabezados por el gobernador Yusuf al-Fihrí. Esta revuelta fue sofocada en el año 759, acabando con la vida del antiguo gobernador. El jefe beréber de Cuenca también se rebeló, al igual que el caudillo árabe al-Ala ben Mugit. Estas continuas luchas de poder motivarán que un grupo de jefes árabes de la zona nordeste soliciten ayuda a Carlomagno para levantarse contra Abd al-Rahman. Corría el año 777 y al año siguiente las tropas dirigidas por el rey franco alcanzaron Zaragoza. Carlomagno no pudo rendir la ciudad y regresó a sus posesiones, siendo derrotado por los vascones en Roncesvalles.
Estas continuas rebeliones estarían en buena parte motivadas por la diversidad de etnias que encontramos en la población andalusí -mozárabes, beréberes, árabes, sirios, etc.-, pudiendo mantenerse el emir en el poder gracias a la creación de un potente ejército profesional que aumentaba en relación con las necesidades. Los beréberes y los esclavos del norte constituían el núcleo de la milicia. Abd al-Rahman tomó como modelo la administración omeya y desarrolló un importante programa constructivo en el que resalta la edificación de la mezquita de Córdoba, que sería después ampliada por Abd al-Rahman II, Al-Haken II y Almanzor. Le sucedió su hijo Hishem I.
*Adriano IV
Papa 1154 - 1159
De nombre civil Nicolás Brekspear, nació en Abbot´s Langley, alcanzó el cargo de canónigo de la abadía de Saint-Ruf y posteriormente abad en 1137. En 1148 fue nombrado cardenal-obispo de Albano por el papa Eugenio III, encomendándole la representación de la Iglesia en Escandinavia. Allí, ordenó la diócesis de Trondheim y logró que Uppsala fuera designada como sede metropolitana de la Iglesia en Suecia. Regresó a Roma y alcanzó el solio pontificio en 1154 a la muerte de Anastasio IV. Se enfrentó al emperador Federico Barbarroja por las pretensiones de la dinastía Hohenstaufen de dominar los Estados pontificios y de intervenir en la designación de los obispados. Aunque pretendió la excomunión del emperador, falleció antes de haber realizado su propósito.
*Al-Idrisi
1100 h. - 1185 h.
Geógrafo
Aunque de su vida pocos datos tenemos, sabemos que viajó por la península Ibérica y el norte de África hasta que se instaló en la corte normanda de Palermo. Aquí, escribió el "Libro de Roger" por encargo de Roger II el Grande, rey de Sicilia. Su establecimiento en una corte cristiana hizo que fuera considerado un traidor por sus compatriotas musulmanes, quienes le reprochaban además haber alabado a un príncipe cristiano. Historiadores occidentales sitúan su nacimiento en Ceuta y suponen que debió estudiar en Córdoba.
*Alejandro Magno. Alejandro
Pella 356 a.C. - Babilonia 323 a.C.
Rey 336 a.C. - 323 a.C.
La figura de Alejandro Magno quizá sea de las más atractivas de la Historia. En sus treinta y tres años consiguió conquistar el mayor Imperio alcanzado hasta ese momento, llegando a las tierras bañadas por el Indo y dominando la mayor parte del continente asiático. Sus hazañas le han convertido en un mito y, en algunos momentos, en casi una figura divina, posiblemente por la profunda religiosidad que manifestó a lo largo de su vida. Hijo del rey Filipo II de Macedonia y de la princesa Olimpia, perteneciente a la familia real del Epiro, Alejandro nació en el mes de agosto de 356 a. C. La sucesión al trono macedonio correspondía a un hermanastro llamado Arrideo, hijo de Filipo y una bailarina, pero fue tajantemente rechazado por su deficiencia mental. Esta situación ponía a Alejandro en primera línea sucesoria, por lo que fue educado como un príncipe heredero. Su primer tutor fue Leónidas, pariente de su madre, encargándose de la educación física del muchacho. Lánice sería su institutriz, aficionándole a los poemas de Homero y de Eurípides. El joven pronto manifestó una gran afición a la lectura, especialmente los poemas épicos donde se loaban a los héroes de los que descendía. Imitar a esos héroes se convertirá en una de las obsesiones de Alejandro. Tanto Leónidas como Lánice estaban vinculados a Olimpia, lo que no era motivo de confianza para Filipo. El rey decidió que su heredero se educara en una auténtica academia, por lo que el príncipe fue enviado a la ciudad de Mieza. Una vez formado, Alejandro fue puesto bajo la tutela de Aristóteles, quien continuó con la educación griega que estaba recibiendo. Corría el año 342 y el joven príncipe contaba con 14 años. Aristóteles impulsó el interés de su discípulo por la geografía, la medicina, la poesía, la zoología, la botánica. Entre preceptor y alumno surge una interesante relación que perdurará en el tiempo, influyendo la doctrina del filósofo en la manera de actuar de Alejandro. Paralelamente a esta formación académica, el príncipe continuó con su formación atlética y militar, crucial para los diversos hechos de armas que vivirá más adelante. Durante estos años entablará un estrecho contacto con algunos militares, que se convertirán en auténticos compañeros de batalla. Uno de ellos fue Clito, hermano de Lánice, asesinado por Alejandro tras beber más vino de lo conveniente en una fiesta. Clito manifestó su rechazo a la comparación del príncipe con los dioses, así como exigió para las tropas una pequeña parcela del protagonismo obtenido tras las batallas. Estos comentarios, realizados posiblemente bajo los efluvios del alcohol, provocaron la ira de Alejandro y el asesinato de su gran amigo. Dicen los cronistas que estuvo tres días con sus noches sin beber ni comer, arrepentido de tan repulsivo acto. Será una de las numerosas muestras de la crueldad que surgían ocasionalmente en el mítico Alejandro. El mejor amigo de Alejandro sería Hefestión, su mano derecha y un fiel aliado, descubridor de varios complots contrarios a Alejandro, lo que motivaría el fortalecimiento de la amistad. Hefestión fallecería víctima de los abusos de la bebida, rehusando los consejos médicos que le indicaban beber con moderación. La muerte de Hefestión dejó tocado a Alejandro, quien intentó dispensar a su buen amigo honores divinos.
Las relaciones con su padre no parecen muy fluidas, incluso algunos especialistas se refieren a un posible complejo de Edipo para explicar esa tumultuosa relación filial. El matrimonio de Filipo con una joven aristócrata macedonia motivaría el exilio de Olimpia, acompañada poco después por Alejandro. Se especula con la posibilidad de la participación del propio Alejandro en una conspiración contra Filipo. Un año duraba el destierro y, tras ese periodo, se producía la reconciliación entre padre e hijo, lo que motivaba el regreso de Alejandro a la corte y a sus tareas gubernamentales y militares.
A los 16 años participa en su primera campaña militar, luchando contra los tribalos y los ilirios, pueblos asentados en la frontera norte del país, adquiriendo experiencia en los más duros métodos militares. Dos años más tarde comandaba la caballería macedonia que destrozaba a los griegos en la batalla de Queronea (338 a. C.). Alejandro es considerado el heredero legítimo de la monarquía macedonia, estrechando desde este momento los lazos con su madre, una mujer temperamental y ambiciosa que sólo deseaba ver a su hijo en el trono. Ese carácter ambicioso también será característico de Alejandro, manifestando una compleja personalidad en la que destaca su generosidad, el autocontrol y la impetuosidad, sin menospreciar su testarudez. A medida que transcurran los años, nos encontraremos con un Alejandro desconfiado e incluso cruel en algunos momentos, mostrando el aspecto más "macedonio" de su personalidad.
Para solucionar los problemas provocados por el destierro de Olimpia, Filipo decide casar a su hija Cleopatra con su cuñado, Alejandro el Epirota. Durante la ceremonia Filipo es asesinado a manos de Pausanias, lo que motiva el ascenso de Alejandro al trono en al año 336 a. C. Desconocemos si Olimpia o Alejandro alentaron a los autores del magnicidio. El sucesor era demasiado joven y tuvo que hacer frente a un grupo de cortesanos que no eran partidarios del nuevo rey. Actuó sin condescendencia, eliminando a los especialmente peligrosos como Atalo, tío de la esposa macedonia de Filipo, o su primo Amintas. El papel desempeñado en estos momentos por su madre será crucial, ya que otorgará la necesaria fortaleza al joven rey. El ascenso de Alejandro al trono contó con el inestimable apoyo de los militares que colaboraron con Filipo en sus victoriosas campañas.
Una vez sofocados los problemas sucesorios, Alejandro se dispondrá a fortalecer la frontera norte, donde grupos bárbaros procedentes de Centroeuropa amenazaban la integridad territorial del reino macedonio. A pesar del mayor número de las tropas enemigas, Alejandro acabó con ellos de manera fácil, poniendo de manifiesto su valentía y su capacidad estratégica.
Los griegos habían apreciado en la muerte de Filipo su oportunidad para deshacerse del yugo macedonio. Tebas se erigió como cabeza de la rebelión, aprovechando que el heredero al trono macedonio era un joven e inexperto príncipe. Alejandro se dispuso a hacer frente a los opositores, poniendo en marcha una campaña contra Tebas, arrasando la ciudad, y Atenas. A los 20 años Alejandro ostentaba los cargos que fueron anteriormente de su padre: comandante supremo de la Liga Helénica, comandante en jefe de la Liga de Corinto y presidente de la Liga Tesalia. De esta manera se ponía de manifiesto que el joven rey era el dueño absoluto de Grecia, continuando la política expansionista de su padre, de quien heredó la inteligencia política y la energía. Las tropas estaban dispuestas para la lucha. Las temidas falanges macedonias, constituidas por aguerridos y fieros combatientes en formación compacta, armados con lanzas de casi cinco metros, la poderosa caballería y los contingentes de tropas auxiliares estaban preparados para ponerse a disposición de su rey, que iría al frente de ellas, participando en la batalla como un combatiente más.
El siguiente objetivo del rey macedonio es la conquista de Asia, teniendo en los persas a un enemigo histórico. El proyecto ya estaba en la mente de Filipo, quien había establecido posiciones en los territorios de la Tracia y el norte del mar Egeo, excelentes puntos de partida para futuras expediciones. Alejandro cogió el testigo y convenció a las demás ciudades helénicas de los beneficios de la empresa asiática, dotando la campaña de un significativo panhelenismo. La conquista de los territorios del Imperio Persa solventaría buena parte de los problemas de la población helena, a la vez que se vengarían las afrentas sufridas a manos de los persas en el siglo V a. C. En la primavera de 334 a. C. Alejandro salió de la ciudad de Pella, capital de Macedonia, y durante once años se dedicará a conquistar todas las regiones de Asia, una de las empresas más complicadas de la Historia Antigua. Antípatro queda como regente de Macedonia, provocando una manifiesta tensión con Olimpia.
El ejército de Alejandro estaba constituido por unos 19.000 infantes y 4.000 jinetes, a los que debemos sumar 7.000 arqueros y 900 unidades de tropas auxiliares. El Imperio Persa contaba con un ejército infinitamente superior; unos 50.000 mercenarios griegos y más de 30.000 soldados procedentes de las levas, junto a la famosa guardia personal del rey, llamados los Diez Mil Inmortales, y las tribus de las montañas. Las provincias imperiales más alejadas estaban controladas por puestos fortificados y los recursos imperiales eran casi ilimitados, producto del ajustado engranaje de la maquinaria política y administrativa persa. A pesar de las contundentes diferencias, Alejandro obtendrá la victoria.
Las tropas helénicas llegaron a Asia Menor con la confianza de contar con la ayuda de las ciudades griegas ocupadas por los persas desde hacia bastante tiempo. Sin embargo, en estas ciudades se había producido una significativa prosperidad económica, que era amenazaba con la llegada de las tropas de Alejandro. Esta es la razón por la que en ciudades como Mileto o Halicarnaso el monarca helénico se encontró con una encarnecida resistencia hasta su definitivo sometimiento. La primera victoria sobre los persas tuvo lugar en la batalla de Gránico, en el mes de junio de 334. Alejandro obtenía además una importante victoria moral y el apoyo de algunas ciudades griegas de Asia. La campaña no había hecho nada más que empezar.
En abril del año 333 Alejandro llega a la ciudad de Gordion, donde existía una curiosa leyenda. Quien desatara el nudo del yugo del carro de Midas se convertiría en el dueño de Asia. Sacando su espada, Alejandro cortó el nudo. Esta anécdota, quizá falsa, será aprovechada como propaganda de las futuras conquistas a realizar. Desde allí se encaminará hacia el sur, llegando a la ciudad cilicia de Tarso, donde Alejandro cae enfermo tras tomar un baño frío cuando estaba agobiado por el calor.
La siguiente campaña se inició tras el paso de las Puertas Cilicias, que franqueaban el acceso hacia la costa fenicia y Mesopotamia. En noviembre del año 333 tuvo lugar la famosa batalla de Issos. Las tropas persas eran dirigidas personalmente por el rey Darío III Codomano, pero un error táctico y la valentía de los helenos dieron la victoria definitiva a Alejandro. Darío huyó, mientras su familia era capturada. Su madre, Sisigambis, su esposa, Estatira, sus hijas Estatira y Dripetis y un varón llamado Oco caían en manos del rey macedonio, siendo tratadas con especial dedicación, concediéndoles las atenciones propias de su realeza y sus atributos. En Damasco se hizo con el tesoro real persa, aportando una necesaria inyección económica a los escasos fondos con que contaba Alejandro. Darío intento llegar a un pacto con Alejandro, lo que colocaba a ambos mandatarios en una cierta situación de paridad.
Siguiendo una política de acercamiento con los pueblos vencidos, Alejandro mantiene una estrecha relación, aunque no se habla de matrimonio, con la noble persa Barsine, viuda de Memnón e hija de Artabazo. Plutarco nos la presenta como una bellísima mujer, distinguida y educada en la cultura griega. De esta relación nació un hijo llamado Heracles, del que no tenemos mayores noticias.
El monarca macedonio empezaba a ser considerado como una seria amenaza para los persas. Sin embargo, Alejandro decidió dirigir sus pasos hacia Fenicia y Palestina. En Tiro y Gaza encontró una contundente resistencia. La primera ciudad sufrió un asedio de seis meses, mientras que la segunda resistía durante dos meses. Alejandro resultó herido en un hombro y sus tropas tuvieron numerosas bajas, lo que se reflejó en el inmisericorde trato que recibieron los derrotados. Los habitantes de las ciudades que sobrevivieron a la masacre fueron vendidos como esclavos.
Desde Palestina pone Alejandro rumbo a Egipto, campaña en la que apenas encontró resistencia por parte de las guarniciones persas. El macedonio fue recibido en Egipto como un auténtico héroe, ya que les liberaba de la sumisión persa, especialmente odiada por la población local en el plano religioso. El macedonio sacó partido de estas diferencias, ya que adoró a los dioses egipcios y reconstruyó algunos templos que se encontraban en delicada situación. Con estos gestos acabó por ganarse la voluntad del pueblo egipcio, especialmente del clero. Se hizo cargo del gobierno del país, nombrándose faraón y dividiendo el territorio en tres zonas dirigidas por funcionarios egipcios, aunque la fuerza militar que supervisaba la seguridad era macedonia. En el delta del Nilo, Alejandro fundaba la famosa ciudad de Alejandría, la primera que llevaría su nombre.
Una vez dueño de Egipto, el rey macedonio decidió emprender la acción más impactante de su aventura asiática: tomar el corazón del Imperio Persa. Se dirigió hacia el curso alto del Eufrates, donde fundó Niceforio, y llegó hasta el Tigris sin apenas encontrar resistencia. Darío ofreció 10.000 talentos de oro por el rescate de su familia, así como el control de todos los territorios al oeste del Eufrates. Alejandro rechazó esta oferta, lo que provocó tensiones con algunos generales. El rey persa pasó a la ofensiva y organizó un potente ejército con el objetivo de rechazar a tan peligroso y altanero enemigo. Reclutó un amplio número de tropas en la zona oriental de su Imperio y se fue al encuentro de los macedonios. En el mes de octubre del año 331 tuvo lugar la definitiva batalla de Gaugamela. Alejandro atacó el centro de las tropas persas, lo que rompió sus líneas, provocando la huida de Darío y una desbandada generalizada. La nobleza persa veía cómo su rey era vencido por segunda vez consecutiva y decidió prescindir de él. Darío fue asesinado y Alejandro se prestó a un paseo triunfal por el maltrecho imperio.
En Babilonia fue recibido como un libertador y colmado de honores. Desde allí se dirigió a Susa y Persépolis, las capitales imperiales. Persépolis fue incendiada, en un gesto difícil de entender y que fue duramente criticado por Parmenión, uno de sus más importantes generales. La captura del tesoro real permitió a Alejandro la contratación de nuevos mercenarios, dirigiéndose hacia un nuevo objetivo: la ciudad de Ecbatana. Allí licenció a las descontentas tropas griegas de la Liga de Corinto, aunque la expedición conquistadora continuaba.
Las satrapías superiores de Bactriana y Sogdiana serán los siguientes objetivos, ya que hacía allí se habían dirigido los asesinos de Darío. Esta parte de la campaña militar de Alejandro será la más complicada, debido al rigor del clima, los ataques de las tribus montañesas en forma de guerrilla y lo desconocido del terreno. La dureza del avance provocó una sensación de descontento entre las tropas macedonias, aumentando el ambiente contrario al rey, reflejado en las crecientes conjuras contra Alejandro que se empiezan a suceder. Otro de los motivos de la distancia abierta entre el rey y sus tropas será la política de alianzas con la nobleza irania establecida por Alejandro. Dentro de esta política encontramos la boda con una princesa irania llamada Roxana, hija de Oxiartes, con quien tendrá un hijo póstumo llamado también Alejandro. Plutarco nos cuenta que Alejandro se casó profundamente enamorado, aunque no debemos dejar de lado el carácter diplomático del enlace. Con este matrimonio reforzaba la orientalización de su política, lo que aumentó la desconfianza de un amplio sector de militares macedonios.
Los territorios más septentrionales del Imperio Persa eran ocupados en el 328, alcanzando la frontera del río Jaxartes. Desde allí Alejandro decidió descender hasta la India. Para ello reforzó con tropas persas su contingente militar, cada vez más cansado y mermado de sus originales efectivos. Se alió con algunos reyes indios para facilitar la conquista del territorio, aunque no consiguió reducir la dureza de la campaña debido la pertinaz resistencia de los indígenas. Uno de los encuentros más duros tuvo lugar con el rey Poro, una especie de gigante con el que Alejandro se enfrentó en el 326, a orillas del río Hidaspes. La victoria cayó del lado del macedonio y Alejandro pensó en continuar con su expedición conquistadora dirigiéndose hacia el Ganges, una vez superado el Indo y llegado al río Hífasis. Pero las tropas estaban cansadas tras más de ocho años de aventura, por lo que el regreso se convertía en la mejor medicina para todos, excepto para el ambicioso Alejandro. Siguiendo el curso del Hífasis llegaron hasta la ciudad de Patala, luchando duramente con los indígenas y sufriendo la rebelión de los reyezuelos anteriormente sometidos.
Desde Patala se organizó el regreso, dividiéndose el ejército en tres cuerpos, dirigidos por Crátero, Nearco -quien costearía con una flota el territorio hasta el Golfo Pérsico - y Alejandro. En los diferentes territorios conquistados se realizarán continuas fundaciones de ciudades, llamadas Alejandría, que servirían para un estricto control de la zona donde se asentaban.
Arriano hace referencia a continuos escarceos amorosos de Alejandro en estos años, posiblemente motivados por la ausencia de heredero. Quizá sea ésta la causa de la boda con otra Barsine en el año 324, dentro de las multitudinarias bodas de Susa en las que 80 de los militares más destacados casaron con princesas persas. Barsine era la hija mayor de Darío III y fue asesinada por Roxana antes del nacimiento de Alejandro IV. Según Aristobulo, en esta multitudinaria ceremonia también se casó con Parisátide, la hija de Oco.
Los últimos años de Alejandro están caracterizados por las continuas purgas realizadas entre sus estrechos colaboradores, como se pone de manifiesto en el proceso y ejecución de Filotas. Filotas era hijo de Parmenión, dos de los más insignes militares del ejército macedonio. Se convirtió en un estrecho colaborador del rey, despachando en su tienda dos veces al día. Pero la relación entre ambos se fue distanciando y Filotas no informó a su señor de una conjura que tuvo lugar en la ciudad egipcia de Frada. Esta actitud provocó su detención y posterior proceso por traición. Condenado a muerte, fue ejecutado junto a otros personajes acusados de participar y ocultar la conjura. El propio Parmenión también será asesinado. Algunos especialistas intentan explicar estas crueles respuestas de Alejandro basándose en la peculiar situación de su Macedonia natal, donde el poder nobiliario provocaba continuos enfrentamientos con la monarquía, que debían ser sofocados de manera ejemplar. Las revueltas de en el seno de las tropas, víctimas del agotamiento y de la continuada ausencia de sus lejanos hogares, también serán características de estos momentos finales.
Durante la celebración de los Juegos Olímpicos de 324 Alejandro anunció una de sus medidas más controvertidas: el obligatorio regreso a las ciudades griegas de los exiliados. De esta manera conseguía un amplio número de incondicionales, dispuestos a defender la política del rey ante los posibles conatos de rebeldía que se produjeran en las poleis. Sin embargo, el decreto era una auténtica bomba, ya que amenazaba la estabilidad política y económica de toda la Hélade. Alejandro era visto por todas las ciudades griegas como un auténtico tirano, el peor cáncer para Grecia, consiguiendo un amplio número de enemigos que no llegaron a actuar por la temprana muerte del rey. Aquí debemos encontrar las bases para el desarrollo de una auténtica leyenda negra en torno a la figura de Alejandro, presentado desde ese momento como una persona excesivamente aficionada a la bebida, de promiscua ambigüedad sexual, cruel y megalómana.
A punto de cumplir los 33 años, el 30 de junio de 323 a. C., fallecía Alejandro en Babilonia. Arriano apunta a un posible envenenamiento promovido por su anterior maestro, Aristóteles. Engels consideró que murió de malaria, mientras que Schachermeyr plantea la leucemia como la causa de la muerte. Tras de sí Alejandro dejaba una serie de proyectos de expansión, siendo el más importante el control de la península Arábiga, fundamental para lograr el comercio de especias. El inmenso territorio conquistado será dividido a su muerte entre sus generales, abriéndose el periodo conocido como Mundo Helenístico.
*Alejo I Comneno
Emperador 1081 - 1118
Hijo tercero de Juan Comneno, era también sobrino del emperador Isaac I. Disputó el trono con Nicéforo III, a quien se lo arrebató en 1081. Su mandato experimentó grandes éxitos militares, derrotando a normandos en 1081 y pechenegos en 1091 y rechazando las expediciones seljúcidas en Anatolia. Hubo de enfrentarse al poder de la nobleza bizantina y, sobre todo, al inicio de la Primera Cruzada, lo que desestabilizó sus acuerdos con los musulmanes y provocó la toma de los Cruzados de buena parte de sus posesiones en Grecia.
*Alfonso VI El Bravo. Alfonso VI
1040 - 1109
Rey 1065 - 1109
Nieto de Sancho de Navarra, heredó de su padre Fernando I el trono leonés en 1065 y de su hermano Sancho el castellano en 1072. En un principio, de afrontar luchas intestinas por el mantenimiento del trono, pues le es disputado por su hermano mayor Sancho II de Castilla, quien logra derrotarle en las batallas de Llantada (1068) y Golpejera (1072). Como consecuencia de ello, Alfonso es encarcelado en Burgos y posteriormente desterrado a la ciudad musulmana de Toledo. El asesinato de Sancho, posiblemente por encargo de Alfonso, en la ciudad de Zamora le convierte de nuevo en rey de León y le permite reclamar el trono castellano como heredero, con el apodo incondicional de su hermana Urraca. La relación entre ambos hermanos nunca ha sido debidamente aclarada, promoviéndose los rumores ya en la época de un posible incesto. Resuelta la posible competencia de García, su hermano pequeño, mediante el su puesta en prisión, durante su mandato Alfonso VI se dedicó a consolidar los territorios heredados y a extender las fronteras a costa de los musulmanes. Así, el primer objetivo fue la conquista del reino de Toledo, lo que se consiguió en 1085. De esta manera lograba controlar los pasos serranos principales del sistema montañoso Central y las guarniciones que los custodiaban, extendiendo su dominio y área de influencia sobre los reinos taifas limítrofes. El hostigamiento sobre el reino de Murcia organizado por García Jiménez desde el castillo de Aledo y el excesivo tributo, exigido con dureza a los señores musulmanes, obliga a estos a solicitar ayuda de los imperios africanos, lo que significa el principio de la intervención almorávide en la Península. El desembarco de tropas culmina con la derrota de los ejércitos de Alfonso en la batalla de Sagrajas (1086) a manos de los almorávides de Yusuf, lo que significa un fuerte retroceso en las aspiraciones cristianas.
La derrota orienta un cambio de política de Alfonso hacia los reyes taifas, mostrándose más conciliador y tolerante hacia el Islam y retomando el título con que se autoproclamó antes de la caída de Toledo de "Emperador de las dos religiones". Sin embargo, los almorávides han descubierto la debilidad del poder cristiano y la posibilidad de establecerse definitivamente en territorio peninsular. Así, desembarcan otra vez en 1088 y asedian Aledo, siendo ahora derrotados. Un tercer intento en 1091 culmina con la ocupación de los reinos taifas y con el asentamiento definitivo del poder almorávide. Se inicia así una etapa expansiva que pasa por las batallas de Consuegra (1097) y Uclés (1108), que significan grandes pérdidas para Alfonso VI, tanto territoriales (Uclés, Ocaña, Cuenca, Huete), como humanas (el infante Sancho, heredero al trono, el conde García Ordóñez). Las únicas victorias cristianas no logran parar el empuje musulmán, a pesar de la defensa de Toledo en 1090 y las expediciones del Cid (Valencia, 1094).
Durante su mandato, además, se produjo una profunda reestructuración interna del reino, que se plasmó en el terreno político en los fueros de Burgos (1073), Sepúlveda (1076) o Logroño (1095) y, en el ámbito religioso-administrativo, en la reasignación de sedes episcopales a Ávila (1087), Salamanca (1102) y Burgos (1075). Además, debido a la influencia de sus esposa francesas, continuó la política de asimilación de las ideas europeas emprendida por Sancho III, promoviendo la integración de los monasterios en la reforma cluniacense, nombrando obispos franceses para las sedes eclesiásticas principales y fomentando la peregrinación a Santiago de Compostela, en cuyos principales puntos del camino surgieron barrios franceses. Además, se produjeron profundos cambios en el terreno de la liturgia, al sustituirse el rito mozárabe o visigodo local por el romano, imperante en el resto de Europa, a pesar de la oposición popular. Sustituyó también la escritura visigótica por la carolina.
El 30 de junio de 1109 muere Alfonso VI y se plantea entonces un fuerte problema sucesorio, tras la muerte de su hijo Sancho en la batalla de Uclés. A los graves problemas fronterizos se suma ahora una guerra civil, que se resolverá en favor de su yerno Alfonso I de Aragón.
Alfonso VII El Emperador. Alfonso VII
1105 - 1157
Rey 1126 - 1157
Hijo de la reina Urraca y del conde Raimundo de Borgoña, su primer marido, en 1111 sus partidarios le proclaman rey de Galicia y en 1126 hereda de su madre el trono castellano-leonés. Su primera preocupación será solventar las tendencias secesionistas que se vienen produciendo desde la muerte de Alfonso VI, en especial a cargo del condado de Portugal, y recuperar los territorios entre Burgos y Carrión, dominados por Alfonso I el Batallador de Aragón tras la separación de la reina Urraca. Muerto éste, la debilidad producida por la separación de los reinos de Navarra y Aragón le permiten acrecentar su poder tanto territorial como político, anexionando Nájera y La Rioja y ocupando Zaragoza y el margen derecho del Ebro. Además, establece su dominio sobre Navarra al hacerse prestar vasallaje por el rey García Ramírez y emprende victoriosas campañas contra los musulmanes que le llevan a tomar Jerez en 1133 y asolar las campiñas de Córdoba y Sevilla. En la cúspide de su poder, es coronado emperador en la catedral de León el 26 de mayo de 1135.
A partir de este momento, emprende una fuerte campaña de ataque a los territorios musulmanes y logra tomar Oreja (1137), Coria (1142) y Calatrava (1146). En 1147 inicia una fuerte expedición de conquista hacia Almería, que se verá favorecida por el debilitamiento que el Imperio Almorávide sufre desde 1142. La plaza no será abandonada sino hasta diez años después, ante el empuje almohade.
Entre tanto, dos episodios puntuales debilitarán la posición del monarca y de sus reinos: la independencia de Portugal y la alianza de Aragón y Cataluña. El afán independentista portugués se vio momentáneamente solventado con la concesión a Alfonso Enríquez de Portugal del señorío de Astorga y el reconocimiento del título de rey, que utilizaba desde 1140, a cambio de reconocer vasallaje a Alfonso VII como emperador. Sin embargo, más adelante el monarca portugués se proclamará vasallo a sí mismo y a su reino de la Santa Sede, con lo que la vinculación efectiva con Alfonso VII quedará definitivamente rota. Por otro lado, el matrimonio entre Petronila, hija del rey aragonés Ramiro II, con el conde Ramón Berenguer IV de Barcelona, supondrá la creación de un poderoso reino rival a partir de 1137 y la entrada en escena de un nuevo e importante elemento a tener en cuenta en el juego estratégico peninsular. Así, en 1151 ambos reinos firman el tratado de Tudellén, que establece los límites de la expansión futura de ambas coronas, cediendo a la catalano-aragonesa el derecho a tomar Valencia, Denia y Murcia a cambio del reconocimiento de vasallaje.
La muerte de Alfonso VII se produce en el camino de vuelta de Almería tras la huida provocada por la toma de los almohades. Su testamento retoma la costumbre de repartir los territorios entre los herederos. Así, Sancho se hará cargo de Castilla con el título de Sancho III mientras Fernando será rey de León como Fernando II. Se finaliza de esta manera con la idea de una unidad territorial, política y religiosa de ámbito peninsular conformada como imperio.
*AlfonsoVIII El Noble o El de las Navas. Alfonso VIII.
1155 - 1214
Rey 1158 - 1214
Hijo de Sancho III, accede al trono en 1158 cuando sólo contaba tres años de edad. Durante su minoría de edad, el reino de Castilla se ve acuciado por problemas nobiliarios - el enfrentamiento entre dos facciones enfrentadas, los Castro y los Lara- y por el ataque de los reinos rivales de Navarra y León. Así, Fernando II de León penetra en Castilla en 1162 y Sancho VI de Navarra consigue anexionar a su reino los territorios de Logroño y Cerezo. A los catorce años de edad, en 1169, Alfonso pasa a reinar efectivamente sobre Castilla y contrae matrimonio con Leonor de Inglaterra.
La lucha por la hegemonía peninsular enfrentará a Castilla con León y Navarra durante largas décadas. La competencia con León, fundamentalmente por cuestiones fronterizas, será una constante durante todo su reinado. Firma el tratado de Fresno-Lavandera con Fernando II de León, que establece un período de estabilidad y buenas relaciones entre ambos reinos, hasta el punto de que el monarca castellano arma caballero al leonés, su primo, en la Curia de Carrión (1188). No obstante, más tarde se reactivaron los ataques, que se sucederán hasta la boda del hijo de Fernando II, Alfonso IX, con la hija de Alfonso VIII, Berenguela, en 1197, matrimonio del que nacerá Fernando III. El parentesco entre ambos cónyuges faculta al papa Inocencio III a declarar no válido el matrimonio, lo que deshace el acuerdo de paz y promueve de nuevo los enfrentamientos.
Con respecto a Navarra, Alfonso pretenderá recuperar los territorios conquistados, para lo que emprenderá entre 1173 y 1176 diversas expediciones tendentes a restaurar las fronteras anteriormente existentes. El estado de abierto enfrentamiento entre ambos reinos promueve la búsqueda de una solución pactada, a cargo de Enrique II de Inglaterra, que sin embargo no será respetada por Castilla. Reanudado el conflicto, los castellanos logran tomar Álava y Guipúzcoa en 1200. La hostilidad entre Castilla y Navarra no impedirá, no obstante, la participación del rey navarro Sancho VII en la batalla de las Navas de Tolosa.
Por otro lado, Aragón y Castilla fijan sus objetivos en la lucha contra los musulmanes, estableciendo mediante el tratado de Cazorla (1179) el trazado de la futura frontera entre ambos reinos a costa de los territorios bajo control almohade. Así, la colaboración entre ambos monarcas permite tomar Cuenca en 1177. La reacción almohade provocará el desembarco en la Península de Abu Yacub en 1195 y la gravosa derrota de los castellanos en el Castillo de Alarcos ese mismo año, iniciándose un período de dos años de hostigamiento musulmán y control del área central peninsular. La participación de Pedro II de Aragón fue fundamental para el posterior desarrollo de los acontecimientos, al permitir la victoria de los ejércitos cristianos sobre los musulmanes en la batalla de las Navas de Tolosa (1212). Con esta victoria, queda expedito el camino hacia el sur peninsular y el Imperio Almohade se derrumba definitivamente.
Alfonso VIII, el Noble, muere en 1214, heredando el trono su hijo Enrique al haber fallecido su primer hijo, Fernando, en 1211.
*Antígono
- 301 a.C.
General
Tras el fallecimiento de Alejandro sus generales se repartieron la administración de las provincias que constituían el Imperio. Antígono, llamado Monoftalmo porque era tuerto, recibió Frigia, Licia y Panfilia. Pronto entró en la batalla por la herencia y a la muerte de Antípatro acabó con Eumenes lo que provocó la unión del resto de generales contra él. En un primer momento consiguió extender su influencia hacia Grecia y las Cícladas gracias a las victorias conseguidas por su hijo, Demetrio Poliorcetes. La derrota de Demetrio en Siria a manos de Ptolomeo llevó a la firma de un tratado de paz entre los generales (311 a.C.). La ambición de Antígono le llevó a matar a los escasos familiares de Alejandro que quedaban y a enfrentarse a Ptolomeo, obteniendo la victoria gracias de nuevo a Demetrio. La lucha no finalizó ahí ya que Antígono continuó con sus deseos de recuperar el imperio de Alejandro. Los demás generales se coaligaron contra él y le derrotaron en la batalla de Ipso. La herencia de Alejandro se repartía definitivamente.
*Antíoco III
242 a.C. - 187 a.C.
Rey
Cuando Antíoco III alcanzó el trono de Siria continuó al política expansionista de Seleuco, su antecesor. Sometió de nuevo a Pérgamo y alcanzó los confines del reino indio de Asoka, pero no pudo evitar la rebelión de Media y la derrota ante Ptolomeo IV. Aprovechando el conflicto macedónico conquistó la mayor parte de las ciudades de Asia Menor, preparándose para tomar la Tracia. Esta actitud le llevará a enfrentarse con Filipo V de Macedonia, aliado de Roma. Las tropas romanas derrotaron a Antíoco en las Termópilas (191 a.C.) provocando la huida del seléucida a Asia. Los romanos decidieron saltar a Asia y vencieron a Antíoco en Magnesia, imponiendo unas duras condiciones al perdedor. Siria inicia su etapa de decadencia.
*Antonio, Marco
- Egipto 31 a.C.
Triunviro
Marco Antonio era miembro de una de las familias más ilustres de Roma -la gens Antonia-. Su madre estaba emparentada con Julio César quien sintió especial atracción hacia el joven. No en balde, Antonio acompañó al general en la conquista de las Galias, convirtiéndose en uno de sus más estrechos colaboradores y defensores de la política democrática. César y Antonio fueron elegidos cónsules en el año 44 a.C., el fatídico año en el que Bruto y Casio decidían poner fin a la vida del dictador por temor a ver como la República finalizaba. De hecho Antonio acompañaba a César cuando éste fue asesinado ante el Senado. Antonio consiguió calmar a la muchedumbre y se convirtió en el verdadero dueño de la situación. Pero no contó con un nuevo personaje que hizo acto de presencia en el testamento de César: Octavio.
El Senado no aceptaba de buen grado la sólida posición de Antonio que quedaba como gobernador de la Galia, por lo que se formó un importante grupo opositor liderado por Cicerón. Pero Antonio fue a tomar posesión de su
cargo, lo que motivó el enfrentamiento con Décimo Bruto en Módena. El ejército senatorial dirigido por Octavio, Hirico y Pansa obtuvo una importante victoria y Antonio tuvo que huir con sus tropas.
En Roma el triunfo de los enemigos de César -el Senado y Cicerón- motivaría que los cesaristas llegaran a un acercamiento. De esta manera surge el Segundo Triunvirato formado por Octavio, Antonio y Lépido el 27 de noviembre del año 43 a.C. Los triunviros se repartieron el gobierno de los territorios, adjudicando a Antonio primero las Galias y después Asia. Será en Asia donde se produzca la derrota de los asesinos de César -batalla de Filipos, año 42 a.C.- y donde Antonio conozca a Cleopatra, la bella reina de Egipto.
El encuentro entre ambos se produjo en Tarsos y Antonio se prendó de las belleza de Cleopatra. No importaba que estuviera casado con Fulvia, mujer ambiciosa que murió envuelta en un oscuro complot. Los amantes se instalaron en Alejandría antes de iniciar una serie de campañas contra los persas que no dieron el resultado esperado, aunque se impuso un virtual vasallaje a Armenia.
Para sellar las alianzas y hacer sentar la cabeza a Antonio, Octavio casó al general con su hermana, quien durante un tiempo intentó hacer olvidar a Cleopatra. Pero la maniobra no dio resultados y el siguiente paso de Antonio provocó las iras de Octavio, al separarse de su esposa para casarse con Cleopatra. La reacción del futuro Augusto será dirigirse a un enfrentamiento contra los enamorados más poderosos de Oriente. El encuentro tuvo lugar en Accio, saliendo Antonio derrotado. Octavio aisló a su enemigo en Egipto y se dirigió a Alejandría, donde la desesperación de Antonio motivó el lanzamiento de un infructuoso ataque. Enterado de la muerte de Cleopatra, se hizo matar.
*Apolodoro de Damasco
Siria 60 - 125
Arquitecto
Bajo el imperio de Trajano, fue uno de los arquitectos más prolíficos de su tiempo. Trabajó en la realización de construcciones civiles y militares como el Foro, los mercados o el puente sobre el Danubio, cuya longitud alcanza un kilómetro de longitud. Actualmente se confirma su participación en el Puerto de Ostia y en la columna de Trajano. También se le atribuye haber colaborado en los arcos trajanos de Ancona y en Benenvento. Con Adriano en el poder se le adjudicó la restauración del Panteón de Agripa.
*Arturo
Siglo VI
Sobre la figura de Arturo existe un halo de leyenda. Se le considera rey de un territorio celta en Gran Bretaña donde fundó su famosa Orden de los Caballeros de la Mesa Redonda, creando un potente ejército con el que venció una batalla contra los sajones en el año 516.
*Augusto. Octavio
Nacionalidad: Roma24-9-63 a.C. - Nola (Campania) 15-3-14 Emperador 43 a.C. - 15-3-14
Al acceder al poder Augusto encontró a Roma sumida en el más absoluto caos. Cuando falleció, el Estado había sido pacificado y organizado. Con esta frase podemos resumir los más de 50 años que Octavio pasó al frente del gobierno romano, iniciándose en estos momentos el período conocido como Imperio. No en balde, posiblemente la obra arquitectónica más importante que se levantó durante su gobierno es el Ara Pacis, el Altar de la Paz cuyos espléndidos relieves aún hoy podemos contemplar en las cercanías del Tíber. Octavio Augusto nace el 24 de septiembre del año 63 a.C. en el seno de una familia burguesa procedente de Veletri, en el Lazio. Su padre se llamaba Cayo Octavio y había sido durante un tiempo gobernador de Macedonia. Su carrera política estuvo determinada por su matrimonio con Atia, una sobrina de César. Cuando Cayo Octavio iba alcanzar el consulado, falleció (58 a.C.) De ese matrimonio, posiblemente de conveniencia como todos entre los miembros de la élite romana, habían nacido dos hijos: Octavia y Cayo Octavio, más conocido posteriormente como Augusto. La muerte del pater provocó que Turino -nombre de Augusto en estos momentos gracias al éxito alcanzado por su padre en una campaña contra una rebelión de esclavos en la zona de Turio- quedara bajo la tutela de Lucio Marcio Filipo, segundo esposo de su madre, quien impuso una férrea disciplina a la educación del joven. Pero el personaje con más ascendente en la política romana de esos años no tardó en granjearse la amistad del joven. En el año 45 a.C. Julio César adopta a Octavio quien, desde ese momento, se llamará Cayo Julio César Octaviano. Ese mismo año acompañó al dictador a las campañas militares en España, donde tomó un claro partido durante la guerra civil. Octaviano fue enviado al Épiro por César para detener a los partos. En este lugar recibió la noticia que provocaría su abierta participación en política: el asesinato de su padre adoptivo (15 de marzo del año 44 a.C.). Ante el dramático panorama que se ceñía sobre Roma, Antonio, como lugarteniente de César, se hizo cargo de la situación. Con cierto apoyo del Senado, la alianza de Lépido - que controlaba la caballería- y buena parte de la plebe, Antonio consiguió controlar parcialmente los resortes del poder. Pero Octaviano decidió regresar a Roma para recibir la herencia del dictador y convertirse en su vengador. En mayo llegó a la ciudad no sólo para recoger las riquezas del difunto César sino para abrirse paso en la complicada y tensa tela de araña de la política romana. Sus primeros pasos fueron encaminados a poner de manifiesto el carácter divino de su padre adoptivo, viéndose favorecido por la aparición de un cometa en unos Juegos. Este prodigio fue considerado por la muchedumbre como una clara y evidente señal. Octaviano había conseguido su primer triunfo ante sus más directos rivales precisamente cuando Antonio pasaba por sus momentos más bajos entre los partidarios de César. Antonio se alejó de los asesinos -Bruto y Casio eran enviados a Creta y Cirene como gobernadores - y se dispuso a realizar una maniobra de acercamiento a Octaviano. Pero el heredero de César cometió un grave error: reclutó a los veteranos y marchó sobre Roma para alzarse con el poder (10 de noviembre), quizá con la esperanza de contar con el apoyo de los partidarios de César. El enfrentamiento entre sus tropas y las de Antonio no llegó a producirse por la negativa de los soldados a combatir. Octaviano tuvo que huir al norte, atrincherándose en Arezzo donde esperó la llegada de Antonio. Dos de las legiones de éste desertaron a favor de Octaviano y Antonio decidió marchar sobre la Galia Cisalpina para luchar contra Décimo Bruto. En enero de 43 a.C. el Senado daba un vuelco a la situación gracias a Cicerón. Los ejércitos de Octaviano y Décimo eran considerados legales mientras Antonio debía deponer sus armas. Antonio se negó y el Senado se dispuso a hacer frente al rebelde. En abril Antonio sufría dos contundentes derrotas pero los generales Hircio y Parsa, enviados por el Senado para luchar contra el rebelde, murieron en combate. Con Antonio exiliado en la Narbonense y los dos generales muertos, Octaviano parecía convertirse en el nuevo dueño de la situación. Sin embargo, las cosas cambiaron cuando las provincias occidentales constituyeron un sólido bloque dirigido por hombres cercanos al difunto César. Octaviano quedaba encuadrado entre los republicanos al haber participado claramente como miembro del Senado contra Antonio. El joven supo manejar sus cartas y realizó una maniobra difícil de prever: se dirigió con sus tropas a Roma para reclamar el consulado. El Senado envió contra él tres legiones que se pusieron de su lado sin combatir. Octaviano accedía al consulado de la mano del ejército y del pueblo romano. Corría el 19 de agosto de 43 a.C. y Octavio se presentaba como representante de la legalidad frente a los rebeldes de Occidente y los asesinos de César que gobernaban en Oriente. En las cercanías de Bolonia se establecía el Segundo Triunvirato entre Octavio, Lépido y Antonio. Su objetivo era el restablecimiento de la autoridad estatal, iniciándose un período de persecución contra los republicanos. Numerosos senadores y caballeros fueron condenados a muerte sin juicio previo; los supervivientes tuvieron que huir o esconderse. Se llegaron a ofrecer 25.000 dracmas por las cabezas de los que huían. La guerra civil era inminente pero Octaviano había jurado solemnemente vengar a los asesinos de su padre y ahora se le proporcionaba la ansiada oportunidad. Republicanos y cesaristas se vieron las caras en la batalla de Filipos (23 de octubre de 42 a.C.). La victoria parecía sonreír en un principio a los republicanos ya que la formación de Octaviano fue rota por el empuje de Bruto. Pero Casio, erróneamente, creyó que todo estaba perdido al verse atacado por Antonio, optando por el suicidio. Bruto huyó y dos semanas más tarde lo intentó de nuevo pero la victoria sonrió a Octaviano y Antonio. Viendo todo perdido, Bruto corrió la misma suerte que su amigo Casio. Los dos eventuales aliados se repartieron el botín: Antonio partía para Oriente con el objetivo de conquistar el Asia interior y Octaviano se dirigía a Roma para gobernar Italia. Filipos había supuesto un golpe definitivo contra la República y la aristocracia, cuyos más insignes miembros murieron en el combate o en los numerosos suicidios que siguieron a la derrota. La labor desempeñada por Octaviano en Roma no era muy grata ya que la inflación y el paro subían al tiempo que Sexto Pompeyo amenazaba con rebelarse en Hispania, lo que motivó el bloqueo de los aprovisionamientos. A esto debemos añadir el amplio reparto de tierras entre los veteranos de las legiones, medida que no satisfizo a los campesinos italianos que tuvieron que ceder buena parte de sus tierras a los militares licenciados. La tensión es aprovechada por Lucio Antonio -hermano de Antonio que era animado a la revuelta por su cuñada, Fulvia- para sublevar a los habitantes de la región de Perusa mientras Asinio Polión ocupa la Galia Cisalpina por orden de Antonio. Octaviano está contra las cuerdas pero reacciona y, gracias a su buen amigo Agripa, asedia la ciudad de Perusia que acaba siendo tomada y saqueada en los primeros días del año 40 a.C. Antonio quiso reaccionar e intentó penetrar en Italia al frente de un ejército pero se le prohibió el acceso en Brindisi. Los italianos estaban hartos de guerra por lo que se imponía la paz. Mecenas y Polión, representando a Octavio y Antonio respectivamente, firmaban un tratado en el que se repartían el mundo conocido: Octavio recibía la zona occidental, Antonio la oriental y Lépido se debía de contentar con África. El pacto de Brindisi se refrendaba con el matrimonio entre Antonio y la hermana de Octavio, Octavia. Esta alianza parecía traer a Italia la tan ansiada paz pero pronto se vio alterada por el ataque de Octavio a Sexto Pompeyo, dueño del mar y promotor del boicot a la entrada de grano en Italia. La maniobra acabó en desastre para Octavio que tuvo que recurrir a la solicitud de ayuda de Antonio, firmándose un nuevo pacto entre ambos en Tarento (38 a.C.) por el que se prorrogó el triunvirato durante cinco años. La ayuda de Antonio se manifestó en 120 barcos con los que Agripa se dispuso a acabar con Sexto Pompeyo, invadiendo sus bases de Sicilia. La victoria sonreía de nuevo a Octavio (Nauloco, 3 de septiembre de 36 a.C.) y el grano volvía a fluir en Roma. Paulatinamente, la estrella de Octavio inicia un vertiginoso ascenso apoyado por su política de reparto de tierras entre los soldados licenciados (ahora fuera de Italia para evitar tensiones con los campesinos) y su importante programa de obras públicas en Roma, diseñado por Agripa y en el que encontramos la construcción de acueductos, fuentes y el saneamiento de la Cloaca Máxima. Italia entera le prestaba juramento y le reclamaba como jefe, según reza en su testamento. El año 33 a.C. finalizaba el triunvirato y los dos cónsules elegidos eran partidarios de Antonio. Octavio no se dejó amilanar y, acompañado de una escolta armada, entró en la sala de reuniones y expulsó a los cónsules, nombrando a otros de probada fidelidad. Los cónsules expulsados y más de 300 senadores se dirigieron a Antonio para solicitar su apoyo ante el acto de agravio provocado por Octavio, ahora más asentado todavía en el poder. Cuando finalizaba el año 32 a.C. Octavio declaraba la guerra a Cleopatra. Esta maniobra suponía el enfrentamiento con Antonio que se produjo al año siguiente. La victoria conseguida sobre Antonio en Accio (2 de septiembre de 31 a.C) permitirá a Octavio hacerse con el poder definitivo en Roma. Antonio siguió a su amada Cleopatra a Egipto mientras Octavio desembarcaba en Grecia para poner paz en la zona, regresando de nuevo a Italia para sofocar una revuelta. Al año siguiente se dirigió a Asia para cortar los lazos que aún podía mantener Antonio. En agosto del año 29 a.C. llegó triunfante al país del Nilo. Tomada Alejandría, Octavio sólo pudo ver el cadáver de su enemigo ya que Antonio se suicidó al llegar a sus oídos la falsa noticia del suicidio de Cleopatra. La reina de la singular nariz no aguantó las amenazas de Octavio -quería que paseara su belleza por Roma como miembro de su cortejo triunfal- y puso fin a su vida. El rastro de sangre no acabó aquí ya que Cesarión y el hijo mayor de Antonio y Fulvia fueron asesinados, mientras que los hijos nacidos de la relación con Cleopatra fueron enviados a su viuda, Octavia. Tras la restauración de la paz, Octavio entrega el poder al Pueblo y el Senado romanos, planteándose la retirada de la vida política. Este acto formaba parte de una estrategia premeditada pero los senadores no podían renunciar al abandono del artífice de la creación del nuevo Imperio. Por eso, el 16 de enero de 27 a.C. recibe del Senado el nombre de "Augustus", una nueva denominación oficial que recogía la grandeza de sus actos. Incluso se propuso llamarle Rómulo, como el fundador de la ciudad, pero sus amigos le advirtieron del peligro de denominarse como un rey. Y es que precisamente Augusto no quería repetir los errores de su padre adoptivo y presentarse ante la opinión pública como un dictador o un monarca. El nombre de Augusto tenía buenos augurios ya que se designaba así a aquellos lugares consagrados que habían sido elegidos por los augures. Desde ese momento empezaba una nueva época en la que Augusto concentraba en sus manos la autoridad pero conservando la apariencia de la libertad republicana. Como procónsul y cónsul tenía a su cargo la política exterior y la administración estatal, la autoridad sobre los demás magistrados y la convocatoria del Senado donde había alcanzado el título de "princeps senatus", la figura de mayor jerarquía en la institución. Su autonombramiento como "imperator" le situaba como jefe supremo de las legiones. Sin embargo, la tradicional constitución romana no fue suprimida ni transformada por lo que su "dictadura" estaba cargada de legalidad. Este período se denomina el principado de Augusto. Octavio se rodeó de un pequeño grupo de colaboradores que ejercían la función de gabinete ministerial. Su labor será crucial para el desarrollo que se vivirá en este momento. Agripa será el organizador y promotor de las reformas urbanísticas que se realizaron en Roma. Mecenas despuntará como promotor cultural y excelente financiero mientras que entre los generales pronto empezó a despuntar Tiberio, hijastro de Octavio. También escogió a veinte senadores entre los aristócratas para formar una especie de Consejo Asesor y evitar de esta manera la repulsa de la élite social romana. Una de sus primeras medidas de gobierno será la devolución al Senado de la gestión de las provincias que formaban el Imperio, excepto Hispania, Galia y Siria que quedaban bajo su jurisdicción. Las continuas sublevaciones que se producían en estos territorios serían la justificación por las que mantuvo estas provincias bajo su mando. El año 20 a.C. el rey parto Fraates entregaba las insignias conquistadas a las tropas de Craso, lo que suponía una especie de tratado de paz al tiempo que se instalaban dos reyes vasallos en las fronteras de Asia para asegurarse los envites partos, estableciendo la frontera común en el Éufrates. La zona de Judea se convertiría en provincia (año 6 d.C.) tras la muerte de Herodes. En la Galia, la ciudad de Lugdunum fue designada como la capital federal una vez pacificadas las regiones de la Cisalpina y la Narbonense. En este ámbito de conflicto en las provincias se produjo su llegada a tierras hispanas para sofocar las revueltas cántabras, fundando Cesar Augusta, la actual Zaragoza, y Emérita Augusta, la actual Mérida. En el año 24 a.C. regresa Octavio a Roma debido a un agravamiento de su enfermedad. Los opositores aprovechan su oportunidad para mover sus piezas aunque algunos no tengan muchas opciones como el cónsul Terencio Varrón, condenado a muerte por traición. Augusto deja temporalmente el poder en manos de Agripa y el cónsul Calpurnio Pisón. Su muerte parece inminente pero de manera milagrosa sobrevive gracias a la receta de un médico griego. Este año 23 a.C. realiza una nueva reforma administrativa al renunciar a su nombramiento anual como cónsul para ocupar el tribunado con el que conseguía el derecho de veto sobre los demás magistrados. La vida personal de Octavio tampoco está exenta de ajetreo. Su salud fue siempre muy frágil, estando afectado de eccema, colitis y bronquitis, enfermedades que se fueron enconando con el tiempo para convertirse en crónicas y motivar que siempre tuviera que ir acompañado de un médico, al tiempo que sentía pánico por las corrientes de aire. Apenas bebía y comía frugalmente, siendo muy austero en sus costumbres. Vivía en una pequeña habitación del palacio de Hortensio en la que no existían lujos. En sus matrimonios tampoco fue muy dichoso. Como muestra del buen entendimiento entre Octavio y Antonio se le impuso el matrimonio con Claudia, la hijastra de su aliado, aunque el enlace no se llegó a consumar. En el año 40 a.C. se casa con Escribonia, viuda ya en dos ocasiones, madre de Julia, su hija favorita a pesar de ser considerada la "viuda alegre" de Roma. Pronto se divorció para volver a contraer matrimonio con Livia Drusila. Livia estaba felizmente casada con Tiberio Claudio Nerón y de este matrimonio nacieron dos hijos: Druso y Tiberio. Pero Octavio se enamoró de ella - a pesar de estar embarazada de cinco meses- y convenció a su esposo para que se divorciara y poder matrimoniar con la bella Livia. Tampoco hubo descendencia para Octavio de esta relación. Los últimos años de la vida de Octavio estarán determinados por la búsqueda de un sucesor. Los herederos con mayores posibilidades eran sus nietos Gayo y Lucio César, hijos de Julia y Agripa. Pero estos jóvenes fallecen entre el año 2 y 4 de nuestra era. Octavio no tiene más remedio que delegar su sucesión en su hijo adoptivo Tiberio. Para evitar que la familia Julia se alejara del poder, obligó a Tiberio a adoptar a Germánico, nieto de Octavia por su madre. Durante el gobierno de Augusto Roma va a vivir un extraordinario florecimiento cultural, artístico y literario que a veces roza la propaganda. Uno de sus principales promotores será Mecenas -no en balde, con este nombre se designan a los personajes que favorecen el desarrollo artístico- quien supo atraerse la amistad de los poetas Virgilio, Horacio o Quintilio, entre otros. También conviene destacar la fiebre arquitectónica que se vivió especialmente en Roma, con la restauración y la edificación de un amplio número de templos, basílicas, pórticos, un nuevo foro - Forum Augusti- para la capital imperial o el famoso teatro Marcelo que todavía hoy se contempla en parte. El envejecimiento acentuó el mal carácter de Augusto, que veía como las gripes y la colitis se hacían sus inseparables compañeras. Se volvió más suspicaz e incluso aumentó su crueldad, viendo por todos sitios inexistentes complots. Precisamente para salvaguardarse de ellos creó la guardia pretoriana. Las noticias que llegaban del Elba no eran muy alentadoras. Varo había sido exterminado con tres legiones por Arminio y la frontera que Druso había establecido en el Elba tuvo que ser restituida en el Rin. Sus reformas de las costumbres no habían surtido efecto como se puso de manifiesto con la inmoral actitud de su nieta, también llamada Julia como su madre a la que sucedió en escándalos. Tuvo que confinarla lo que afectó tremendamente a su delicada salud, pensando en morir de hambre. No resistió mucho más y falleció en las cercanías de Nola, en la Campania, el 15 de marzo del año 14, a los 77 años de edad, después de una bronquitis. Su cadáver fue portado por toda Roma a hombros de los senadores siendo quemado en el Campo de Marte. Tras su muerte vendría su divinización por el pueblo.
*Balduino I
Nacionalidad: Jerusalén1058 - 1118 Rey 1110 - 1118
Fue proclamado rey de Jerusalén en 1100, anexionando a su reino Beirut, Sidón y Acre. Su hermano fue el famoso cruzado Godofredo de Bouillon.
Destacados
*Balduino I
Nacionalidad: Constantinopla1171 - 1205 Emperador latino 1204 - 1205
Militar francés, uno de los jefes de la Cuarta Cruzada, a la toma de Constantinopla en 1204 es proclamado emperador hasta 1205. Fue encarcelado por los griegos en Andrinópolis.
Nacionalidad: Constantinopla1217 - 1273 Emperador latino 1228 - 1261
Emperador latino de Constantinopla entre 1228 a 1261, Balduino II sucedió a su hermano Roberto de Courtenay, siendo derrocado por Miguel VIII. Vendió un trozo de la cruz de Jesucristo, recuperado por los cruzados, al monarca francés Luis IX.
Nacionalidad: JerusalénRey 1143 - 1162
Entre 1143 y 1162 gobernó el reino de Jerusalén. Era sobrino de Balduino I y miembro de la casa de Anjou. Durante su mandato tuvo lugar la Segunda Cruzada.
*Barbarroja. Federico I
Nacionalidad: Sacro Imperio1122 - 1190 Emperador 1152 - 1190
Hijo del duque de Suabia, Federico II, y de Judith, hija de Enrique el Soberbio, era además sobrino de Conrado III. Heredó de su padre el título de duque, siendo elegido rey de Alemania y de romanos en 1152. Su nombramiento pretendía poner fin a las disputas entre güelfos y gibelinos, pues era miembro de la casa de Welf y de la Hohenstaufen. Consiguió pacificar Alemania y limitar el poder de los señores feudales durante los dos primeros años de su reinado. Su principal pretensión fue recuperar el antiguo poder y prestigio del Imperio. Para ello, fijó el foco de su política y ambiciones sobre la Península italiana. En 1154 atacó Roma, en la primera de una serie de seis expediciones contra suelo italiano. Temeroso de su vida, el papa Adriano IV (1154-1159) huyó de la ciudad. Se enviaron entonces mutuas embajadas que lograron concertar una entrevista en Sutri entre ambos dirigentes. Orgulloso, Federico Barbarroja no se quiso someter al tradicional gesto de sumisión al pontífice de sostenerle el estribo, hasta que fue informado de que dicha tradición, por lo demás simbólica, no significaba en modo alguno vasallaje. Consiguió ser coronado por Adriano IV rey y emperador del Sacro Imperio el 18 de julio de 1154, en Roma, tras derrotar la rebelión comunal encabezada por Arnaldo de Brescia. Este pedía en sus predicaciones el fin del poder temporal de los papas, calando sus ideas en el pueblo romano. La rebelión finalizó cuando Adriano IV lanzó un interdicto contra Roma, sometiéndose sus habitantes y expulsando a Arnaldo de Brescia, quien será ajusticiado por Federico Barbarroja. De vuelta a Alemania, pacificó el territorio nombrando a Enrique el León duque de Baviera y permitiendo a Enrique Jasomirgott cambiar su título de marqués de Austria por el de duque. La amistad de Adriano IV y Federico Barbarroja se vio rota cuando, en 1156, el Papa se vio obligado a levantar la excomunión que pesaba sobre Guillermo de Sicilia, confirmándole como rey de Sicilia y Nápoles. Esta decisión contrarió al emperador, pretendiente de ambos reinos. Los consejos de Reinaldo Dassel, canciller del Imperio, hicieron creer al emperador que el Papa lo consideraba vasallo de la Iglesia, basándose en una pintura existente en Letrán en la que se figuraba la coronación de Lotario bajo la inscripción "El emperador es hecho vasallo del Papa". La pintura fue entonces destruida y la enemistad con el papa empezó a renacer. Un nuevo episodio sucedió durante la Dieta de Besançon (1157), a la que el Papa mandó dos representantes para protestar por el encarcelamiento del arzobispo Eskill, de Lund, junto con una carta en la que consideraba al trono imperial como un beneficio para la Iglesia. Una deficiente traducción de la carta a cargo de Reinaldo Dassel hizo entender al emperador que el Papa lo seguía considerando su vasallo. Inmediatamente se desataron las hostilidades y comenzaron a publicarse escritos contra Adriano IV, postulando Federico I que el Papado debía subordinarse al Imperio. Además, el emperador otorgó en feudo los dominios de la marquesa Matilde, que ésta había legado a la Iglesia, cedió Cerdeña a Welf de Baviera, apoyó a los romanos contra el Papa y rompió los acuerdos tomados en el Concordato de Worms al nombrar por su cuenta a Reinaldo Dassel y Guido de Blandrate como arzobispos de Colonia y Rávena, respectivamente. Dispuesto Adriano IV a excomulgarle, su muerte en 1519 le impidió finalmente realizarlo. En pleno enfrentamiento con la Santa Sede, defendió en la Dieta de Roncaglia (1158) la idea de una autoridad política fuerte desempeñada por el emperador del Sacro Imperio, ejercida de manera absoluta y universal, y con la capacidad de defender e intervenir en los asuntos de la Iglesia. La pretensión de limitar el poder del Papado exclusivamente a la esfera espiritual le enfrentó también al papa Alejandro III (1159-1181), sucesor de Adriano IV, quien apoyó en 1167 la creación de la Liga Lombarda, lo que provocó la expulsión de las tropas imperiales de territorio italiano. Por su parte, Federico Barbarroja apoyó la elección del antipapa Víctor III (1159-1164), un mero instrumento del emperador para controlar la política de la Iglesia, iniciando una estrategia que proseguirá a la muerte de éste con Pascual III (1164-1168). El apoyo a los antipapas le costará a Federico Barbarroja ser excomulgado y la absolución a sus súbditos del juramento de fidelidad que les ligaba con el emperador. Aunque se encontraba aislado entre los monarcas cristianos por su apoyo al antipapa Pascual III, Federico Barbarroja logró entrar en Roma en 1167, entronizar en el Vaticano al antipapa y hacerse coronar por él. Sin embargo, una epidemia asoló a sus ejércitos, registrándose un gran número de víctimas mortales, entre ellas Reinaldo Dassel, diez obispos y gran parte de los nobles. Además, el apoyo de la Liga Veronesa al Papa, más tarde incrementado su poder como Liga Lombarda, obligó al emperador a iniciar intentos de pacto con Alejandro III, que serán finalmente abandonados al reconocer Federico I como papa a Calixto III (1168-1178). En 1174 reanudó por quinta vez sus intentos de expansión pero fue derrotado en Legnano (1176) y fue obligado a aceptar los tratados de Venecia (1177) y Constanza (1183), por los que reconocía a Alejandro III como Papa, renunciaba a sus pretensiones de dominio sobre los Estados Pontificios, reconocía el poder temporal del pontífice y otorgaba autonomía a las ciudades bajo su jurisdicción. A cambio, se le levantaba la pena de excomunión. No obstante, su hegemonía sobre extensos territorios en el norte de Italia siguió incuestionable, habiendo anexionado Borgoña mediante matrimonio en 1156 y vinculado al Imperio la región de Sicilia gracias a la boda (1186) de su hijo Enrique con Constanza, hija del rey de aquél territorio. Federico Barbarroja murió ahogado en 1190 al intentar cruzar el río Saleph, durante la Tercera Cruzada emprendida contra Saladino.
Nacionalidad: Canterbury1118 - 1170 Arzobispo 1162 - 1170
Nombrado canciller de Inglaterra en 1155 por el rey Enrique II, Tomás Becket se convierte en arzobispo de Canterbury en 1162. Renuncia al cargo de canciller para adoptar un modo de vida más austero. En este momento, su actitud y opiniones favorables a la preponderancia de la Corona frente a la Iglesia experimentan entonces un giro radical, pasando a defender la posición contraria y a criticar las actitudes personales de Enrique II. Exiliado, se ve obligado a refugiarse en Francia, en las abadías cistercienses de Pontivy y después en Sens. En 1.170 vuelve a Inglaterra, aparentemente reconciliado con el rey. El conflicto se intensifica y cuatro caballeros le asesinan en su propia catedral. Su muerte tuvo una enorme repercusión en toda la Europa cristiana, convertido en mártir por defender la libertad de la Iglesia frente al poder terrenal. Desde entonces, la peregrinación a Canterbury se convierte en una de las más importantes de Europa. En Inglaterra, el culto a Santo Tomás Beckett es importante hasta la Reforma luterana. Enrique VIII hace destruir el cofre con sus reliquias así como la mayoría de las imágenes del santo, haciendo además desaparecer cualquier mención de su nombre en los textos litúrgicos. Fue canonizado en 1173.
Nacionalidad: BizancioTracia 500 h. - Constantinopla 565 General
Belisario es considerado uno de los más grandes generales bizantinos de todos los tiempos. Desarrolló su carrera bajo la protección de Justiniano y pronto alcanzó el grado de general, venciendo a los persas y sofocando una rebelión en Constantinopla entre los años 530-532. Debido a sus rápidos éxitos el emperador confió en él para poner en marcha su programa de recuperación del antiguo Imperio Romano. Fue enviado a destruir el reino vándalo de Africa, apresando al rey Gelimero. Desde el norte de Africa tomó Sicilia (535) y pasó a Italia donde luchó contra los godos, conquistando la ciudad de Ravena en el año 539. El rey Vitigio fue hecho prisionero. El prestigio de Belisario alcanzó tal grado que los propios ostrogodos le ofrecieron el trono, ofrecimiento que sería rechazado por Belisario. Posiblemente esta oferta sería la causa de que Justiniano le llamara a Cosntantinopla donde fue llamado al orden. Sin embargo pronto recuperó la confianza del emperador y de nuevo marchó a Italia, reconquistando Roma en el año 548. A su regreso definitivo a Constantinopla recibió el título de "magister militum per Oriente" por lo que tuvo que defender el Imperio del ataque de los hunos en el año 559. Participó en una conspiración contra Justiniano por lo que fue encarcelado (562) siendo puesto en libertad al año siguiente. En 565 falleció.
Nacionalidad: Iglesia CatólicaAgnani (Italia) 1235 - 1303 Papa 1294 - 1303
Nacido en Agnani, Italia, fue elegido papa en 1294. Sucesor de Celestino V, a quien, según se dice, incitó a que renunciase a la tiara, llegando algunos a afirmar que lo hizo morir de hambre en un castillo. Es conocido por sus luchas con Felipe el Hermoso de Francia, quien no quiso someterse al poder espiritual del papa, proclamado mediante las bulas "Ausculta Fili" y "Unam Sanctam".
Nacionalidad: Imperio Carolingio742 ó 747 - Aquisgrán 28-1-814 Emperador 768 - 28-1-814
No se conoce con certeza la fecha de nacimiento de Carlos, el hijo de Pipino el Breve y Bertrada. Se proponen dos fechas: 742 ó 747, cualquiera de ellas anterior al matrimonio de Bertrada y Pipino que tuvo lugar en el año 749. De esta manera podríamos considerar a Carlos como un hijo ilegítimo que fue legitimado por su padre, costumbre corriente en el mundo romano que sería asimilada por los germanos. Sobre su educación, infancia y adolescencia no tenemos noticias, toda vez que su principal biógrafo, Eginhardo, omite esta etapa de la vida del rey aludiendo a que "no ha quedado testimonio alguno por escrito que trate de ello". El 24 de septiembre del año 768 fallecía en París Pipino el Breve, víctima de la hidropesía. Había sido coronado rey de los francos por el papa Zacarías en el año 751, momento en el que el rey Childerico era depuesto. A la muerte de Pipino el reino correspondió a sus dos hijos, Carlos y Carlomán. La asamblea general de los francos proclamaron a ambos reyes con la condición de repartirse equitativamente el reino, de la misma manera que Pipino y su hermano Carlomán habían gobernado el reino como mayordomos reales durante el reinado de Childerico. Ambas partes aceptaron y se repartió el reino entre ambos hermanos, a pesar de que los partidarios de Carlomán deseaban romper esa alianza. Tras recibir la corona, Carlos continuó la guerra de Aquitania que su padre no había concluido. Solicitó ayuda a su hermano, ayuda que no fue concedida. La rebelión de Hunoldo (769) fue sofocada y éste se refugió en territorio vascón. Esta acción no fue del agrado de Carlos que envió una delegación a Lupo II para que el rebelde fuera entregado. El duque vascón entregó a Hunoldo y sometió sus territorios a la autoridad del monarca franco. En diciembre del año 771 fallecía Carlomán, tras tres escasos años de reinado. Este fallecimiento evitaría una más que probable guerra entre los partidarios de ambos monarcas. Carlos era nombrado, según Eginhardo, "único rey con el consenso de todos los francos". En realidad, Carlos no respetó los derechos a la corona de sus sobrinos y se proclamó rey de todos los francos. La esposa de Carlomán, sus hijos y sus partidarios tuvieron que huir a Italia, poniéndose bajo la protección de Desiderio, el rey de los longobardos, lo que indica que no eran bien acogidos en la corte franca. Una de las primeras acciones que emprendió Carlos como rey único de los francos fue hacerse eco de la solicitud del papa Adriano I para expulsar a los longobardos de Italia. La guerra se prolongó entre los años 773 y 774, consiguiendo la rendición del rey Desiderio y la expulsión de su hijo Adalgiso de Italia. El papa conseguía recuperar las tierras que formarán los Estados Pontificios pero las amenazas continuaban en la península Itálica. El duque de Fruil, Rodgauso, se rebeló en el año 776. Carlos volvió a Italia para acabar con la revuelta y una vez sofocados todos los fuegos impuso a su hijo Pipino como rey. Corría el año 781. Finalizadas las campañas en Italia, Carlos pudo destinar mayores esfuerzos a combatir a los sajones, pueblo germánico que ocupaban el territorio situado entre el Elba y el mar del Norte. La delimitación de fronteras -donde se producían continuos enfrentamientos- y cuestiones religiosas -los sajones se mostraban hostiles al cristianismo al considerarlo un elemento de penetración franca"- serían las causas de la guerra. Los cronistas hacen referencia a 33 años consecutivos de lucha, manifestando que los sajones nunca cumplían los tratados y las rendiciones firmados. Carlos se puso en varias ocasiones al frente de su ejército para luchar contra el peligro sajón, confiando también las tropas a los condes cuando otros asuntos requerían su presencia. La guerra acabó hacia el año 804. Diez mil sajones fueron deportados mientras que los restantes serían acogidos en la fe cristiana y obligados a guardar fidelidad al rey franco, "formando un solo pueblo". Las miras expansionistas de Carlos no se limitaban a la península Itálica o el territorio de los sajones. En el año de 778 inició una contundente expedición contra el norte de la península Ibérica, dominada por los musulmanes. Animado por los cristianos, Carlos llegó a la plaza fuerte de Zaragoza tras tomar Pamplona. El gobernador musulmán no rindió la plaza lo que motivó el inicio de un largo asedio. Las noticias que llegaron procedentes de Sajonia no eran muy halagüeñas por lo que Carlos se retiró a Francia a través del desfiladero de Roncesvalles. El 15 de agosto de 778 la retaguardia del ejército franco sufrió una emboscada por parte de grupos de vascones, posiblemente apoyados por musulmanes. Desde lo alto de los montes, los vascones atacaron a las tropas francas dirigidas por Roldán, prefecto de la marca de Bretaña. En la desigual lucha perecieron buena parte de la élite militar franca: Roldán, el senescal Egihardo y el conde Anselmo. Cuando la vanguardia quiso reaccionar, los asaltante huyeron aprovechando lo escarpado del terreno y la oscuridad "de la noche que ya empezaba a caer". Este episodio daría lugar al famoso cantar de gesta titulado "La chanson de Roland". En el enclave navarro de Roncesvalles se conserva un edificio conocido como el "Silo de Carlomagno" donde la tradición cuenta que están enterrados los huesos de los muertos en esta batalla. Más fácil es de creer que la cantidad de restos que se conservan en este lugar procedan de los cuerpos de los peregrinos enfermos que fallecían en este lugar de acceso al Camino de Santiago. La península de Armorica será el siguiente punto que Carlos someta a su dominio. Los pueblos bretones de esta zona se sometieron en el año 786 aunque su carácter rebelde les llevó a provocar nuevas intervenciones en los años 799 y 811. El sometimiento del ducado de Benevento, en el sur de Italia, será su próximo objetivo. El duque Aragiso se adelantó a los planes del rey franco y entregó a sus dos hijos como rehenes, al tiempo que juraba fidelidad. Carlos admitió las ofertas del duque y tras recibir los juramentos se retiró a tierras francas. En Baviera nos encontramos con el nuevo punto de conflicto debido al duque Tasilón y su alianza a los ávaros. Carlos no soportó esta desobediencia y se dirigió con un fuerte ejército la región de Baviera. El duque, ante la actitud amenazante del monarca franco, suplicó clemencia a Carlos con lo que se zanjó de manera rápida este frente de conflicto. Tasilón fue condenado a pena de prisión perpetua en el monasterio de Jumièges debido a sus antecedentes rebeldes -ya se había rebelado antes contra Carlomagno en el año 787 por lo que debió jurar fidelidad al rey franco-. En su actitud expansionista serán los eslavos los nuevos enemigos de Carlos luchando contra los welátabos a los que se aliaron los sajones. Estos pueblos del mar Báltico se rebelaron en diferentes ocasiones realizándose diversas expediciones militares contra ellos. Pero la guerra más importante de esta década de 790 es la emprendida contra los ávaros, en la que el rey intervino personalmente en las luchas que tuvieron lugar en la actual Hungría. Serían su hijo Pipino y los demás miembros de la nobleza quienes recibieron la confianza del monarca para dirigir la larga contienda pues duraría entre los años 791 y 803. La región de Panonia quedó deshabitada según Eginhardo mientras el dinero y los tesoros acumulados por los ávaros pasaron manos francas. Las últimas guerras libradas por Carlos fueron contra los bohemios(805), los linones (808-811) y los daneses (810), pueblo este último que pretendía dominar toda la Germania dirigido por su rey Godofredo. Como consecuencia de todas estas luchas llevadas a cabo durante los cuarenta y siete años que duró el reinado, el reino de Carlos se duplicó en proporciones respecto a lo heredado de su padre. Las fronteras se extendieron hasta la península Ibérica y el centro de Europa, contando con Italia, Germania, Sajonia y la Dacia, estableciendo en el Danubio la frontera este. De ahí la denominación "Carolus Magnus" con la que ha trascendido su nombre a la Historia y la coronación de Carlos como emperador y augusto en Roma por el papa León III el 23 de diciembre del año 800, igualándose a los emperadores de Oriente que se consideraban los auténticos herederos de los emperadores romanos. Este nombramiento como emperador sería precedido por la ayuda solicitada a Carlos por el papa León III quien había sido atacado un año antes por un grupo de conjurados que le obligaron a escapar a Sajonia donde se encontró con Carlos, solicitando su ayuda. La intervención de Carlos permitió el restablecimiento de la paz en los Estados Pontificios. Al igual que la guerra, la diplomacia también será uno de los puntos fuertes de Carlos, estableciendo contactos con los reyes más reputados de su tiempo como Alfonso II el Casto de León, Harun al-Rachid el califa abassí de Bagdad o los emperadores de Constantinopla. Resulta francamente interesante conocer la vida privada del rey franco. Antes de sus numerosos matrimonios Carlos mantuvo relaciones con una joven noble llamada Himiltrudis, naciendo de esta relación un hijo llamado Pipino el Jorobado. Hacia el año 770 casó con Ermengarda, hija de Desiderio, el rey de los longobardos, a la que repudió por desconocidos motivos tras un año del enlace. La segunda esposa fue Hildelgarda, mujer noble de origen suabo con la que tuvo 9 hijos, cuatro varones -Carlos, Pipino y Ludovico entre ellos - y cinco mujeres - Rotrudis, Berta y Gisela son las que conocemos-. A la muerte de Hildelgarda -30 de abril del año 783- casó con Fastrada, de origen germánico, con quien al menos tuvo dos hijas: Teodorada y Hiltrudis mientras que una concubina le daba otra hija de nombre Rodaida. De nuevo viudo en el año 794 contrajo matrimonio con la alamana Liutgarda con la que no tuvo hijos. Al fallecer ésta se relacionó con cuatro concubinas: Madelgarda, con quien tuvo a Rotilda; Gersvinda, madre de Adeltrius; Regina que tuvo dos hijos, Drogón y Hugo; y Adelinda con la que tuvo a Teodorico. En total, diez relaciones conocidas de las que nacieron al menos 18 hijos conocidos. Todos estos hijos e hijas recibieron la formación típica medieval dividida en dos grupos: el "trivium" formado por la gramática, la retórica y la dialéctica y el "quadrivium" integrado por aritmética, geometría, música y astronomía. Eginhardo nos presenta a Carlos absolutamente preocupado por la educación de su vasta descendencia e incluso cuenta que ""nunca cenó sin ellos ni se fue de viaje sin llevárselos consigo". Entre los principales valores de Carlos encontramos, siempre según el cronista Eginhardo, la amistad, el interés por lo procedente de otras tierras, la honradez o el afecto hacia sus súbditos. En su descripción física alude a un hombre de alta estatura -1´92 metros según la exhumación de su cuerpo que se produjo en el año 1861-, "hermosa cabellera blanca y rostro agradable y alegre". El cronista dice que gozó de buena salud a excepción de sus últimos cuatro años en los que eran frecuentes las fiebres e incluso cojeó de un pie, pudiendo padecer la gota ya que los médicos le recomendaban la abstinencia de guisos asados, recomendaciones que el rey no seguía. Su moderación en la comida y en la bebida contrasta con esta atracción hacia los guisos. La comida siempre se acompañaba de música o de lecturas. Tras el almuerzo solía dormir dos o tres horas. Entre sus aficiones encontramos la caza, la equitación, los baños termales y la natación. Eginhardo dice que "vestía según la costumbre de su pueblo (...) sobre el cuerpo llevaba una camisa y unos calzones de lino; encima, una túnica ribeteada de seda y medias calzas y luego unas bandas alrededor de las piernas y calzado en los pies. (...) Se cubría con un manto azul y siempre llevaba ceñida una daga cuya empuñadura y cuya vaina eran de oro o plata". Durante el reinado de Carlos se manifiesta un importante renacimiento cultural al proteger a importantes personajes como Alcuino de York, quien se convirtió en uno de los principales impulsores de la cultura carolingia. El propio Carlos cultivó las artes liberales, especialmente la astronomía. También se intereso por la labor legislativa al unificar y completar las leyes francas al tiempo que ordenó la recopilación de todas las leyes de los pueblos que estaban bajo su mando. Al igual que los emperadores romanos Carlos también se preocupó por desarrollar una importante labor constructiva con la que demostrar la grandeza de su reinado como podemos constatar en los magníficos palacios de Aquisgran y su capilla palatina o la construcción de iglesias en todos los rincones de su reino. Antes de morir, Carlos asoció al trono a su hijo Ludovico, en aquellos momentos rey de Aquitania, y le nombró heredero de la corona imperial ante la asamblea de próceres. Esta ceremonia de coronación se realizó el 11 de septiembre del año 813. A primeros de noviembre, Carlos regresó de cazar a su palacio de Aquisgrán, donde sufrió un fuerte proceso febril en el mes de enero del año 814. La dieta que se le impuso para la recuperación no fue efectiva, complicándose la fiebre con "un dolor en el costado, lo que los griegos llaman pleuresía" en palabras de Eginhardo. El 28 de enero de ese año fallecía Carlomagno a la edad de 72 años, tras 47 de reinado. Su cuerpo fue sepultado en Aquisgrán.
Nacionalidad: EspañaGante 1500 - Yuste 1558 Rey 1516 - 1556
El 24 de febrero de 1500 nacía en Gante Carlos I de España y V de Alemania. Sus padres eran Felipe de Habsburgo, conocido como El Hermoso, archiduque de Austria, duque de Borgoña, de Luxemburgo, de Brabante, de Güeldres y Limburgo y conde de Tirol, Artois y Flandes, y doña Juana de Castilla, heredera de la corona castellana y de la aragonesa. Sus abuelos maternos eran nada menos que los Reyes Católicos y los paternos el Emperador Maximiliano I y doña María de Borgoña. Como heredero de todos ellos al ser el primogénito, Carlos obtendrá uno de los mayores imperios del Renacimiento, siendo uno de los primeros impulsores de la idea de unificación en Europa, tomando la religión católica como el instrumento unificador. La educación del joven príncipe corrió a cargo de su tía Margarita de Austria, mujer de gran cultura que inculcará en Carlos el amor por las artes y la cultura. Como preceptor se hizo cargo del muchacho el cardenal Adriano de Utrecht, futuro papa Adriano VI. Desde los nueve años encontramos a otro personaje en el círculo de Carlos: Guillermo de Croy, señor de Chievres, hombre de gran codicia que se ganó la confianza del príncipe, durmiendo incluso en la misma habitación que él con la excusa de que si el príncipe se despertaba, tendría alguien con quien hablar. Aunque esta relación no parece aparentemente positiva, el contacto de Carlos con Guillermo de Croy le convertirá en un hombre de estado, acercándole a los secretos del gobierno. En 1516 fallece don Fernando el Católico, dejando vacante la corona de Aragón, mientras que la corona castellana estaba en manos de doña Juana, recluida en Tordesillas debido a su enajenación mental. Esto convertía a Carlos en regente del reino de Castilla aunque en realidad todo el poder quedaba en sus manos. Carlos embarcó en Flandes con destino a la península ibérica, llegando a las playas de Asturias en septiembre de 1517. El cardenal Cisneros, regente de Castilla, acudió al encuentro con el nuevo rey, pero falleció en Roa antes de que se produjera. El cardenal no sufrió la humillación de ver cómo el monarca le entregaba la dimisión, ingrata recompensa para un hombre que tanto había dado al reino. La camarilla de flamencos que rodeaba al inexperto rey (tenía 17 años y no sabía hablar castellano, por lo que no se podía comunicar con sus súbditos) acaparó rápidamente todos los puestos de confianza, iniciando una auténtica caza y captura de los caudales del reino que salían de las fronteras para la financiación de los asuntos en los Países Bajos. Lo primero que hizo Carlos en tierras españolas fue visitar a su madre, encerrada en Tordesillas desde hacía más de siete años. El encuentro entre madre e hijos (a Carlos le acompañaba su hermana Leonor, futura esposa de Manuel I de Portugal) fue emotivo ya que hacía más de doce años que no se veían. Posiblemente el motivo de la visita sería la legitimación de la decisión de coronarse rey (lo que había hecho en Bruselas el 14 de marzo de 1516) cuando la legítima propietaria de Castilla no había fallecido. Para solucionar este problema legal y político, desde este momento en todos los documentos oficiales figurarán el nombre de ambos soberanos, siempre el de la reina en primer lugar. Otro problema le surge a la camarilla flamenca con don Fernando, el hermano menor de Carlos, nacido en Alcalá de Henares, criado y educado en Castilla, con un amplio número de partidarios dispuestos a coronarle. Incluso los Guzmán pensaron en llevar a Fernando a Aragón donde sería coronado rey con el apoyo de doña Germana de Foix, segunda esposa del Católico. Con el fin de eliminar problemas, Chievres decidió enviar a don Fernando a Bruselas. Sin embargo, las Cortes reunidas en Valladolid se opusieron a dicha medida, exigiendo que Fernando permaneciera en España al menos hasta que Carlos tuviera descendencia. Pero Chievres consiguió su objetivo y envió al infante a Bruselas, saltándose la decisión de la asamblea. Los ánimos estaban bastante encendidos ya que los procuradores a Cortes (encabezados por el representante de Burgos, Juan de Zumel) no admitían que la presidencia estuviera en manos de un extranjero, Jean de Sauvage, ni los desmanes cometidos por los flamencos. Por eso se realizaron una serie de exigencias al rey como el respeto a las leyes de Castilla, el inmediato despido de los extranjeros que tuviera a su servicio, el aprendizaje del castellano y la ubicación de castellanos en los cargos más importantes. Carlos juró respeto a las leyes castellanas y consiguió un crédito de 600.000 ducados por un plazo de tres años. Superado el escollo castellano, Carlos pone rumbo a Aragón donde las complicaciones también estaban a la orden del día. En las Cortes aragonesas existía un amplio grupo que quería nombrar príncipe-heredero a Fernando. Tras meses de duros debates, las Cortes reconocieron a Carlos como rey y le otorgaron un empréstito de 200.000 ducados. Después pondría rumbo a Cataluña donde los tratos también se prolongaron en el tiempo. Un año tuvo que estar el rey entre sus súbditos catalanes. En Barcelona recibe la noticia de su elección como Emperador, el 28 de junio de 1519. Este nombramiento encenderá los ánimos en Castilla, al considerar que los gastos de Carlos aumentarían considerablemente. Rápidamente se extendieron las protestas desde Toledo a las otras ciudades del reino, exigiendo la convocatoria de una reunión de Cortes donde se recomendase al monarca que no se marchara del país, que no permitiese el saqueo de las arcas castellanas por los flamencos y que éstos abandonasen los cargos que ocupaban. Las Cortes fueron convocadas en Santiago de Compostela, pero con unos propósitos absolutamente diferentes. Los procuradores eran reacios a las propuestas que les hacían los consejeros de Carlos por lo que Gattinara decidió unilateralmente trasladar la reunión a La Coruña, donde se concedió el ansiado subsidio con el que Carlos se trasladaba a Alemania. El cardenal Adriano de Utrecht quedaba como regente de un país en rebeldía. Desde que Carlos marchó a Alemania (mayo de 1520) hasta su regreso a Castilla (julio de 1522) se sucederán en España dos de los episodios más destacables del siglo XVI: la revuelta de las comunidades en Castilla y la rebelión de las germanías en Valencia. Camino de Alemania, Carlos hizo escala en Inglaterra, llegando a Aquisgran donde sería coronado Rey de Romanos en octubre de 1520. Al recibir el nombramiento, el nuevo emperador se compromete a mantener los derechos de los príncipes, preservar el orden imperial, emplear oficiales alemanes en el interior de las fronteras, restaurar el Consejo de Regencia y convocar una Asamblea de los Estados. Dicha asamblea, denominadas Dietas, tiene lugar en Worms en 1521. En esta reunión Fernando es nombrado regente del Imperio y elevado al rango de archiduque. Lutero es declarado proscrito, iniciándose el enfrentamiento religioso que implica la expansión del luteranismo. En la primavera de 1522 Carlos pone rumbo a España, haciendo una escala en Inglaterra para firmar un acuerdo con Enrique VIII con el fin de establecer la defensa de ambos países contra Francia. En julio desembarcaba en Santander y desde ese momento van a primar los asuntos exteriores sobre la política interior. Y es que Carlos tendrá desde el primer momento una idea imperial en su cabeza, imaginando una comunidad supranacional de estados europeos unidos por la religión cristiana y vinculados por la común pertenencia a la dinastía de los Habsburgo. Esta es la razón por la que se considera a Carlos como uno de los primeros impulsores de la Unión Europea. Lógicamente estas ideas provocan una serie de obstáculos. El primero será Francia, cuyas fronteras estaban rodeadas por los territorios de los Habsburgo, algo similar a lo que le ocurre al Papado. Entre 1521 y 1544 Carlos va a involucrarse en cuatro guerras con Francisco I de Francia, guerras en las que el emperador saldrá victorioso en mayor medida. Esta es la razón por la que se considera a ambos personajes como los últimos caballeros medievales, llegándose a plantear el enfrentamiento mutuo en un duelo para solucionar los conflictos. Muerto Francisco I será su sucesor, Enrique II, quien continúe con el conflicto, obteniendo el francés una contundente victoria. Con el fin de fortalecer sus relaciones con Portugal, Carlos eligió como esposa a Isabel, la hija del rey Manuel I de Portugal y María de Aragón, hija de los Reyes Católicos. Los cónyuges eran primos hermanos lo que no eran una disculpa ya que en la época los matrimonios entre los miembros de las familias reales se consideraban una manera de mejorar la raza. Isabel era una mujer muy atractiva, con unos bellos y grandes ojos azules y un cuerpo esbelto, destacando por encima de su belleza su inteligencia, como tendrá oportunidad de demostrar en sus numerosas regencias del país. La boda se realizó en Sevilla el 11 de marzo de 1526, pasando los novios la luna de miel en Granada. Parece que el amor nació de manera inmediata entre los cónyuges, a pesar de que Carlos ya tenía una hija, fruto de su relación con Margarita van Gest durante su estancia en Flandes, en 1522. Margarita de Austria será el nombre de la primera hija ilegítima de don Carlos. Uno de los momentos más importantes para Carlos será su coronación como emperador que tuvo lugar en Bolonia el 24 de febrero de 1530, el mismo día de su cumpleaños. Clemente VII se convertía en aliado de la causa imperial al imponer a Carlos la corona de hierro de los longobardos. Los cronistas nos cuentan que para pasar del palacio donde se alojaba el séquito imperial hasta la catedral de San Petronio se había colocado una pasarela, que se rompió en el momento de pasar la comitiva. Todo quedó en un gran susto, solventado por las fiestas que se celebraron. El acuerdo con el papa que permitió la coronación obligará a Carlos a la defensa de los territorios de la Iglesia, sometiendo Florencia y llegando a un acuerdo con Venecia. De esta manera se pacificaba temporalmente la península italiana. El nuevo enemigo procede ahora de Turquía y tiene un nombre propio Solimán I. En este nuevo frente de conflicto destaca la toma de Túnez por las tropas imperiales el 21 de julio de 1535. Dos duros golpes va a soportar Carlos en 1539. El fallecimiento de su esposa el 1 de mayo de 1539 provocó su hundimiento, retirándose al monasterio de la Sisla durante dos meses, tiempo en el que no permitió ningún tipo de visitas. Cuando parecía lago recuperado le llega la noticia del motín que se produce en su ciudad natal, Gante. El levantamiento había sido provocado por la negativa de los ciudadanos a pagar impuestos para sufragar las guerras contra Francia, incitando a la revuelta a las ciudades vecinas. Para sofocar la rebelión, Carlos cruzó Francia invitado por Francisco y cuando llegó a Gante la revuelta se sofocó, con su sola presencia. Nueve dirigentes fueron ejecutados, la villa perdió sus privilegios y tuvieron que pagar una indemnización, siendo obligados a mantener una guarnición. Como hombre de acción, una vez tranquilizados la mayoría de los frentes, Carlos se enzarzó en una nueva empresa: la expedición contra Argel en octubre de 1541, encontrándose con una tempestad que provocó la pérdida de 14 galeras y unas 100 embarcaciones menores. La operación resultó un fracaso y el emperador ordenó reembarcar. Un nuevo frente de conflicto se cierne sobre el Imperio, siendo uno de los mayores fracasos cosechados por Carlos. La cuestión protestante motivará un gravísimo problema en Alemania, consiguiendo imponer el emperador la fuerza en la batalla de Muhlberg (24 de abril de 1547), inmortalizado por Tiziano en un excelente retrato ecuestre. Sin embargo, esta euforia no es muy duradera ya que los alemanes se aliaron con Enrique II de Francia, quien tomó las plazas imperiales de Metz, Toul y Verdún, al tiempo que los turcos tomaban Trípoli y Mauricio de Sajonia traicionaba la confianza de Carlos y le atacaba en Innsbruck, pudiendo escapar por los nevados pasos de los Alpes para salvarse en Italia. Las amenazas eran continuas y las dificultades financieras aún peores, por lo que Carlos, cansado y decepcionado, decidió abdicar. El 25 de octubre de 1555, ante los Estados Generales reunidos en Bruselas, el emperador dejaba la soberanía de los Países Bajos en manos de su hijo Felipe. Tres meses más tarde, el 16 de enero de 1556, renunciaba a las coronas de Castilla, León, Aragón-Cataluña, Cerdeña y Sicilia a favor de Felipe. En septiembre del mismo año abdicaba el gobierno del Imperio en su hermano Fernando y se embarcaba rumbo a España. En febrero de 1557 llega al monasterio de Yuste con el fin de descansar, disfrutar de la comida y de la tranquilidad, ganada tras casi 30 años de intenso ajetreo. En Yuste fallecía Carlos I de España y V de Alemania el 21 de septiembre de 1558.
Nacionalidad: Constantinopla1000 - 1058 Patriarca 1043 - 1058
De noble familia bizantina, Miguel Cerulario (mercader de cera) tuvo ambiciones políticas desde muy joven. Tomado el hábito monacal, su carrera eclesiástica llegó a la cumbre al ser nombrado patriarca en 1043 por el emperador Constantino IX Monómaco. En plena época de distanciamiento entre ambas Iglesias, durante su mandato se acrecentaron las diferencias que ya separaban a Bizancio y Roma. Acosada Bizancio por la presencia normanda en el sur de Italia, la posible alianza del Imperio Bizantino con Roma podría limitar y aun suprimir el poder que Miguel Cerulario desempeñaba como patriarca. Para impedirlo emprendió una política de distanciamiento y confrontación, ordenando en 1052 cerrar todas las iglesias y monasterios latinos de su territorio que rechazasen adoptar el rito griego. Buscó el apoyo del pueblo planteando las diferencias con Roma en una cuestión muy querida por el pueblo bizantino: la defensa de los ritos. Así, su política de propaganda se encaminó a denunciar los errores del ritual latino, para lo que encomendó al obispo de Ochrida (Bulgaria) la redacción de una carta que, dirigida al obispo de Triani (Italia), denunciara dichos errores. Además, encargó la escritura de un documento al monje del monasterio de Estudios, Nicetas Stetathos, con el mismo argumento. En definitiva, la diferente concepción de los ritos se basaba en cuestiones tales como la comunión con pan ácimo por parte de los latinos, el comer carnes sofocadas, suprimir el aleluya en Cuaresma, ayunar los sábados, o la carencia de barba por parte de los sacerdotes romanos. La respuesta de Roma no se hizo esperar, encargando al cardenal Humberto de Silva Cándida la redacción de un manifiesto en que se ponían de relieve los errores de los griegos, como el matrimonio de sus sacerdotes, y la supremacía universal del Pontífice romano. Aprovechando las buenas relaciones establecidas con el emperador Constantino IX, el papa León IX envió una legación a Miguel Cerulario con el fin de establecer conversaciones. La elección de los representantes de Roma no fue muy feliz, al designar a los radicales Humberto de Silva Cándida, al arzobispo Pedro de Amalfi y al Canciller de la Iglesia romana, Federico de Lorena. Llegados a Constantinopla, las discusiones no llegaron a buen término, en medio de un clima de tensión generado por la presión popular contra los legados romanos. Las posturas se radicalizaron aun más, prohibiendo el patriarca de Constantinopla decir misa a los romanos. Estos, por su parte, el 16 de julio de 1054 depositaron en el altar de Santa Sofía, en plena misa pública, una bula de excomunión contra Miguel Cerulario, redactada con suma dureza. Su propósito era lograr el arrepentimiento del patriarca, o bien que fuese depuesto por el emperador. Sin embargo, no contaban con el apoyo del pueblo bizantino a su patriarca. Enconadas las posturas, nadie reparó en la validez de la excomunión, por cuanto la muerte del papa León IX el 19 de abril anulaba los poderes concedidos a su legados quienes, por otra parte, no estaban autorizados a promulgar una excomunión. Varios intentos de mediación fracasaron, como los del emperador Constantino IX y el santo patriarca Pedro de Antioquía. El empuje popular hizo que la bula de excomunión contra Miguel Cerulario fuera públicamente quemada. Además, para consumar la ruptura, el 24 de julio un sínodo de la Iglesia bizantina acordó declarar culpables a los latinos de pervertir la fe y de celebrar equivocadamente los ritos. Se promulgó también un decreto de excomunión contra los legados pontificios. La ruptura entre ambas Iglesias se hará definitiva, con la unión a la Iglesia de Oriente de los pueblos por ella evangelizados, como serbios, búlgaros, rusos o rumanos. El posterior ataque de los cruzados francos a Constantinopla no hará sino ahondar las distancias. Miguel Cerulario asumió encabezar una conspiración contra Miguel IV, sucesor de Constantino IX, y ayudó a subir al trono a Isaac Comneno, siendo en 1058 desterrado por el emperador.
Nacionalidad: EspañaAlcalá de Henares 1547 - Madrid 1616 Escritor
Nacido en 1547 en Alcalá de Henares, su padre era un humilde hidalgo que practicaba la cirugía, quizá de ascendencia judía. Durante su infancia y juventud estudió con los jesuitas, en la Universidad de Salamanca y en Madrid como alumno del humanista López de Hoyos. En 1569 fue acogido en Italia al servicio del cardenal Acquaviva, luchando dos años más tarde en Lepanto. En esta batalla resultó herido en una mano, y no manco, como tradicionalmente se le atribuye. Capturado por los turcos en 1575, fue liberado en 1580 por los frailes trinitarios. A su vuelta a España, luchó sin éxito por ver reconocidos sus méritos y no logró pasar a América, al no obtener el permiso necesario. Trabajó como recaudador de impuestos, siendo encarcelado en Sevilla en 1597 por algunos turbios asuntos. Casado en 1584 en Esquivias (Toledo), su matrimonio fue desafortunado. Parece que un asunto de faldas le llevó padecer la acción de la justicia en Valladolid. Trasladado a Madrid, entró bajo la protección del conde de Lemos, lo que no impidió que muriera en 1616 inmerso en la pobreza. A lo largo de su vida escribió numerosas obras y cultivó variados estilos. Comenzó con la novela pastoril, escribiendo la primera parte de "La Galatea" (1585), sin ningún éxito. Su siguiente trabajo no se producirá hasta veinte años más tarde, siendo éste la primera parte del "Quijote". También se dedicó al teatro, intentando adaptarse a la moda impuesta por el exitoso Lope de Vega. Tampoco en este terreno alcanza el reconocimiento buscado. En 1615 imprime la segunda parte del Quijote, ocho comedias y ocho entremeses, dejando inédita otra obra, "Numancia", que no se publicará hasta el siglo XVIII. Es autor también de importantes obras como las "Novelas ejemplares" (1613), en las que se incluyen excelentes relatos como "Rinconete y Cortadillo", "El licenciado Vidriera" o "La ilustre fregona", por citar algunos, y "Los trabajos de Persiles y Segismunda" (1617). Su obra maestra, "El Quijote", constituye una de las cimas de la literatura universal. Falleció en Madrid en 1616.
Nacionalidad: RomaRoma 12-7-100 a.C. - Marzo 44 Cónsul y dictador 69 a.C. - 44 a.C.
Cayo Julio César era miembro de una de las familias más laureadas de Roma, los Julios, que se decían descendientes de la misma Afrodita. Esta familia no poseía una gran fortuna ni una posición política importante, por lo que se decantó por las propuestas democráticas de Mario. Perseguido por Sila, quien le obligó a divorciarse de su esposa Cornelia por ser hija de Cinna, César huyó del dictador hasta que consiguió el perdón. Después inició su carrera militar en el Asia Menor hasta que Sila falleció y regresó a Roma, donde inició su carrera senatorial. En el año 69 a.C. fue nombrado cuestor de la Hispania Ulterior, para regresar años después a Roma, donde se inició su enfrentamiento con Pompeyo. Durante la estancia de éste en Oriente, Julio consiguió los nombramientos de edil, pontifex maximus y pretor urbano, congraciándose con la plebe y con el orden ecuestre al aliarse con Craso. En el año 61 César era nombrado gobernador de la Hispania Ulterior, pero al año siguiente estaba de regreso en Roma. Los tres personajes con mayor influencia en aquellos momentos -César, Pompeyo y Craso- decidieron unirse para formar el Primer Triunvirato, consolidado con el matrimonio de Julia, hija de César, con Pompeyo. Los triunviros se repartieron las zonas de influencia: Craso recibió el gobierno de los países de Oriente, Pompeyo permanecía en Roma y César asumía el mando militar de la Galia Cisalpina y el proconsulado de la Narbonense. Desde ese momento se enzarzó en una dura guerra contra los galos que duraría ocho años, consiguiendo la conquista de toda la Galia. Luchó contra los germanos en las orillas del Rin y envió dos expediciones a Britania. La muertes de Julia y Craso (54 y 53 a.C.) motivaron la separación entre Pompeyo y César, al desaparecer los vínculos entre ambos. Cada uno deseaba imponerse debido a su tendencia al poder personal, lo que provocaría una encarnizada guerra civil. Cuando en el año 49 Julio acababa su mandato en la Galia, el Senado le ordenó que retirara las legiones del territorio galo, lo que motivó que César atravesara el Rubicón y marchara con sus tropas hacia Roma. Pompeyo se retiró a los Balcanes para preparar la resistencia, mientras su lugarteniente en España era derrotado. César y Pompeyo se enfrentaron en Farsalia (48 a.C.), viéndose obligado Pompeyo a huir a Egipto, donde fue asesinado por Ptolomeo XIV. César no fue muy agradecido con quien mandó asesinar a su rival, ya que marchó a Egipto y le arrebató el trono para entregárselo a Cleopatra, con la que mantuvo una estrecha relación. Desde ese momento se dedicó a poner fin a las resistencias pompeyanas, venciendo definitivamente en Tapso y Munda a los partidarios de Pompeyo. En el año 45 a.C. se convertía en el único dueño de la situación y recibía el nombramiento de "dictador perpetuus", al que había de añadir los títulos de "imperator", "pontifex maximus" y "pater patriae". César ejercía más bien como un monarca, lo que motivó que las alarmas saltaran entre los partidarios de la república. Sus enemigos se aliaron para poner fin a su vida, lo que ocurrió en los idus de marzo del año 44 a.C., siendo Bruto el brazo ejecutor. El heredero de su programa reformista será su hijo adoptivo Octavio
Nacionalidad: PersiaRey Siglo VI a.C.
La dinastía de los aqueménidas se inauguró con Ciro el Grande, hijo de Cambises y de Mandane. Una de sus primeras iniciativas fue derrocar a su abuelo materno Astiages, contando con la inestimable colaboración de los nacionalistas persas. En la persona de Ciro se unificaban los reinos medos y persas (555 a.C.) estableciendo la capital en Susa. El plan de expansión diseñado por Ciro se inició con la conquista de Lidia, cuyo rey , Creso, había auspiciado una coalición antipersa junto al faraón y el reino babilonio. La capital lidia, Sardes, fue ocupada, convirtiéndose en cabeza de puente para las ansias expansionistas de Ciro. Pronto las ciudades griegas del Asia Menor se convirtieron en tributarias del persa. La Bactriana y la Sogdiana serían los próximos objetivos de su plan. La lucha contra Babilonia se convertirá en su siguiente caballo de batalla, derrotando al rey Nabónido. Siria, Palestina y Fenicia caerán en manos persas. En una campaña contra los escitas falleció Ciro en el año 528 a.C., dejando a Cambises II como heredero. La división del Imperio Persa en satrapías será una de las principales aportaciones de Ciro a la administración. Las vías de comunicación serán renovadas y ampliadas, al tiempo que las ciudades serán embellecidas. La capital, Persépolis, será la gran fundación de Ciro.
Nacionalidad: Iglesia CatólicaBurdeos 1264 - 1314 Papa 1305 - 1314
Nacido en Burdeos, fue elegido en 1305. La influencia de Felipe el Hermoso le hizo trasladar la sede papal a la ciudad francesa de Avignon lo que, junto a otras decisiones consideradas favorables a la corona francesa, le granjeó numerosas enemistades. Suprimió la Orden de los Caballeros Templarios.
Nacionalidad: Egipto70 a.C. - 30 a.C. Reina - 30 a.C.
A la muerte del rey de Egipto Ptolomeo Auletes, la corona quedó en manos de sus dos hijos: Ptolomeo y Cleopatra que debían desposarse. La joven deseaba conquistar el poder en solitario por lo que inició una serie de maniobras para acabar con la vida de su hermano. La corte, que le era hostil, acusó a Cleopatra de tratar de matar al rey lo que obligó a huir a la joven reina. Su próximo movimiento sería ponerse al frente de un ejército para desencadenar una contienda civil. La llegada de César a Egipto persiguiendo a Pompeyo dará un nuevo empuje al enfrentamiento fratricida. Ptolomeo apuesta por César y hace asesinar a su enemigo. Pero Cleopatra no dudó en utilizar su encanto femenino para hacerse con el apoyo del romano, acudiendo al palacio y seduciendo al gran general. La derrota de Ptolomeo fue el siguiente paso, consiguiendo la bella reina su propósito. Durante nueve meses César y Cleopatra vivieron una intensa historia de amor de la que nació Cesarión. Una vez más Cleopatra va a participar en la historia de Roma cuando Antonio se hizo dueño del Asia Menor. Tras la batalla de Filipos (42 a.C.) Antonio se reunió con ella en Tarso. La llegada de la reina fue espectacular y con su belleza y encanto conquistó también el corazón del general romano. En el año 37 ambos se desposaron para convertir en realidad uno de sus sueños: la creación de una gran monarquía oriental al margen de Roma. Para evitar esta empresa Octavio dirigió sus fuerzas a Oriente donde se libró la batalla de Accio (31 a.C.) en la que Antonio salió derrotado. Cuando Octavio se personó en Alejandría para contemplar aquella belleza que había cautivado a los dos mejores generales romanos, Cleopatra intentó hacer lo mismo con él pero la edad de la reina y el carácter frío de Octavio motivaron que la maniobra de seducción no obtuviera el deseado resultado. Octavio informó a la reina egipcia de sus intenciones de llevarla a Roma como parte de su cortejo triunfal. Una humillación de ese talante no era admitido por Cleopatra que no dudó en encerrarse en su palacio y suicidarse poniéndose un aspid en el pecho. Cuando Antonio conoció la noticia de la muerte de su amada corrió el mismo destino.
Nacionalidad: Sacro Imperio1039 - 1152 Emperador 1137 - 1152
Fundador de la dinastía de Hohenstaufen. Hijo de Federico de Suabia, subió al trono por la muerte de Lotario. Hizo la Segunda Cruzada, que fracasó estrepitosamente, pues los cruzados fueron vencidos en Iconio y rechazados de Damasco y Ascaloni. A su vuelta, se dispuso a acudir en socorro de Ladislao de Polonia, expulsado del trono por sus hermanos. Sin embargo murió, según se cree, envenenado por Roger II.
Nacionalidad: RomaNaisse Hacia 280 - Nicomedia 337 Emperador 312 - 337
A la muerte de Constancio Cloro en Britania, las legiones aclamaron augusto a su hijo Constantino. Galerio le reconoció y Constantino se mantuvo al margen de las luchas por el poder que se manifestaron en aquel momento hasta que Majencio se enfrentó contra él. Cuando las tropas de éste irrumpieron en Italia, Constantino le derrotó en varias ocasiones, siendo la definitiva la ocurrida en el Puente Milvio (28 de octubre de 312). El vencedor entró triunfalmente en Roma y se convirtió en augusto de la zona occidental mientras que Licinio se mantenía en oriente. Ambos firmaron en Milán el famoso edicto por el que se reconocía a la religión cristiana iguales derechos que a los cultos paganos. La guerra entre los dos augustos no tardó en estallar, finalizando en 323 cuando Constantino se convertía en soberano único del Imperio al vencer a su enemigo. Su gobierno se inspiró en Diocleciano, restaurando el gobierno personal y suprimiendo la anarquía al tiempo que designaba a sus hijos como césares y les adjudicaba una zona del Imperio. La guardia pretoriana sería abolida y el ejército reformado de la misma manera que la administración sufrió un significativo cambio. La capital será traslada a orillas del Bósforo, a Bizancio que recibirá en el año 330 el nombre de Constantinopla. Como protector del cristianismo convocó el concilio de Nicea (325) en el que se condenó a Arrio. Antes de morir, Constantino fue bautizado por lo que la Iglesia católica se convertía en el principal apoyo del Imperio. Su sucesión recayó en su hijo Constantino II.
Nacionalidad: RomaArlés 317 - Aquilea 340 Emperador 337 - 340
El Imperio fue dividido por Constantino entre sus tres hijos nombrándoles césares: Constantino sería encargado de Hispania, Galia y Britania; Constante de Italia, Iliria y Africa; y Constancio de Egipto y las provincias asiáticas. La muerte de Constantino provocó una guerra civil entre los hermanos, enfrentando a Constantino II con Constante. La lucha fratricida acabó con la muerte de Constantino II en Aquilea.
*Corazón de León. Ricardo I
Nacionalidad: Inglaterra1157 - Limousin 1199 Rey 1189 - 1199
Tercer hijo de Enrique II de Inglaterra, ostentaba los títulos de duque de Aquitania y de Normandía y conde de Anjou. Hizo que el conde de Toulouse le prestara homenaje en 1175, lo que acrecentó su poder y le abocó a una guerra con sus hermanos. En 1173-74 y 1189-89 se rebeló contra su padre, apoyado por Felipe II de Francia. A la muerte de Enrique II en 1189 y de sus hermanos mayores, heredó la corona de Inglaterra y deshizo su alianza con el monarca francés. Casó con Berenguela de Navarra. Articulada la política expansiva de Inglaterra en torno al dominio atlántico, se propuso extender su control sobre el Mediterráneo. Por esto tomó partido en la Tercera Cruzada, junto con Felipe II de Francia. Así, consiguieron tomar Messina y Chipre en 1190 y Acre en 1191, si bien no pudieron conquistar Jerusalén. Acre fue invadida en un mes, logrando ese mismo año la importante victoria de Arsuf contra Saladino, que posibilitará la toma de Joppa. Rota la alianza entre ambos reyes, Felipe II regresó a Francia y colaboró en la conspiración de Juan Sin Tierra, hermano de Ricardo, para tomar el trono inglés. Entre tanto, Ricardo acordó con Saladino (1192), soberano musulmán, un acuerdo por el cual los cristianos conservaban Acre y les era permitida la visita a los santos lugares de Jerusalén, tras lo cual emprendió el viaje de regreso a Inglaterra. Durante el viaje de vuelta fue retenido por el margrave de Austria y entregado al emperador Enrique VI, quien obtuvo el pago de 100.000 marcos a cambio de su liberación. Durante su ausencia de Inglaterra, la administración funcionó notablemente bien, acrecentado su prestigio como monarca gracias a sus conquistas a los sarracenos de Tierra Santa, cantadas por los juglares de la época. En 1194 logró Ricardo llegar a Inglaterra y recuperar el trono, debiendo luchar más tarde contra Felipe II por recuperar los territorios continentales tomados por éste durante su ausencia. Los últimos años de su vida los dedicó a la construcción de la fortaleza de Château-Gaillard sobre el Sena. Falleció Ricardo en 1199 en el asedio al castillo de Châlus, en el Limousin, herido por una flecha. Su sucesor será su hermano Juan
Nacionalidad: Sacro Imperio1209 - 1272 Rey de Romanos 1257
Hijo de Juan Sin Tierra, se enfrentó a su hermano Enrique II y tomó parte en diversas disputas por el poder. Estuvo en la cruzada de 1240 y fue proclamado en 1257 rey de los romanos, aprovechando el vacío de poder temporal del Sacro Imperio Romano-Germánico. Extendió su control sobre el valle del Rhin
Nacionalidad: LidiaRey Siglo VI a.C.
Las riquezas acumuladas por el rey lidio Creso le han hecho famoso en la Antigüedad. Ante la amenaza de invasión por parte de Ciro el Grande, Creso organizó una alianza con Nabónido de Babilonia, Amasis II de Egipto y Esparta. El empuje de Ciro era imparable y la coalición fue derrotada en la Capadocia. Creso se refugió en Sardes donde al año siguiente fue capturado y llevado a la corte persa, donde fue tratado de manera benevolente. Las ciudades griegas de Asia menor y las islas vecinas caían en manos persas sin ofrecer resistencia
Nacionalidad: IsraelRey 1010 a.C. - 970 a.C.
David es una de las figuras más significativas de la historia de Israel. Natural de Belén, se hizo famoso por su facilidad para calmar las depresiones de Saúl con sus dotes musicales. El reto con el gigante filisteo Goliath, al que derrotó armado con una humilde honda, hizo subir su fama entre las tribus israelíes. El rey Saúl sintió envidia de su protegido lo que provocó la huida del joven David, quien pronto se vio rodeado por los descontentos del gobierno de Saúl. En su huida David se alió con los enemigos de Israel y llegó a ser gobernador de Ziklag. Los descontentos del gobierno de Saúl eran cada vez más y tomaron a David como el líder que acabaría con tan odioso reinado, sucedido por su hijo Isbaal. En Hebrón David reunió sus tropas y se hizo ungir como rey de Judá. Isbaal fue asesinado dos años más tarde de estos sucesos, momento en el que las doce tribus de Israel dirigieron sus miradas hacia el héroe y le reconocieron como su rey en una asamblea celebrada en Hebrón. David se estableció en la recién conquistada Jerusalén desde donde puso en marcha una amplia batería de conquistas. Los filisteos fueron derrotados contundentemente, sometiendo a continuación a los estados cananeos y los de la Transjordania. Damasco fue anexionada, consiguiendo el nuevo reino una dimensiones considerables, desde el golfo de Aqaba hasta Hamath. Sin embargo, este esplendor israelí se vio deslucido en los últimos años del reinado de David por una revuelta interna debido a problemas sucesorios. David derrotó a sus enemigos y designó a su sucesor, Salomón.
Nacionalidad: Afganistán971 - 1030 Sultán
Mahmut de Gazni consiguió extender las fronteras de Afganistán desde el Tigris al Ganges, invadiendo la India en varias ocasiones donde defendió el Islam. Ocupó Lahore, el Punjab y otras regiones hindúes
Nacionalidad: MacedoniaRey 294 a.C. - 283 a.C.
Hijo de Antígono, uno de los generales de Alejandro que trató sin éxito de recomponer su imperio, Demetrio se especializó en asediar ciudades, de ahí el sobrenombre de Poliorcetes. Antes de conseguir el trono de Macedonia participó en numerosas campañas por orden paterno. Sus primeros pasos los dio en Siria, consiguiendo algunos éxitos hasta que Ptolomeo le venció en Gaza (312 a.C.). Demetrio se tomó la revancha y derrotó al rey egipcio en aguas de Chipre (307 a.C.). Posteriormente participó durante quince meses en el infructuoso asedio de Rodas, donde empleó todo tipo de máquinas entre las que destacaba la "Helepolis", una torre de asedio móvil de unos 45 metros de altura que sería desplazada por unos 3.400 hombres. A pesar del despliegue técnico, Demetrio no pudo tomar la ciudad y abandonó todos sus ingenios mecánicos con cuyos despojos fue posible la construcción del famoso Coloso de Rodas, una estatua del dios Helios de más de 30 metros de altura. En el año 298 a.C. fallece Casandro y Demetrio se adueña de Macedonia. Su espíritu guerrero le lleva a pelear con Lisímaco y Pirro, provocando una situación de crisis que será aprovechada por las diferentes ciudades de Grecia para rebelarse. Demetrio no salió muy bien parado de este conflicto por lo que se trasladó a Asia para resarcirse. Lo derrotó Seleuco y fue hecho cautivo, falleciendo tres años después de su última derrota. Su hijo Antígono Gónatas le sucederá como rey de Macedonia.
Nacionalidad: GreciaAgirio, Sicilia siglo I. a. C - siglo I. a. C. Historiador
Historiador griego nacido en Agirio, Sicilia, en el siglo I antes de Cristo. Se trata de uno de los más importantes eruditos antiguos y una de las fuentes básicas para el conocimiento de la Antigüedad clásica. Es autor de una obra magna, llamada "Historia del mundo".
Nacionalidad: CastillaVivar 1040 h. - 1099 Caudillo
Nacido en Vivar, era hijo de Diego Laínez, infanzón de Vivar. Se educó junto al infante Sancho de Castilla, quien le dio el cargo de alférez de la milicia real al ser nombrado rey bajo el título de Sancho II, y a las órdenes del cual se enfrentó a Sancho IV de Navarra. En virtud de su cargo, hizo jurar al rey Alfonso VI (1072, Santa Gadea) que no era responsable de la muerte de su hermano, Sancho II, lo que le provocó la enemistad con el monarca. Fue sustituido en su cargo por García Ordóñez, si bien el rey le compensó con un matrimonio con Jimena Díaz en 1074, bisnieta de Alfonso V. Acusado de deslealtad al rey, fue condenado al destierro en 1081 y rota su relación de vasallo de Alfonso VI. Se encaminó entonces con sus vasallos a Zaragoza, donde se puso a las órdenes del gobernante musulmán al-Muqtadir y, posteriormente, de su hijo al-Mu´tamin. Tras la batalla de Zalaca, en el que fueron vencidas las tropas de Alfonso VI, el rey nuevamente le puso a su servicio y encomendó varios dominios en 1086. En esta segunda etapa junto al monarcas castellano emprendió campañas guerreras por el levante peninsular, logrando hacer que los reyes musulmanes de Albarracín y Valencia pagasen tributo a Castilla y conquistando vastos territorios dominados por los almorávides. Nuevamente enfrentado a Alfonso VI, fue despojado de todos sus privilegios y hubo de salir al exilio. En esta ocasión se puso al servicio del rey musulmán de Valencia, logrando derrotar y apresar al conde de Barcelona Berenguer Ramón II en 1090. En el punto álgido del poder almorávide en la Península, logró tomarles Valencia en 1094, ciudad que no recuperarán hasta algún tiempo después de su muerte, en el año 1102. La literatura y la historiografía posteriores se encargaron de utilizar su figura y engrandecer la leyenda, siendo citado en composiciones, poemas (Poema de Almería), cantares de gesta y crónicas (Najerense, Primera Crónica General, etc.). El momento culminante llega con la elaboración a cargo de un autor anónimo del "Cantar del Mío Cid", en el siglo XII o primeros años del XII. Desde entonces se produce su incorporación a la literatura castellana y la entronización del personaje como símbolo de caballero castellano-español, detentador de valores y virtudes de hondo calado político y elemento propagandístico de primer orden en el contexto de una España cristiana necesitada de héroes.
*Enrique II
Nacionalidad: Inglaterra1133 - 1189 Rey
Hijo del conde de Anjou y de una hija de Enrique I, la línea materna de la que procedían sus derechos a la Corona le obligó a luchar por ellos. Casó con Eleonor de Aquitania. Extendió su poder mediante conquista a las distintas regiones británicas hasta dominar todo el territorio. Se enemistó con Tomás Beckett, antes amigo suyo, a quien había situado al frente del arzobispado de Canterbury. Esta disputa provocó una gran controversia, poniendo en peligro la unidad nacional. Finalmente, ordenó el asesinato del prelado. En política exterior, mantuvo una disputa constante con el monarca francés Luis VII.
Nacionalidad: Francia- 1559 Rey 1547 - 1559
El reinado de Enrique II es uno de los más fructíferos de su tiempo. Hijo de Francisco I y Claudia de Francia, continua la política antiespañolista de su padre. Por ello firma en 1551 un tratado con los príncipes alemanes rebeldes al emperador consiguiendo la aceptación del dominio francés sobre las plazas imperiales de Metz, Verdún y Toul que fueron conquistadas en 1552. En la misma línea, firma un acuerdo en 1555 con el papa Paulo IV, declarado antiespañol, para ocupar las posesiones imperiales en territorio italiano; esta empresa resultó un rotundo fracaso al no derrotar a las tropas imperiales ni tomar ninguna plaza de relevancia. El fracaso se ratificaba tras la contundente victoria española en la batalla de San Quintín (1557) gracias a Manuel Filiberto de Saboya y la posterior de Gravelinas, lo que motivó que Enrique II firmara la paz de Cateau-Cambresis en la que se reconocía la hegemonía española en Italia, casándose Felipe II con Isabel de Valois con motivo de este acuerdo. En el plano interno, la política de Enrique II fue dirigida a afianzar el poder monárquico y eliminar los brotes de disidencia religiosa a través de la persecución de los partidarios de la Reforma, medidas que se reforzaron tras la firma del edicto de Ecouen en 1557
*Enrique III
Nacionalidad: Inglaterra1207 - 1272 Rey
Hijo del rey Juan, en su adolescencia, reinó bajo la regencia de William Marshall, señor de Pembroke. Promovió la entrada de elementos foráneos en su reino y emprendió reformas importantes. Paso un tiempo en cautividad. Se enfrentó a una rebelión nobiliaria encabezada por Simón de Montford
Nacionalidad: Sacro Imperio1050 - 1106 Emperador 1056 - 1106
Hijo de Enrique III, durante su adolescencia su madre asumió la regencia del Reino. La cuestión de las investiduras le enfrentó en continuas ocasiones al papa Gregorio VII, quien le excomulgó en 1076. Obtuvo el perdón mostrando sumisión al Papa al arrodillarse en la nieve en el castillo de Canossa. En 1080 se enfrento de nuevo al Pontífice, a quien logró destronar y hacer huir, tras ser nuevamente excomulgado. En 1090 emprendió la invasión de Italia. Murió en 1106 en la mayor indigencia, perseguido encarnizadamente por su hijo Enrique V, quien se rebeló contra él y lo hizo encarcelar
Nacionalidad: Sacro Imperio1275 - 1313 Emperador 1308 - 1313
Primero Conde de Luxemburgo y después rey de Alemania, tras ser coronado emperador realizó concesiones a los cantones suizos. Su política expansionista le hizo enfrentarse a Roberto de Nápoles y organizar diversas invasiones a Italia.
*Estrabón
Nacionalidad: Sacro Imperio1275 - 1313 Emperador 1308 - 1313
Primero Conde de Luxemburgo y después rey de Alemania, tras ser coronado emperador realizó concesiones a los cantones suizos. Su política expansionista le hizo enfrentarse a Roberto de Nápoles y organizar diversas invasiones a Italia.
Nacionalidad: Iglesia CatólicaPisa - 1153 Papa 1145 - 1153
Nacido en Pisa, Bernardo Paganelli fue investido Sumo Pontífice en 1145, gobernando hasta su muerte. Educado en San Bernardo de Clairvaux, se le considera un Papa político y promotor del poder de la Iglesia en los asuntos públicos, lo que motivó la rebelión del pueblo y su expulsión. Promovió la Segunda Cruzada y estableció un tratado con Federico Barbarroja
*Federico II
Nacionalidad: Sacro Imperio1194 - 1250 Emperador 1215
Hijo de Enrique VI, alcanzó el trono alemán en 1215. Intentó anexionar Italia a la corona alemana, lo que le enfrentó al Papado y por lo que fue excomulgado tres veces. Tras la Quinta Cruzada, se convirtió en rey de Jerusalén en 1227. Ha pasado a la historia como un gobernante de amplia cultura, aunque mal dirigente de la administración pública.
*Felipe Augusto. Felipe II
Nacionalidad: Sacro Imperio1194 - 1250 Emperador 1215
Hijo de Enrique VI, alcanzó el trono alemán en 1215. Intentó anexionar Italia a la corona alemana, lo que le enfrentó al Papado y por lo que fue excomulgado tres veces. Tras la Quinta Cruzada, se convirtió en rey de Jerusalén en 1227. Ha pasado a la historia como un gobernante de amplia cultura, aunque mal dirigente de la administración pública.
Nacionalidad: Francia1052 - 1108 Rey 1060 - 1108
Hijo de Enrique I y de Ana de Rusia, alcanzó el trono francés en 1060 y gobernó hasta 1066 tutelado por su padre. Su gobierno coincide con el pleno apogeo del sistema feudal, lo que limitaba el poder de la corona y planteaba constantes conflictos de jurisdicción. No obstante, logró expandir las posesiones reales. El divorcio de su esposa, Berta de Holanda, provocó que fuera excomulgado por el Papa. Se enfrentó a Normandía en defensa de Bretaña.
Nacionalidad: EspañaValladolid 1527 - El Escorial 1598 Rey 1556 - 1598
La personalidad del Rey Prudente definirá la historia europea de la segunda mitad del siglo XVI. Su nacimiento en Valladolid el 21 de mayo de 1527 llenará de gozo a sus padres, el emperador Carlos V y doña Isabel de Portugal. Las fiestas que se celebraron a continuación quedaron interrumpidas cuando llegó la noticia de un hecho que crispó a la Cristiandad: el saqueo de Roma por las tropas imperiales. Carlos se vistió de luto y los festivales, torneos y justas quedaron suspendidos. El pequeño Felipe será jurado como heredero de la corona de Castilla el 10 de mayo de 1529 en el madrileño convento de San Jerónimo. La educación del príncipe quedará en manos de doña Isabel debido a los continuos viajes del emperador. En 1534 don Juan Martínez Siliceo será nombrado su tutor para que "le enseñase a leer y escribir". Al año siguiente el príncipe tenía casa propia y don Juan de Zúñiga era designado su ayo. Siliceo y Zúñiga diseñarán la educación del muchacho. Como bien dice Henry Kamen: "Como alumno, el Príncipe no era ni un modelo ni, mucho menos, sobresaliente. Su manejo del latín siempre fue regular, su estilo literario, en el mejor de los casos, mediocre, y su caligrafía siempre generalmente deficiente. Educado como un humanista, nunca llegó a serlo". Las relaciones de don Felipe con su madre fueron muy estrechas por lo que el fallecimiento de doña Isabel en 1539 supuso un golpe muy duro para el pequeño príncipe. Ese mismo año inicia sus tareas políticas ya que queda como regente del Reino ante la marcha de su padre hacia la ciudad de Gante. Felipe tenía doce años y recibió la estrecha colaboración de un Consejo de Regencia, integrado por don Francisco de los Cobos, el cardenal Tavera y el duque de Alba, familiarizándose con los asuntos de Estado. Su primer matrimonio se producirá el 15 de noviembre de 1543. La elegida será su prima María Manuela de Portugal. La duración de enlace será apenas de un año ya que la esposa falleció tras el parto del príncipe Carlos, el 12 de julio de 1545. El mismo año de su matrimonio Felipe volvió a quedar como regente de Castilla. Seguía asesorado por un consejo y las últimas decisiones estaban en manos del emperador, pero Felipe iba recogiendo la necesaria experiencia. El año 1554 será el de su segunda boda. La nueva esposa será la reina de Inglaterra, María Tudor, ya que a Carlos V le interesaba especialmente la alianza inglesa. Felipe recibe el título de rey de Nápoles y duque de Milán, trasladándose a Londres para celebrar su boda, el 25 de julio de 1554. El propio príncipe consideró siempre su enlace como una cuestión de Estado y permaneció largo tiempo en tierras inglesas. Asuntos de Estado le llevaron a Flandes, donde el 25 de octubre de 1555 recibía de su padre la soberanía de los Países Bajos. El trato con los holandeses y alemanes fue muy estrecho, convirtiéndose en un monarca querido por sus súbditos. Al año siguiente Carlos abdicaba en su hijo las coronas de Castilla y Aragón, lo que hacía a Felipe el dueño del Imperio más importante de su tiempo. Su tío Fernando recibía el Imperio Alemán y los estados patrimoniales de los Habsburgo, familia que se dividía en dos ramas: la austriaca y la española. En marzo de 1557 regresaba a Inglaterra convertido en rey de España y pasa algunos meses en compañía de su esposa, intentando engendrar el tan deseado hijo. En julio regresa a los Países Bajos para conseguir una de las mayores victorias militares de su reinado: la batalla de San Quintín, el 10 de agosto de 1557. El triunfo provocaba el fin de la guerra con Francia y la firma de un acuerdo de paz, el Tratado de Cateau-Cambresis, con el que se ponía fin a la disputa por el control de Italia, que quedaba en manos españolas. El tratado se sellaba con el matrimonio de Felipe con la joven Isabel de Valois -Felipe había enviudado por segunda vez en noviembre de 1558, sin conseguir el deseado heredero-. De este enlace nacerán las dos hijas con las que el monarca mantendrá una estrecha relación: Isabel Clara Eugenia y Catalina Micaela. A su llegada a España en 1559 inició una serie de cambios en la práctica y en la forma de gobierno, rompiendo de esta manera con la tradición medieval y otorgando un carácter innovador a la Corona, al tiempo que se fijaban las bases de la administración pública moderna. Fruto de estos cambios será el establecimiento de la corte permanente en Madrid (1561), la reforma de la audiencia de Sevilla (1556), o la creación del Consejo de Italia (1558) y de las audiencias de Charcas (1559), Quito (1563) y Chile (1567). La paz con Francia le permitiría poner en práctica una política mediterránea encaminada a frenar el expansionismo turco por el norte de África y en la zona occidental del "Mare Nostrum". Precisamente para poner fin a esta expansión se formó la Liga Santa junto a Roma, Venecia y Génova, consiguiendo la espectacular victoria en la Batalla de Lepanto (7 de octubre de 1571) dirigiendo las naves el hermano del monarca, don Juan de Austria. Don Juan había participado también con éxito en el aplastamiento de la revuelta de los moriscos granadinos en 1568. Ocho años después se producirá una segunda rebelión, llegando a solicitar ayuda a los turcos. Esta segunda tentativa tendrá también una escasa incidencia y será sofocada. El freno al avance turco llegará por la vía diplomática a través de intermediarios. Felipe II conseguía cerrar un frente de lucha y poder centrarse en los conflictos atlánticos, especialmente la Guerra de los Países Bajos, prioridad en la política felipina desde que se produjo la primera rebelión en 1566, sofocada duramente con la intervención del duque de Alba y la ejecución de los condes de Horn y Egmont. La muerte de Isabel de Valois y el príncipe Carlos y la invasión del príncipe de Orange en los Países Bajos motivaría que el año 1568 esté considerado como el "annus horribilis" del reinado de Felipe. Quedaba viudo por tercera vez, sin heredero varón y con una guerra en ciernes en el norte de Europa. En 1570 volverá a contraer otra vez matrimonio -el cuarto- siendo la elegida su propia sobrina, doña Anna de Austria. El matrimonio tendrá 5 hijos, sobreviviendo sólo el heredero de la corona, el futuro Felipe III. Doña Anna fallecería en 1580 pero el rey ya no se volvería a casar, pasando sus últimos años viudo. En esta década de los 70 la corte madrileña vivirá momentos de tensión y rivalidades al enfrentarse de manera casi abierta las dos facciones que competían por el favor real. La encabezada por el duque de Alba y la liderada por el príncipe de Eboli -a su muerte será Antonio Pérez quien se convierte en el jefe de este grupo-. Entre 1576-1579 las rivalidades casi provocan un colapso administrativo. Estos enfrentamientos tuvieron su punto culminante en el asesinato de don Juan de Escobedo, secretario particular de don Juan de Austria, el 31 de marzo de 1578, involucrándose al propio monarca cuando el promotor del asesinato era Pérez. Mientras estas rivalidades se producían en la corte, en los Países Bajos la situación era cada vez más complicada. La política militarista del duque de Alba había dejado paso a una línea más dialogante establecida por don Luis de Requesens pero su fallecimiento en 1576 y el saqueo de Amberes por las tropas no favorecieron esta nueva línea política emprendida. Don Juan de Austria pudo conseguir finalizar el conflicto pero su muerte en Namur (1578) tampoco ayudó. Felipe apostó por la llegada del cardenal Granvela como secretario de Estado para resolver la crisis tanto política como financiera. De esta manera se daba paso a la segunda etapa del reinado caracterizada por el inicio del declive físico y moral del monarca. La anexión de Portugal en 1581 será la gran victoria de este momento -Felipe había sido nombrado rey de Portugal en 1580 por las cortes de Tomar tras el fallecimiento del cardenal don Enrique, regente del reino a la muerte de don Sebastián- pero la situación en Flandes estaba estancada a pesar de los éxitos iniciales de Alejandro Farnesio. La intervención de Isabel I de Inglaterra en el conflicto de los Países Bajos inclinará la balanza a favor de los rebeldes holandeses. La reacción del Rey Prudente será la organización de la Armada de Inglaterra con la que pretendía invadir la isla británica, contando con el embarque de las tropas de Farnesio. El desastre de la Armada en el año 1588 iniciará la etapa de declive tanto política como física del reinado de Felipe II. Esta tercera etapa vendrá marcada por la progresiva dejación de funciones del monarca ya que sus achaques y enfermedades le impedían controlar todos los asuntos como era de su agrado. Para colaborar con las decisiones del monarca se crea la Junta de Noche (1585) en la que participa el secretario Vázquez de Leca. Cinco años más tarde se organiza la Junta Grande, consejo cuyo objetivo primordial será hacer frente a la caótica situación económica pero que se convertirá en la verdadera encargada del gobierno de la Monarquía. Estos últimos años vendrán caracterizados en cuanto a la política exterior por la intervención en la política francesa a través de su apoyo a la Liga Católica. Los deseos de situar a su hija Isabel Clara Eugenia en el trono francés -era hija de Isabel de Valois- no se verán satisfechos al coronar a Enrique IV como monarca galo. El inicio de un conflicto en la zona norte de Francia, en el que participarían activamente las tropas de Alejandro Farnesio, diversificaría los frentes de lucha y permitirá la consolidación de la posición holandesa. La Paz de Vervins (1598) ponía fin a la lucha hispano-francesa y dejaba los Países Bajos en manos de Isabel Clara Eugenia, casada con el archiduque Alberto. A medida que va avanzando en edad, la salud de Felipe II se iba deteriorando y los ataques de gota se repetían con mayor frecuencia. Llegará un momento en que no pueda firmar debido a la artrosis de su mano derecha. A finales del mes de junio de 1598 Felipe sufrió unas fiebres tercianas que le postraron en la cama, sufriendo dolores tan intensos que no se le podía mover, tocar lavar o cambiar de ropa. A las cinco de la madrugada del domingo 13 de septiembre de 1598 fallecía Felipe II en el monasterio de El Escorial. Tenía 71 años y su agonía había durado 53 días.
Nacionalidad: AlemaniaBraunau am Inn (Austria) 20-4-1889 - Berlín 30-4-1945 Dictador 1933 - 1945
En pocas ocasiones la memoria colectiva de los pueblos muestra tamaño acuerdo a la hora de juzgar el papel histórico de un personaje como en el caso de Adolf Hitler. Sobre él se han escrito cientos de miles de páginas, y su figura se asimila a la de un dictador asesino responsable de la muerte de millones de personas y encarnación de los más bajos y deplorables instintos humanos. Hitler llevó a su país, y a la práctica totalidad de la población mundial, a la guerra más devastadora nunca conocida, practicando además una política de exterminio y barbarie contra todos aquellos grupos o individuos que la abyecta ideología que representaba tuviera por diferentes y, por ende, inferiores. Nació este personaje en una ciudad fronteriza de la Austria bávara, hijo de un agente de aduanas, Alois, que, en virtud de su ocupación, obligará a su familia a mudar varias veces de residencia, siempre en pequeñas localidades rurales. Su padre era hijo a su vez de la soltera María Anna Schikelgruber, tomando prestado el apellido Hitler de un pariente por considerarlo más honroso. El hecho de que su padre proviniera de una unión ilegítima entre su abuela y un desconocido perturbó siempre los pensamientos de Hitler, ante la posibilidad de tener ascendientes judíos. Durante su infancia, se educa en pequeñas escuelas de pueblo, hasta que pasa a la escuela de Artes y Oficios de Linz. Su infancia distó mucho de ser feliz, siendo objeto de frecuentes palizas por parte de su padre, sólo en parte compensadas por el cariño que su madre, Klara Pölz, le profesaba. Esta era la tercera esposa de Alois, y tenía veintitrés años menos que él. La complicidad entre madre e hijo era a veces percibida por su padre bajo el prisma de los celos. Persona inteligente, superaba las asignaturas escolares con facilidad, lo que le procuraba cierta tendencia al abandono y la pereza. Quizás por la mala relación con su padre, o por los frecuentes cambios de residencia y colegio, lo cierto es que el niño Hitler no lograba cuajar amistades, teniendo como resultado que se encerrase en sí mismo y en sus sueños como futuro pintor, su afición favorita. Los designios de su padre, por el contrario, iban por otros derroteros, pues deseaba para su hijo una carrera de funcionario. La controversia fue fuente de frecuentes disputas y discusiones, en las que el joven Hitler no cedía un ápice, al punto que, a modo de rebeldía, dejó de prestar atención a los estudios en la escuela católica de Linz y repitió curso. En 1903 muere su padre, lo que le otorga cierta libertad de movimientos y acción. Algo más tarde, una pulmonía le hace abandonar la escuela en principio hasta su restablecimiento, pero será definitiva. Se dedica entonces a su afición favorita, la pintura, durante dos años, con la ilusión de ser algún día un pintor reconocido. Su intento de ingresar en la Academia de Bellas Artes de Viena se ve abocado al fracaso, aunque, orgulloso y seguro de sus fuerzas, lo intentó un año más tarde. Nuevamente cosechó el mismo resultado. Decepcionado y triste por la muerte de su madre en 1907, se entregó a una vida abandonada y perezosa, en la que sólo las audiciones de Wagner parecían interesarle. Requerido para cumplir el servicio militar, Hitler se escondió en Viena durante tres años para así eludirlo. El motivo de su actuación no era otro que su deseo de no formar parte de un ejército que consideraba débil y propio de un país en decadencia, alejado de pasadas glorias. Por el contrario, admiraba a la pujante Alemania y su carácter orgulloso, lo que le hizo trasladarse a Munich en 1913. Desde allí envió una carta en la que se excusaba de no hacer el servicio militar, alegando que no tenía medios para subsistir y vivía en la pobreza. En realidad, disfrutaba de una pensión de orfandad, al mismo tiempo que la venta de algunos dibujos le procuraban ingresos adicionales. Sin embargo, aunque no fueron admitidas del todo sus excusas, el tribunal que juzgaba su caso se avino a realizarle un examen médico para poder declararle no apto para el servicio militar, lo que realmente sucedió. Un año más tarde, sorprendentemente, solicita su ingreso como voluntario en el ejército ante el advenimiento de la I Guerra Mundial. En los combates, destaca por su afán de lucha y arrojo. Inscrito en una unidad de choque, en apenas unas semanas sólo quedan vivos 600 de los 3.500 soldados que la formaban. Su habilidad en la lucha y su obediencia le hacen respetado por compañeros y mandos, quienes en ocasione le encomiendan misiones difíciles como el traslado de mensajes. En octubre de 1916 cae herido de cierta gravedad por un disparo que le atraviesa una pierna, aunque pronto se restablece y regresa al frente tras pasar el invierno convaleciente. Nuevamente en 1918, también en octubre, resulta herido, esta vez tras inhalar gases tóxicos. En su cartilla militar figura la inscripción "gaseado". Pierde temporalmente la visión y es ingresado en el Hospital de Passewalk, donde sufre varias operaciones y fuertes dolores. Durante su convalecencia, puede apreciar que está asistiendo a un mundo en profunda transformación. La revolución ha triunfado en Rusia, instalando allí una doctrina política que personalmente detesta. El viejo y decadente Imperio Austro-húngaro ha desaparecido como consecuencia de la derrota en la Gran guerra, mientras que su admirada y orgullosa Alemania ha sufrido una humillante derrota. Su análisis de la situación alemana le hace pensar que la derrota se debe a una conjunción de factores, entre los cuales el más destacable es la propia división interna, fruto del régimen de partidos, y la pérdida de los valores tradicionales que encumbraron a Prusia tan solo hacía algunas décadas. Además, el bolchevismo y los "no arios" amenazaban con extenderse por Alemania y el resto de Europa, subvirtiendo el orden "natural" y despreciando todo lo que Hitler valoraba. Por si fuera poco, el final de la guerra le dejaba en una situación de desamparo: en el ejército, en combate, era valorado y se sentía identificado con sus compañeros, con sus mandos y con una causa; fuera de él, se convertía en alguien sin rumbo, anodino. Sin saber qué hacer, se queda en el cuartel de Munich esperando alguna misión, algo que hacer. Finalmente le llega su oportunidad, al serle ofrecido un trabajo como espía y propagandista del ejército. Su misión consistirá en introducirse en los círculos políticos y detectar cualquier posible brote de sublevación. Tras sorprender a los dirigentes del DAP, el Partido Obrero Alemán, el 19 de octubre comienza su carrera política. Pronto destaca en reuniones y asambleas, diciendo lo que su público quiere oír: la culpa de la postración alemana es de los extranjeros; los comunistas invadirán el país; los partidos políticos desunen y restan fuerza a la nación... El clima social de la posguerra en Alemania roza la paranoia. No se entiende que su poderoso ejército haya podido perder la guerra. Se ven a sí mismo como incomprendidos, incluso envidiados por su "carácter superior". Las reparaciones de guerra impuestas en Versalles son, además, un lastre para la economía de la nación: el marco se devalúa hasta perder casi todo su valor; colas de hambrientos deambulan por las calles; la miseria puede palparse. En estas condiciones, un pequeño partido como el DAP, ultraderechista, antijudío y radical, encuentra un caldo de cultivo propicio para su expansión. Y con él, un personaje como Hitler, capaz de encender a las masas con un discurso tan fácil como deseado. Pronto comienza a captar la atención de grupos diferentes, desencantados con la República y temerosos del comunismo: ultracatólicos, militares, nostálgicos. Se reúnen en secreto, con el objetivo común de devolver a Alemania su puesto como gran potencia europea. Hitler se mueve como pez en el agua, pues los acontecimientos parecen predisponer la situación a su favor. Las reparaciones de guerra ahogan la economía alemana, cuyo gobierno no puede hacer frente a los pagos. En consecuencia, Francia -la odiada Francia-, invade las cuencas del Rhur y el Sarre, para garantizar el pago de la deuda. Inflación, paro y hambre alcanzan niveles impactantes. Por si fuera poco, la situación política es cualquier cosa menos estable. La débil república, presidida por un socialista, se ve amenazada por una revolución de signo izquierdista, la espartaquista, que a duras penas es controlada. El comunismo avanza entre los alemanes, que ven en él una tabla de salvación. Hitler despliega entonces una actividad frenética, escribiendo discursos y folletos, dando mítines, organizando grupos. Le protegen militares y rusos huidos de la Revolución, a pesar de lo cual sigue careciendo de medios económicos, dependiendo tan sólo de su paga de militar. En 1920 intenta por primera vez tomar el poder. Prepara un golpe de estado junto con von Kapp, que termina fracaso por la indecisión de los generales en principio comprometidos. Condenado a cinco años de prisión en la fortaleza de Landsberg, dedica su tiempo a dictar a Rudolf Hess la primera parte de su libro Mein Kampf (Mi lucha), en la que plasma sus ideas y deseos. Obra autobiográfica, el resentimiento y el antisemitismo atraviesan sus páginas desde la primera hasta la última, exponiendo en ellas además su ideal de una Alemania uniforme, fuerte y temida. También en 1920 forma la NSDAP (Partido Obrero Nacional-Sindicalista), cuya importancia para Alemania será fundamental a partir de entonces. En diciembre de 1924 recobra la libertad. Escocido por el fracaso anterior, adopta por la vía democrática como herramienta de acceso al poder. El antisemitismo se convierte en una de las principales consignas del partido, siendo muy bien recibida por la opinión pública en general. Por toda Alemania se pueden oír sus discursos o leer sus folletos, desplegando una actividad propagandística incansable. La crisis de 1929, que Alemania sufre especialmente, incrementa el número de seguidores de Hitler. Las empobrecidas clases medias, temerosas del influjo comunista, abrazan el nazismo como una tabla de salvación. En las elecciones de marzo de 1932 Hitler resulta derrotado por Hindenburg, pero sus trece millones de votos le facultan para ser nombrado canciller muy poco tiempo después. El demócratacristiano von Papen se apresta a colaborar con Hitler, pensando que podrá encauzar y moderar sus acciones. Craso error. Las primeras decisiones del nuevo canciller demuestran su voluntad de no someterse a pactos. Tras decretar la realización de un plebiscito en el Sarre sobre la ocupación francesa, consigue expulsar a los franceses. Incumple los acuerdos de Versalles, en especial impulsando la militarización de Alemania, al mismo tiempo que lanza el "Anchluss", la unión con Austria. La subida al poder de un personaje así asusta a los aliados europeos, incapaces de articular medidas que vayan más allá de la "política de apaciguamiento". Es entonces cuando la Sociedad de Naciones revela su ineficacia. Tras llegar al poder, Hitler y sus colaboradores (Himmler, Goebbel, Goering) se encargaron de crear un aparato policial capaz de someter absolutamente a la población y evitar cualquier tipo de disidencia. La Gestapo velará por la "seguridad" del Estado, al mismo tiempo que por la "pureza" de la raza aria. En 1938, su agresiva política exterior le llevará a añadir parte a Alemania parte de Checoslovaquia, cuya integridad estaba garantizada por el Tratado de Versalles. Nuevamente las naciones europeas capitulan ante el formidable despliegue de fuerza alemán. El siguiente paso será Polonia, también protegida por la Sociedad de Naciones y, especialmente, Francia e Inglaterra. La maniobra de Hitler es inteligente: se acerca a la URSS mediante la firma de un pacto de no agresión, permitiendo que los tanques alemanes traspasen con una rapidez extraordinaria la frontera polaca el 1 de septiembre de 1939. Inglaterra y Francia declaran abiertas las hostilidades: la II Guerra Mundial ha comenzado. Inmediatamente, la Wehrmacht invade Dinamarca y Noruega, tan solo meses después, a las que seguirán Bélgica y Holanda en 1940. El golpe mayor está todavía por venir: el 5 de junio las tropas alemanas entran en Francia, derrotándola en tan solo diecisiete días. Tan solo resiste Gran Bretaña, acosada por la aviación de Göering, quien busca desesperadamente la ayuda de unos Estados Unidos ensimismados en su política de neutralidad. Por el contrario, Italia y Japón se suman a Alemania y forman el Eje. El ataque japonés sobre Pearl Harbour fuerza, ahora sí, la entrada definitiva y sin ambages de Estados Unidos en la guerra. El gran error de Hitler fue, teniendo abierto el frente occidental, abrir otro en el Este. El ataque sobre la URSS, a pesar de emplear una ingente cantidad de recursos humanos y materiales, se estanca por la tenaz resistencia rusa y finalmente acaba por fracasar estrepitosamente. Hay encima demasiados frentes abiertos, demasiadas fronteras: los Balcanes, África, el Atlántico. A partir de 1943 los acontecimientos empiezan a cambiar de rumbo. El apoyo norteamericano se antoja fundamental para la causa aliada, mientras que los soviéticos inician desde el Este un tremendo contraataque. Además, los aliados, en especial la Italia de Mussolini, más parece ser un lastre que una ayuda, pues no tardará en caer. El desembarco en Normandía, en 1944, supone el inicio del fin de la aventura Alemana. Las defensas de Rommel, el otrora triunfador en África, nada puede hacer por detener el avance aliado, que parece pugnar con los rusos en su avance hacia Berlín. La situación comienza a ser dramática, al punto que una sublevación por poco acaba con la vida del Fuhrer al hacer estallar una bomba bajo su sillón durante una reunión del Estado Mayor en Berchtesgaden. Hitler ha perdido el control. Se esfuerza en imponer órdenes de resistencia bajo pena de ejecución sumaria, mientras que recluta para su ejército incluso a menores de edad. Encerrado en su bunker, desconfía de sus más íntimos colabores, si acaso sólo en Goebbels y Martín Bormann, testigo éste de su acelerada boda con Eva Braun. La carrera por Berlín prefigura un mundo diferente al término de la guerra. Comunistas y capitalistas se afanan por llegar los primeros, siendo aquellos los primeros en llegar. Hitler no verá este hecho, pues se suicidará unto con Goebbels y Eva Braun el 7 de mayo. Atrás quedan cinco años de guerras y millones de muertos causados por la megalomanía de un dictador, el ensimismamiento de un pueblo y la pasividad del resto de naciones.
Nacionalidad: Iglesia CatólicaRoma - 1227 Papa 1216 - 1227
Nacido en Roma, alcanzó el trono pontificio en 1216. Durante su mandato coronó emperador a Federico II en 1220. También aprobó las reglas de las órdenes religiosas fundadas por San Francisco de Asís y Santo Domingo de Guzmán. La herejía albigense, en pleno auge, motivó la promulgación de una cruzada en su contra, encaminada a combatir la heterodoxia y el desviacionismo de sus propuestas. Mediador en las disputas suscitadas entre varios países europeos, consiguió apaciguar algunos conflictos. Aprobó las reglas de dominicos y franciscanos y promovió las cruzadas contra el Islam. Es también un autor erudito, creador de un libro sobre las rentas del Papado, "Liber censuum". Ordenó redactar el "Ordo romanus de consuetudinibus" y la" Compilatio Decretalium".
Nacionalidad: IrakTikrit 28-4-1937 Presidente 1979 - 2003
Miembro del partido Baas, desde 1957, trata de derrocar a Kassem, presidente de la nación, pero falla y se exilia en Egipto. Cinco años después vuelve a su país, cuando Kassem ya no está el poder, e inicia una exitosa trayectoria política. En 1968 su partido organiza un golpe de Estado y se alza con el poder. Hussein se convierte un año después en vicepresidente del Consejo de la Revolución y diez años más tarde en Presidente de la República. A pesar de sus tendencias dictatoriales el pueblo le ve como un auténtico líder. Al inicio de la década de los ochenta empiezan los enfrentamientos con Irán (cesan en 1988) y en 1990 invade Kuwait, estallando la Guerra del Golfo. Este era el primer conflicto de alcance internacional desde el fin de la Guerra Fría. En esta guerra intervino Estados Unidos encabezando una coalición formada por Francia, Italia, Gran Bretaña, Arabia Saudí y Kuwait. A comienzos de 1991, el general estadounidense Colin Powell, al mando de la jefatura de Estado Mayor, pone en marcha la operación "Tormenta del desierto" que obliga a Sadam Hussein a rendirse, tras un intenso bombardeo. En el año 2003, una nueva guerra enfrenta a Irak contra Estados Unidos y Gran Bretaña, lideradas respectivamente por George Bush y Tony Blair. Tras varias semanas de combates e intensos bombardeos, el régimen iraquí acabó por caer, siendo Sadam dado por desparecido. Finalmente, a finales de 2003 fue capturado por las tropas norteamericanas. En octubre de 2006 tendría lugar en Bagdad el juicio que condenaría a muerte a Sadam Hussein. El tribunal, iraqui, condenó a Sadam a morir ejecutado en la horca por los crimenes contra la humanidad cometidos contra los chiitas en 1982. El 30 de diciembre de 2006, la condena se hacia efectiva y Sadam Hussein moría en la horca.
Nacionalidad: Al-Andalus1165 - 1240 Místico
Nacido en Murcia, recibió su educación en Sevilla. Viajó por varios países árabes. Místico, sus revelaciones de Dios llegaron a influir fuertemente en la doctrina sufista islámica. Es el autor de "Las revelaciones de la Meca".
*Indíbil
Nacionalidad: Ilergetes- 205 a. C. Militar y príncipe
Fue el príncipe de los Ilergetes. Estableció un pacto con los cartagineses y logró imponerse a Escipión, unos años antes de su muerte. Pensando que podría hacerse con el reino de los romanos, se unió a ellos pero acabó siendo engañado. Antes de morir en el campo de batalla logró algunos triunfos más
Nacionalidad: Iglesia Católica- 1143 Papa 1130 - 1143
Nacido en Roma, alcanzó el solio pontificio en 1130. Aunque estuvo apoyado por el emperador Lotario, el reconocimiento completo de toda la Iglesia no lo logró sino varios años después de su elección. Se opuso al antipapa Anacleto II.
Nacionalidad: Iglesia CatólicaAgnani 1161 - 1216 Papa 1198 - 1216
Nacido en Agnani y de origen ilustre fue elegido Papa en 1198, sucediendo a Celestino III. Su llegada al trono pontificio es preciso enmarcarla en un contexto de profundas controversias por el papel política de la Iglesia frente a los Estados. Así, a consecuencia del problema de las investiduras, empezado por Gregorio VII, y a raíz del decreto de Graciano en 1140, se instala en el seno de la Iglesia la doctrina de las dos potestades, Iglesia-Imperio. Mediante esta doctrina, la Iglesia reconoce la autonomía del poder político de los Estados, si bien determina su capacitación para actuar en caso de pecado, lo que se denomina potestad indirecta. Imbuido de lleno por esta doctrina, Inocencio III implantó su pleno mandato sobre Roma y los estados pontificios y se arrogó el derecho de intervenir en cuantos asuntos políticos considerara necesarios, menospreciando la autoridad de los Estados. De esta manera, intervino en la sucesión al trono del Imperio en favor de Otón de Brunswick, a quien coronó emperador como Otón IV en 1209, previa cesión por parte de éste de los derechos del Imperio sobre Sicilia, antes territorio del Pontífice. Sin embargo, el incumplimiento de dicho acuerdo provocó que Otón IV fuera depuesto y excomulgado en 1210, sustituyéndole en el trono Federico II, coronado nuevamente por Inocencio III. La larga cuestión de las investiduras le enfrentó también a otro monarca, Juan Sin Tierra, a quien excomulgó en 1209 y derrocó en 1212, interviniendo además en las frecuentes disputas entre Francia e Inglaterra. Además, no consintió el divorcio de Pedro II de Aragón y Cataluña. Continuó también la política de guerra santa contra el Islam, predicando la Cuarta Cruzada en 1204, durante la que se creó el Patriarcado de Constantinopla. En 1208 proclamó la cruzada contra la herejía albigense, condenada junto con la valdense en el IV Concilio de Letrán, de 1215. En dicho Concilio, además, se reguló la confesión anual y la comunión pascual, tratándose por vez primera en un Concilio de un concepto fundamental para la doctrina católica, como es el de la transustanciación eucarística. Durante su mandato nacieron las importantísimas órdenes mendicantes de dominicos y franciscanos, que jugarán un fundamental papel en los años venideros en el seno de la Cristiandad. Escribió "De contemptu mundi", volúmen religioso fundamental en la Baja Edad media.
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*Jaime I El Conquistador. Jaime I
Nacionalidad: Iglesia CatólicaAgnani 1161 - 1216 Papa 1198 - 1216
Nacido en Agnani y de origen ilustre fue elegido Papa en 1198, sucediendo a Celestino III. Su llegada al trono pontificio es preciso enmarcarla en un contexto de profundas controversias por el papel política de la Iglesia frente a los Estados. Así, a consecuencia del problema de las investiduras, empezado por Gregorio VII, y a raíz del decreto de Graciano en 1140, se instala en el seno de la Iglesia la doctrina de las dos potestades, Iglesia-Imperio. Mediante esta doctrina, la Iglesia reconoce la autonomía del poder político de los Estados, si bien determina su capacitación para actuar en caso de pecado, lo que se denomina potestad indirecta. Imbuido de lleno por esta doctrina, Inocencio III implantó su pleno mandato sobre Roma y los estados pontificios y se arrogó el derecho de intervenir en cuantos asuntos políticos considerara necesarios, menospreciando la autoridad de los Estados. De esta manera, intervino en la sucesión al trono del Imperio en favor de Otón de Brunswick, a quien coronó emperador como Otón IV en 1209, previa cesión por parte de éste de los derechos del Imperio sobre Sicilia, antes territorio del Pontífice. Sin embargo, el incumplimiento de dicho acuerdo provocó que Otón IV fuera depuesto y excomulgado en 1210, sustituyéndole en el trono Federico II, coronado nuevamente por Inocencio III. La larga cuestión de las investiduras le enfrentó también a otro monarca, Juan Sin Tierra, a quien excomulgó en 1209 y derrocó en 1212, interviniendo además en las frecuentes disputas entre Francia e Inglaterra. Además, no consintió el divorcio de Pedro II de Aragón y Cataluña. Continuó también la política de guerra santa contra el Islam, predicando la Cuarta Cruzada en 1204, durante la que se creó el Patriarcado de Constantinopla. En 1208 proclamó la cruzada contra la herejía albigense, condenada junto con la valdense en el IV Concilio de Letrán, de 1215. En dicho Concilio, además, se reguló la confesión anual y la comunión pascual, tratándose por vez primera en un Concilio de un concepto fundamental para la doctrina católica, como es el de la transustanciación eucarística. Durante su mandato nacieron las importantísimas órdenes mendicantes de dominicos y franciscanos, que jugarán un fundamental papel en los años venideros en el seno de la Cristiandad. Escribió "De contemptu mundi", volúmen religioso fundamental en la Baja Edad media.
*Jesucristo. Jesús De Nazaret
Nacionalidad: Año I era cristiana - 33
Casi nadie niega la existencia histórica de Jesucristo. Nació en la localidad palestina de Belén ya que sus padres, José y María, tuvieron que acudir allí para cumplir con el mandato de empadronamiento realizado por Quirino, el legado de Roma. La mayor parte de su vida la pasó en Nazaret realizando trabajos propios de un hombre humilde hasta que a los treinta años inició su vida pública, tras ser bautizado por su primo y precursor, san Juan Bautista. Predicó por todos los lugares de Palestina acompañado de un pequeño grupo de seguidores -los Apóstoles- elegido entre los miembros más humildes de la sociedad. Su labor de evangelización fue acompañada por una serie de milagros -curación de enfermedades, resurrección de enfermos, perdón de pecados- que serían intrínsecos de su naturaleza divina como hijo de Dios. Las doctrinas y enseñanzas predicadas por Cristo tuvieron amplia repercusión, calando hondo entre las clases más humildes debido a sus mensajes de igualdad y solidaridad. Sin embargo, su presencia molestó a los máximos mandatarios religiosos de Israel. Fue acusado de blasfemo al titularse hijo de Dios y perdonar los pecados. Algunos llegaron a tildarle de subversivo al pretender -según ellos- recuperar el trono de David. Esta vinculación política de Jesús sería lo que provocó los temores de Roma, ya que en la provincia de Judea las revueltas eran habituales. Los fariseos consiguieron del procurador Poncio Pilato la condena a muerte de Jesús. Tras ser traicionado por uno de sus discípulos llamado Judás , Jesucristo fue crucificado en el monte Calvario en compañía de dos ladrones. A su muerte ordenó a sus discípulos que predicaran el Evangelio por todos los rincones.
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*Jiménez de Rada, Rodrigo
Nacionalidad: EspañaPuente la Reina, Navarra 1170 h. - Vienne, Francia 1247 Historiador y religioso
Su formación discurre en París. Al concluir sus estudios fue aceptado en al corte de Alfonso VIII. Aunque, fue seleccionado para el obispado de Osma, no llegó a desempeñar esta función, al ser nombrado arzobispo de Toledo. Tras la batalla de las Navas de Tolosa se hizo cargo de diversas labores como la organización del Adelantamiento de Cazorla, además de impulsar la construcción de la catedral de Toledo. Para esta iniciativa contó con la ayuda de Fernando III el Santo. En el año 1215 intervino en el concilio de Letrán. Fue uno de los principales mediadores entre la iglesia y los reinos españoles para buscar una solución a los enfrentamientos con los musulmanes. De este modo, mantuvo conversaciones Alfonso IX, Enrique I y Fernando III, y con los papas Inocencio III, Honorio III, Gregorio IX e Inocencio IV. De su legado como historiador cabe recordar: "De Rebus Hispaniae", "Hunnorum, Vandalorum, Suevorum, Alanorum et Silingorum Historia" e "Historia Gótica", entre otras obras. Todos estos escritos han servido como fuente para muchos historiadores posteriores. Aunque falleció en Francia, sus restos descansan en el monasterio de Huerta
*Juan I
Nacionalidad: Castilla1358 - 1390 Rey 1379 - 1390
Hijo de Enrique II y Juana Manuel, alcanzó el trono en 1379. Casó con Leonor de Aragón en 1375, de cuyo matrimonio fueron hijos Enrique III, su sucesor, y Fernando (el de Antequera), que reinará en Aragón. En 1385 casa con Beatriz de Portugal. En política interior, su mandato se caracterizó por una amplia y extensa tarea legislativa y una colaboración fluida con las Cortes. Destaca la creación en 1385 del Consejo Real. Más agitada fue su política exterior, que comienza con el apoyo a Francia durante la Guerra de los Cien Años y la participación en las deliberaciones suscitadas por el Cisma. La aspiración de Juan de Gante, duque de Láncaster, a la corona de Castilla en 1383, supone un serio problema. Juan de Gante reclama el trono en virtud de su matrimonio con Constanza, hija de Pedro I el Cruel, por lo que promueve un primer ataque desde Portugal, que fracasa. En contrapartida, Juan II aspira a tomar el trono portugués, pero el desastre de Aljubarrota le hace desistir. Las convulsiones castellanas facilitan a Inglaterra la invasión de Galicia y obligan al rey a convocar las Cortes de Briviesca (1386) para tomar medidas. Sin embargo, en 1387 fracasa el ataque inglés y un año más tarde se firma el tratado de Bayona, que acaba definitivamente con las pretensiones del último de los "emperejilados".
*Justiniano I
Nacionalidad: BizancioTauresio 482 - Constantinopla 565 Emperador 527 - 565
Los estudios recientes están intentando eliminar el halo mítico que rodea al reinado de Justiniano, considerado tradicionalmente un momento de esplendor y éxito. Bien es cierto que se produjeron importantes campañas militares pero también se frustraron otras muchas al tiempo que se inicia un periodo de crisis económica salpicado de epidemias y terremotos. Quizá el esplendor de la construcción de Santa Sofía o la iglesia de San Vital de Ravena haya magnificado en exceso este reinado. Justiniano, a pesar de pertenecer a una familia de origen humilde, fue nombrado cónsul y asociado al trono por su tío Justino I, quien le nombró sucesor a su muerte en 527. Su matrimonio con Teodora, antigua bailarina de circo, tendrá gran importancia ya que la emperatriz influirá decisivamente en algunas cuestiones políticas y religiosas. Se rodeó Justiniano de un estrecho grupo de colaboradores entre los que destacan Triboniano o Belisario. Gracias a los relatos de Procopio conocemos los deseos de Justiniano de alcanzar el esplendor de la Roma Imperial, motivo por el que realizó toda la amplia serie de campañas exteriores. Una vez estabilizado el peligro persa en la zona oriental gracias a la paz perpetua firmada con Cosroes por la que el emperador se comprometía a pagar un tributo anual al sasánida, Justiniano emprendió la "recuperación" de Occidente. Su primer objetivo será acabar con los vándalos, derrotando a tan peligrosos enemigos (533-534). El general Belisario dirigió satisfactoriamente las campañas que consiguieron la conquista de Cartago, Sicilia, las Baleares y parte de la costa levantina peninsular. Belisario se dirigió a la península Itálica con el ánimo de culminar su expansión con el mismo éxito y rapidez de campañas anteriores. Tomó Roma no sin ciertas dificultades ante la resistencia ostrogoda pero el resto del territorio ofreció importantes resistencias dirigido por Totila. Belisario cayó en desgracia ante Justiniano, siendo sustituido por Narsés quien acabó con las fuerzas ostrogodas. La región quedaba absolutamente devastada tras una guerra que duró casi 20 años. El Imperio de Oriente alcanzaba una extensión máxima, defendiendo sus fronteras o alcanzando pactos con los pueblos que presionaban. En el plano interno, Justiniano aprovechó la prosperidad económica y comercial que le proporcionaban las nuevas conquistas, al tiempo que emprendió una importante labor legislativa y de recopilación jurídica que contrasta con su política religiosa. Constantinopla se convertirá en el mayor mercado del mundo y en la plaza intermediaria entre el tráfico occidental y oriental. La recopilación y reorganización de las leyes romanas será una de las empresas más destacables, confiada a un colegio de diez juristas que dirigía Triboniano. El "Corpus Iuris Civilis" será la gran obra conseguida por este equipo de expertos. La ortodoxia de Justiniano le llevó a realizar numerosas persecuciones contra posiciones supuestamente heréticas, animado en numerosas ocasiones por su esposa Teodora. Las persecuciones fueron combinadas con una política de aproximación, demostrando una vez más los deseos de Justiniano de tomar parte en las decisiones religiosas. El resultado de esta misión espiritual fue un rotundo fracaso, abriendo aún más las brechas entre las iglesias de Oriente y Occidente.
*León IX
Poeta
Educado junto a su tío -el cardenal Gómez Barroso-, formó parte del estrecho círculo de colaboradores del rey Pedro I hasta que cambió de bando, apoyando al pretendiente don Enrique, junto a quien participó en la batalla de Nájera. Colaboró también con el sucesor del primer Trastámara, Juan I y los portugueses le apresaron en la batalla de Aljubarrota, siendo encarcelado. En 1399 regresó a Castilla para ser nombrado canciller mayor del reino. La faceta literaria del canciller Ayala será quizá más sobresaliente que su labor política. Es el autor del "Rimado de Palacio" donde hace una ácida descripción de la sociedad de su tiempo, incidiendo en la corrupción de los valores sociales, religiosos y políticos. También realizó las crónicas de los reyes Pedro I, Enrique II, Juan I y una parte de la de Enrique III. Tradujo algunos clásicos como Tito Livio y autores contemporáneos como Boccaccio
*Livio, Tito
Poeta
Educado junto a su tío -el cardenal Gómez Barroso-, formó parte del estrecho círculo de colaboradores del rey Pedro I hasta que cambió de bando, apoyando al pretendiente don Enrique, junto a quien participó en la batalla de Nájera. Colaboró también con el sucesor del primer Trastámara, Juan I y los portugueses le apresaron en la batalla de Aljubarrota, siendo encarcelado. En 1399 regresó a Castilla para ser nombrado canciller mayor del reino. La faceta literaria del canciller Ayala será quizá más sobresaliente que su labor política. Es el autor del "Rimado de Palacio" donde hace una ácida descripción de la sociedad de su tiempo, incidiendo en la corrupción de los valores sociales, religiosos y políticos. También realizó las crónicas de los reyes Pedro I, Enrique II, Juan I y una parte de la de Enrique III. Tradujo algunos clásicos como Tito Livio y autores contemporáneos como Boccaccio
*López de Ayala, PedroPoeta
Educado junto a su tío -el cardenal Gómez Barroso-, formó parte del estrecho círculo de colaboradores del rey Pedro I hasta que cambió de bando, apoyando al pretendiente don Enrique, junto a quien participó en la batalla de Nájera. Colaboró también con el sucesor del primer Trastámara, Juan I y los portugueses le apresaron en la batalla de Aljubarrota, siendo encarcelado. En 1399 regresó a Castilla para ser nombrado canciller mayor del reino. La faceta literaria del canciller Ayala será quizá más sobresaliente que su labor política. Es el autor del "Rimado de Palacio" donde hace una ácida descripción de la sociedad de su tiempo, incidiendo en la corrupción de los valores sociales, religiosos y políticos. También realizó las crónicas de los reyes Pedro I, Enrique II, Juan I y una parte de la de Enrique III. Tradujo algunos clásicos como Tito Livio y autores contemporáneos como Boccaccio
*Luis IPoeta
Nacionalidad: Francia1121 - 1180 Rey 1137 - 1180
Apodado el Joven, era hijo de Luis VI, a quien sucedió en 1137. Ayudó al papa Alejandro III en sus disputas con Federico Barbarroja. Mantuvo una lucha constante con Enrique II de Inglaterra, quien se casó con su ex-mujer Leonor de Aquitania, obteniendo así el dominio sobre ese territorio. Luchó de manera notable en la Segunda Cruzada.
*Luis VII
Nacionalidad: Francia1121 - 1180 Rey 1137 - 1180
Apodado el Joven, era hijo de Luis VI, a quien sucedió en 1137. Ayudó al papa Alejandro III en sus disputas con Federico Barbarroja. Mantuvo una lucha constante con Enrique II de Inglaterra, quien se casó con su ex-mujer Leonor de Aquitania, obteniendo así el dominio sobre ese territorio. Luchó de manera notable en la Segunda Cruzada.
*Llull, Ramón
Nacionalidad: 1233 h. - 1315 Escritor y filósofo
Aunque poco se sabe de sus primeros años de vida, se conoce que se casó y tuvo dos hijos, convirténdose más adelante en profesor y miembro de la orden de San Francisco. Abrazó entonces un cristianismo militante, defensor de la fe mediante la palabra, pero sin desdeñar la polémica y el argumento. Fundó el colegio de misioneros de Miramar, en Montpellier, y viajó frecuentemente a los principales centros intelectuales de la época (Roma, París, Barcelona, Nápoles), donde no siempre fue entendido. En el Concilio de Viena, 1311, se aprobó a propuesta suya la creación de varios colegios de lenguas orientales. Escribió en latín, árabe y catalán más de 300 obras, en una labor de recopilación del saber que le llevó a acercarse con una profunda curiosidad a los más dispares ámbitos, como la filosofía ("Ars magna", "Començament de Filosofía", "Art demostrativa", etc), la novela caballeresca de contenido místico ("Blanquerna", "Félix" o "Libre de Meravelles"), la poesía ("Libre d´Amic e Amat", "Arbre de filosofia d´Amor") o el campo doctrinal ("Doctrina pueril", "Llibre del ordre de cavayleria"). Se le considera el creador de la prosa literaria escrita en lengua catalana. Su pensamiento parte del supuesto de una filosofía dependiente de la teología y finaliza en la vida contemplativa como consecuencia necesaria de la filosofía. De esta manera, la finalidad última del hombre es alcanzar la idea de Dios mediante el pensamiento lógico-racional. Su metafísica es deudora del pensamiento de autores como Platón, Aristóteles o San Agustín
*Mahoma. Abu l-Qasim Muhammad Ibn Abd Al-lah ibn Abd al-Muttalib Ibn Hasim
Nacionalidad: IslamLa Meca 570 h. - Medina 632 Profeta
Apenas existen fuentes que nos informen sobre los primeros años de la vida de Mahoma. Escasamente en el Corán y la Sira podemos encontrar referencias a su vida. Mahoma era miembro de la poderosa tribu de los Quraysies aunque la tradición lo presenta como un hombre pobre. A los seis años quedaba huérfano por lo que primero sería educado por su abuelo Abd all-Muttalib y después por su tío paterno Abu Talib. Entró a formar parte del próspero negocio caravanero en la casa de Jadiya, alcanzando el cargo de administrador. La situación de Mahoma cambió cuando contrajo matrimonio con la propia Jadiya, viuda de unos 15 años más que el propio Mahoma, ascendiendo en la escala social y económica. Sería hacia los cuarenta años cuando Mahoma empezó a tener las primeras revelaciones constituidas por visiones y audiciones. Gracias a estas revelaciones configuró una doctrina religiosa que extendió entre las personas de su círculo con bastante éxito. Su esposa Jadiya, su sobrino Ali, su hijo adoptivo Zayd o Utman y Abu Bark -futuros califas- siguieron sus revelaciones pero pronto fue perseguido por los ciudadanos y los dirigentes de La Meca. La nueva religión provocaría un cambio en las estructuras políticas y económicas de la ciudad por lo que Mahoma empezó a ser considerado como un enemigo público. Sus planteamientos religiosos se extendieron gracias a su incipiente apostolado, llegando a aldeas cercanas. El peligro que suponía Mahoma en la Meca motivó su marcha a Medina, episodio conocido como la "hegira", momento que el calendario musulmán considera el inicio (622 de la era cristiana). A su llegada a Medina se estableció un incipiente estado musulmán alejado del derecho árabe y absolutamente teocrático. Desde ese momento el propósito de Mahoma será extender la nueva religión, planteando la Guerra Santa (Yihad) como vehículo de expansión. La Meca se convertirá en el principal objetivo de las campañas militares, en un primer momento escaramuzas que se convirtieron en importantes victorias militares como la del foso (627). Mahoma y sus partidarios suponían cada vez un mayor peligro para la aristocracia de La Meca por lo que se planteó el pacto de Hudaybiya (628) por el que el profeta conseguía importantes ventajas. Será en el año 630 cuando La Meca caiga en manos islámicas de manera pacífica. Tras una importante victoria sobre los beligerantes beduinos de la región, Mahoma regresaba a Medina desde donde continuó con su misión reveladora, atrayendo a nuevos grupos de beduinos, bien por las armas o por la convicción. Dos años bastarían para controlar la península Arábiga antes de fallecer en Medina en el año 632.
*Mandonio
Nacionalidad: Ilergetes- 205 a. C. Militar
Parece ser que lideró la tribu de los ilercaones. Al lado de Indíbil protagonizó un levantamiento contra el pueblo romano, al mostrarse en contra de sus elevados impuestos. Sin embargo, nunca cumplió sus expectativas de triunfo, al ser capturado y condenado a muerte
*Manuel I Conmeno
Nacionalidad: Bizancio1120 - 1180 Emperador 1143 - 1180
Esposo de Irene, fue elegido emperador en 1143. Intentó sin éxito recuperar el esplendor del antiguo imperio romano, centrándolo en Bizancio. Así, emprendió diversas campañas con este objetivo: impuso el poder imperial sobre los Estados latinos de Oriente en 1159; extendió la influencia de Bizancio sobre la Dalmacia en 1168, convirtiéndola en ducado, y sobre Servia en 1172; frenó la expansión del poder alemán en Hungría (1173) y se enfrentó a los normandos asentados en el sur de Italia. La derrota de Miriocefalon en 1176 a cargo de los turcos supuso, sin embargo, el final de sus pretensiones de dominio sobre Asia Menor. Su política expansiva tuvo además dos graves consecuencias: le enfrentó a las poderosas potencias de la época, Venecia y el Imperio, y ocasionó graves y cuantiosos gastos para la economía de Bizancio.
*Marco Aurelio. Marco Aurelio Antonino
Nacionalidad: RomaRoma 121 - Viena 180 Emperador 161 - 180
Miembro de una familia de origen hispánico, Marco Aurelio recibió una esmerada educación interesándose desde joven por la filosofía. Frontone fue su maestro de retórica y Marco Aurelio formará parte del estoicismo, convirtiéndose en uno de sus más importantes representantes. No en balde escribió "Comentarios" donde recogía sus reflexiones y pensamientos, caracterizados por el tono triste y pesimista, ocupando la muerte un papel destacado en ellos. La relación entre Adriano y Marco Aurelio parece ser estrecha, lo que motivó que el emperador obligara a su sucesor, Antonino Pío, a adoptar al joven Marco Aurelio. A la muerte de Antonino Pío su hijo adoptivo le sucedió. Marco Aurelio asoció al trono a su hermano adoptivo Lucio Aurelio Vero, aunque fue una asociación virtual ya que Marco fue el verdadero emperador. El reinado de Marco Aurelio supone el inicio de la crisis general que vivirá el Imperio a lo largo del siglo III. Ya en los primeros años los bárbaros saquearon regiones fronterizas aunque estas malas noticias se compensaron con los triunfos obtenidos ante los partos, consiguiendo recuperar Siria, Mesopotamia y Armenia. Las tropas procedentes de Oriente regresaron a Italia acompañados de una epidemia de peste que expandieron por todo el Imperio. Diferentes levantamientos se produjeron tanto fuera como dentro de los límites imperiales. En Egipto se produjo una revuelta que estuvo a punto de tomar Alejandría antes de ser sofocada. Hispania y la Galia vivían momentos de agitación, mientras que el Danubio los bárbaros penetraban en el "limes" para saquear zonas fronterizas. La tensa situación requería una solución de emergencia. Se reclutó un nuevo ejército en el que participaron esclavos y gladiadores. El propio emperador tuvo que aportar sus joyas para sufragar los gastos. Pero el esfuerzo económico dio sus frutos y, tras casi seis años de guerra, los bárbaros se retiraron. Sin embargo, la guerra no acaba ya que en Siria se proclamó emperador el gobernador. El usurpador fue asesinado tras tres meses de gobierno y Marco Aurelio centró sus fuerzas en una nueva rebelión de bárbaros en el Danubio. El emperador fallecía en el transcurso de la guerra en Viena. Le sucedió su hijo Cómodo poniendo fin a la guerra danubiana.
*Martín IV
Nacionalidad: Iglesia CatólicaMontpellier (Francia) 1219 - 1285 Papa 1281 - 1285
Nacido en Montpellier, Francia, fue elegido papa en 1281. Papa de corte político, apoyó a la facción de los güelfos e intervino en las diócesis eclesiásticas en favor de sus allegados. Excomulgó a Pedro III de Aragón y a Miguel Paleólogo, emperador bizantino
Nacionalidad: Bizancio1234 - 1282 Emperador 1259 - 1282
Brillante militar, fue coronado emperador en 1259. Ostentó la regencia de Juan IV Lascaris y logró tomar Constantinopla a Balduino II.
Nabucodonosor
Nacionalidad: Babilonia
Rey 604 a.C. - 562 a.C.
A pesar de ser el rey más importante de Babilonia, no se conoce a la perfección el reinado de Nabucodonosor. Tras la caída de Asiria será Babilonia quien alcance la hegemonía en el Creciente Fértil. En los primeros años del reinado de Nabucodonosor se hace casi una campaña anual en dirección a las tierras de Siria. Karkemish pasó a manos babilonias como paso previo de la toma de Palestina y Siria, dura labor que costó importantes esfuerzos al ejército babilonio. Esta actitud expansiva por la zona siria provocó la intervención de Egipto, deseoso de mantener su hegemonía sobre los puertos del Líbano. El primer enfrentamiento egipcio-babilonio se produjo en 601 a.C., obteniendo la victoria los primeros. Estos hechos provocaron que Joaquim de Judá rompiera con Nabucodonosor durante tres años hasta que el rey babilonio puso sitio a Jerusalén. La ciudad fue saqueada y Joaquim deportado a Babilonia, entronizando a Sedecías como rey de Judá.
Era evidente que los países palestinos no veían con buenos ojos la dominación ejercida por Nabucodonosor. Con la ayuda del faraón Apries se organizó una coalición formada por Egipto, Judá, Amón y Fenicia mientras Edom y Moab permanecían neutrales. Nabucodonosor pasó rápidamente a la acción y trasladó sus tropas a Fenicia que fue sometida, introduciéndose en Judá donde la mayoría de las ciudades fueron ocupadas. Jerusalén resistió durante dos años antes de caer capturada. A pesar de las victorias, Nabucodonosor volvió a encontrar resistencia de las regiones sirio-palestinas que siempre contaban con la inestimable ayuda de Egipto. No en balde, Necao ocupó el territorio de Gaza. Pero a partir de 568 a.C. las relaciones entre Egipto y Babilonia parecen más estables, respetando sus respectivas áreas de influencia.
En el aspecto interior, el reinado de Nabucodonosor fue bastante favorable ya que puso en marcha una política de recuperación nacional, tras diez años de guerras internas. Los canales fueron rehabilitados, la agricultura restablecida y las ciudades reconstruidas. Un periodo de prosperidad se abre para el país, salpicado de momentos de tensión provocados por las esporádicas revueltas
Nacionalidad: Al-Andalus
823 - 886
Emir 852 - 886
Muhammad I era hijo de Abd al-Rahman II y le sucedió en el cargo de emir de al-Andalus. La prosperidad iniciada en el reinado anterior continuó, salpicada de sublevaciones que intentaron hacer frente al poder cordobés. La mayoría de las revueltas estallaron en las regiones fronterizas. En el valle del Ebro un miembro de la poderosa familia de los Banu Qasi llamado Musa ibn Musa se autotituló "tercer rey de España". Toledo siguió un camino similar gracias a la ayuda del monarca asturiano Ordoño I pero las tropas musulmanas se impusieron a los rebeldes en la batalla de Guazalete. Extremadura también sufrió la llama de la sedición encabezada por el muladí Ibn Marwan, conocido como el Gallego. Alcanzó cierto grado de independencia y estableció una especie de dinastía que se mantuvo en el poder durante años. En Sevilla también se establecerá un gobierno semi-independiente liderado por el jefe de una familia árabe, movimiento reconocido por el propio emir. Pero el levantamiento más importante tuvo lugar en el seno de la propia Andalucía donde el muladí Umar ibn Hafsun se rebeló en la serranía de Ronda. Esta insurrección durará casi 50 años, siendo sofocada por el califa Abd al-Rahman III. La prosperidad que vivía el Estado Omeya era más bien engañosa y la estructura parecía resquebrajarse, continuando durante los emiratos de Almundir y Abd Allah.
Napoleón I
Nacionalidad: Francia
Ajaccio 15-8-1769 - Santa Elena 1821
Emperador 1799 - 1814
Napoleón había nacido en Ajaccio, en la isla de Córcega, el 15 de agosto de 1769. Su padre, Charles Bonaparte, procedía de una familia toscana asentada en Córcega a comienzos del siglo XVI y que ya, a mediados del siglo XVIII, había conseguido una destacada situación como propietario agrícola y como comerciante. Su posición social llevó al padre de Napoleón a buscar el ennoblecimiento. Su madre, Maria Laetizia Ramolino, de la que poco se sabe, se había casado cuando sólo contaba catorce años y dio a su marido ocho hijos: José (1768), Napoleón, Lucien (1775), Elisa (1777), Luis (1778), Paulina (1780), Carolina (1782) y Jerónimo (1784). Napoleón vivió durante sus primeros años en un ambiente familiar de carácter patriarcal en el que hermanos, abuelos, tíos, primos, y una cohorte de sirvientes y criados le dieron un claro sentido de la jerarquía y de la autoridad y le habituaron a una cierta inclinación por los fastos.
La familia Bonaparte había tomado parte en los movimientos de resistencia cuando la isla fue anexionada a Francia. Pero eso no fue obstáculo para que el padre de Napoleón hiciese un movimiento de aproximación a los nuevos dominadores después de la derrota de los corsos en Ponte Nuovo (1769), lo que le granjeó la confianza del gobernador francés. Como representante de la nobleza de la isla ante el rey, pudo conseguir que el joven Napoleón entrase en la Escuela Militar de Brienne con una beca, y posteriormente que completase sus estudios en la Escuela Militar del Campo de Marte, en París. De sus años de internado sólo se sabe que se sentía extraño, tan alejado de su casa y de los suyos, y que no sobresalió especialmente por su nivel en los estudios. Sin embargo, algo debió destacar ya entonces cuando su profesor de historia escribió de él lo siguiente: "Irá lejos si las circunstancias le favorecen".
Cuando salió de la Escuela Militar -en el puesto 42 de los 58 de su promoción- fue destinado al regimiento de La Fère-Artillerie con el grado de segundo teniente. A partir de entonces comenzó un peregrinaje de ciudad en ciudad para cubrir diversos destinos -Valence, Lyon, Douai, Auxonne- en los que llevó una vida monótona y rutinaria en los respectivos cuarteles donde se limitaba a repetir ejercicios militares. No obstante, parece ser que estos años fueron decisivos para la formación de su personalidad a causa, sobre todo, de la intensa dedicación a la lectura en sus muchos ratos de ocio en las distintas guarniciones. Desde las obras de Rousseau, Mably, Voltaire, Mirabeau, Necker, hasta los libros referentes a las tácticas militares y especialmente a la artillería, todas esas lecturas contribuyeron a enriquecer sus conocimientos, si bien un tanto desordenadamente. Las notas al margen con las que frecuentemente comentaba algunos de los pasajes de lo que estaba leyendo, revelan una atención especial hacia los sentimientos que inclinaban a los hombres a la búsqueda de la felicidad, del amor, o de la crueldad, así como hacia las instituciones o hacia las prerrogativas de la monarquía y de la nobleza. Para su biógrafo Calvet, Napoleón Bonaparte entró en contacto, entre los dieciséis y los veinte años, con los hombres del pasado y del presente, de los que le separaban las dificultades de la vida, a través de la lectura. Después de la muerte del padre de Napoleón, la familia Bonaparte atravesó por graves dificultades económicas. Sus hermanos tuvieron que afrontar numerosos problemas para salir adelante en sus estudios, aunque al final, José pudo terminar su carrera de abogado, Luisa pudo ingresar en la Escuela de Saint-Cyr, Lucien en la Escuela Militar de Brienne y Luis en un colegio francés. Las mayores dificultades se presentaron, no obstante, por la actividad política de los Bonaparte a raíz del estallido de la Revolución. El abogado José y el teniente Napoleón se lanzaron a la lucha política en Córcega hasta que el primero consiguió un escaño en el Consejo General de la isla y el segundo fue elegido teniente coronel de la Guardia Nacional. La participación de ambos en las luchas revolucionarias y la denuncia que Lucien Bonaparte hizo en el club de los jacobinos de Toulon del héroe de la independencia corsa, Paoli, obligaron a Napoleón y a toda su familia a huir a Francia en junio de 1793, para evitar las represalias de los paolistas. En Marsella, donde se refugiaron, Mme. Bonaparte conoció a un comerciante, Clary, con el que compartió el resto de su vida. La hija de éste, Desirée Clary, mantuvo relaciones amorosas con Napoleón, aunque más tarde casaría con Bernadotte, llegando a ser reina de Suecia. Las circunstancias que motivaron la salida de Córcega por parte de Napoleón, cortaron definitivamente su relación con la isla y las aspiraciones independentistas que había mostrado en algún momento de su juventud. A su vuelta de Córcega, Napoleón entró a servir como capitán en el 4.° regimiento de artillería de Niza. En aquella época escribió un curioso opúsculo titulado Le Souper de Beaucaire, en el que mediante el diálogo entre un burgués de Nimes, un fabricante de Montpellier y un negociante de Marsella, trataba de persuadir a los girondinos de la importancia de la causa de la Montaña. Sin embargo, hasta entonces, Napoleón no había participado de una manera directa en las campañas del ejército revolucionario contra sus enemigos. Su primera experiencia en este sentido sería en el asedio de Tolón en el que demostraría por primera vez sus dotes militares y se daría a conocer en los medios castrenses. El puerto de Tolón había sido tomado por la flota inglesa y Napoleón, que ya había sido nombrado comandante, propuso la toma del fuerte de L`Eguillette y en una audaz maniobra consiguió poner bajo el tiro de su artillería a los navíos británicos y a los españoles, que tuvieron que abandonar aquellas aguas. Aquella acción, culminada el 17 de diciembre de 1793, le valió el nombramiento de general de brigada y le llevó al ejército que operaba en la frontera de Italia. El golpe de Termidor dio lugar a una depuración de los elementos más exaltados, a la que no escapó el joven militar corso a causa de la colaboración que había mantenido con los montañeses más radicales. Aunque en realidad Napoleón no se sentía ideológicamente ligado a ningún grupo político en particular, fue acusado de haber participado en una intriga en Génova y encarcelado en Antibes. Aunque fue puesto en libertad a las pocas semanas, siguió levantando las sospechas de los girondinos que veían en él a un peligroso militar terrorista. Barras fue quien le sacó del ostracismo y le encomendó el mando del ejército del Interior para mantener el orden frente a la creciente actividad de los realistas (Vendimiario de 1795). La operación que dirigió el 5 de octubre contra los insurrectos que se habían hecho fuertes en la iglesia de Saint-Roch, en las proximidades de las Tullerías, le valió el reconocimiento del gobierno. A partir de ese momento, su ascenso no conocería nuevas interrupciones. En París, frecuentó los círculos de la alta sociedad y en casa del Director Barras conoció a la joven Josefina de Beauharnais, viuda del general vizconde de Beauharnais, que había sido diputado de la nobleza en los Estados Generales y presidente de la Constituyente antes de ser guillotinado en 1794. Napoleón quedó pronto seducido por la atractiva vizcondesa, aunque como muy bien señala Georges Lefèbvre, el general debió ver también en ella la influencia que podía adquirir con su relación. El 9 de marzo de 1796 contrajo con ella matrimonio civil y dos días más tarde salía para unirse al ejército de Italia como comandante en jefe. Las campañas de Italia dieron fama a Napoleón en Francia y en toda Europa cuando aún no había cumplido los treinta años. Su mayor mérito consistió en reorganizar y disciplinar a un ejército mal dotado, dándole la coherencia y la rapidez de acción necesarias para llevar siempre la iniciativa y saber cómo y cuándo tenía que actuar en el campo de batalla. El calificativo que tan frecuentemente se le ha aplicado de genio de la guerra no constituye ninguna exageración si se tiene en cuenta la facilidad con la que venció a sus enemigos en catorce batallas consecutivas. Sus victorias en Lodi, Arcola y Rivoli han quedado como ejemplos en los textos que enseñan el arte de la guerra, por la inteligente concepción en el despliegue de las tropas y por la audacia en la ejecución de los movimientos. En efecto, Napoleón revolucionó la forma de hacer la guerra y modernizó la organización del ejército.
Durante el Antiguo Régimen se había desarrollado un ejército articulado que se desplazaba en fila y que era incapaz de abarcar un terreno extenso y por consiguiente de obligar al enemigo a aceptar batalla o de maniobrar si la operación era defensiva. Con la Revolución, aumentaron los efectivos del ejército y comenzó la guerra de masas. Los generales se vieron obligados a partir sus contingentes en divisiones para hacerlos más manejables. Durante el Directorio se creó una unidad llamada cuerpo de ejército, formado por una cantidad que oscilaba entre los 14.000 y los 40.000 soldados, que a su vez estaba integrada por varias divisiones. Napoleón, en la campaña de Marengo diseñó un cuerpo de ejército, compuesto por dos o tres divisiones, con una caballería escasa y constituida en su mayoría por cuerpos independientes, y una reserva de artillería bajo el mando directo del jefe supremo.
Pero fue en la maniobra de este ejército donde Napoleón mostró su verdadero genio militar. Desplegaba a sus soldados de tal manera que el enemigo no pudiera desenvolverse fácilmente, pero al mismo tiempo los ponía tan cerca unos de otros, que resultaba fácil reagruparlos en el momento de la batalla. Por otra parte, orientaba a los distintos cuerpos hacia un punto situado detrás del frente enemigo, de forma que al avanzar hacia él envolvían al ejército que tenía delante. De todas formas, la estrategia napoleónica no era excesivamente rígida, pues aunque tenía sus principios, dejaba un porcentaje alto a la imaginación y a la improvisación de acuerdo con las circunstancias concretas y el escenario donde había de desarrollarse la acción. La sorpresa era una de las bazas que le gustaba jugar y para ello tenía que desplegar sus movimientos en secreto. En el campo de batalla prefería desgastar al enemigo mediante el ataque a sus flancos o a su retaguardia y con el menor desgaste posible por su parte. Con la artillería contribuía a rebajar la moral del enemigo, y cuando creía que estaba a punto de caer era cuando lanzaba sus tropas frescas para que terminasen con él.
La destreza de Napoleón en el arte de la guerra no fue suficiente, sin embargo, para triunfar en todos los frentes a los que le llevó su deseo expansionista. Había una limitación importante, y ésta venía determinada por los recursos económicos disponibles para sostener las campañas. Mientras que el teatro de operaciones se desarrolló en Italia, donde las distancias eran cortas y el abastecimiento no planteaba grandes problemas, pues además la fertilidad del suelo permitía al ejército rehacerse sin graves dificultades, Napoleón pudo acrecentar su prestigio. Los problemas comenzaron cuando las distancias se hicieron mayores en Alemania, en Polonia y, sobre todo, en Rusia. Las marchas se convirtieron en algo agotador y el abastecimiento se hizo cada vez más inviable. La necesidad de distribuir a las tropas por esos inmensos territorios, dispersó al ejército que, además, se vio castigado duramente por la rigurosidad del clima. "La estrategia napoleónica -afirma Lefèbvre- no consiguió armonizarse perfectamente con las condiciones geográficas que su origen, totalmente mediterráneo, no le permitían prever".
Napoleón se convirtió pronto en un mito de la Historia. La bibliografía existente sobre el personaje y la época es desbordante. Ya en 1933, el historiador Jacques Bainville escribía que una bibliografía napoleónica algo completa debía constar al menos de 10.000 volúmenes, y que lo esencial no se reunía en menos de 500. Hoy sabemos que hay más de 70.000 libros dedicados a la figura de Napoleón. A pesar de ello, Georges Lefèbvre, quizá su mejor biógrafo, ha sabido resumir perfectamente en pocas líneas su personalidad y a sus palabras nos remitimos: "Pequeño y bajo, bastante musculoso, rojizo y todavía seco a los treinta años, el cuerpo endurecido y siempre listo. La sensibilidad y la resistencia de los nervios son admirables, los reflejos de una prontitud asombrosa, la capacidad de trabajo ilimitada; el sueño viene cuando se le ordena. Y ahora al reverso: el frío húmedo provoca la opresión, la tos, la disuria; la contrariedad despierta gran cólera; el exceso de trabajo, a pesar de los baños calientes y prolongados, de una extrema sobriedad, de un uso moderado pero constante de café y de tabaco, engendra a veces breves desfallecimientos que llegan, incluso, al llanto. El cerebro es uno de los más perfectos que han existido: la atención siempre despierta, remueve infatigablemente los hechos y las ideas; la memoria los registra y los clasifica; la imaginación juega libremente y, por una tensión permanente y secreta, inventa sin fatigarse, los asuntos políticos y estratégicos que se manifiestan en iluminaciones repentinas, comparables a las del matemático y del poeta, con preferencia durante la noche, en un repentino despertar, lo que él mismo llama la llamada moral, la presencia del espíritu de después de media noche. Este ardor espiritual ilumina, por medio de los ojos fulgurantes el rostro aún sulfurado, a su recuerdo del Corso de los cabellos lisos... El se hacía justicia: yo soy incluso un buen hombre; y es verdad; se mostró generoso e incluso amable para aquellos que trataba de cerca... Organización física y cerebral que ocultan ese irresistible impulso hacia la acción y la dominación que se llama su ambición. Él lo ha visto claro en sí mismo: Se dice que soy ambicioso, se equivocan; no lo soy, o al menos mi ambición está tan íntimamente unida a mi ser que no puede separársele".
Sin duda su popularidad fue un factor decisivo en su decisión de abordar el 18 de Brumario del año VIII de la Revolución (9 de noviembre de 1799), instaurando una dictadura moderada en la que, legalmente, el poder le era concedido por el pueblo a un triunvirato formado por Sièyes, Ducos y él mismo. Más tarde se proclamó primer cónsul, cargo que le facultaba para desempeñar el poder durante diez años.
En esta etapa, su organización administrativa legó profundos cambios, creando estructuras de gobierno que aun permanecen en la actualidad, como el Consejo de Estado, las prefecturas o la reforma judicial. Además, consiguió acabar con las guerras civiles que asolaban Francia y emprendió un programa económico que permitió enjugar el déficit del país.
En política exterior, consiguió vencer a Austria en la batalla de Marengo (1800), logrando un año más tarde la firma de una ventajosa paz (Lunéville). Ese mismo año de 1801 normalizó las relaciones con el Papado, muy resentidas y deterioradas tras los cambios en materia religiosa introducidos por la Revolución. Gracias a esto, logró hacerse coronar emperador el 2 de diciembre de 1804 por el papa Pío VII en la misma catedral de Nôtre-Dame, ciñéndose él mismo, en un gesto cargado de unas nada despreciables connotaciones simbólicas, la corona imperial. Napoleón y Francia se veían a sí mismas, con este acto, en la cumbre máxima del poder.
La expansión imperial francesa, mientras tanto, mantenía abiertos varios frentes. Las ansias hegemónicas y su agresiva política belicista provocó la reacción de los demás estados, formándose una coalición de potencias -Gran Bretaña, Austria y Rusia-, para frenar a las tropas francesas. Si bien por mar las cosas no fueron bien para Napoleón, dado el aplastante poderío naval británico (derrotas en Abukir y Trafalgar), por tierra su dominio táctico y la preparación de sus generales y soldados le hizo obtener brillantes victorias (Ulm, Austerlitz, Jena, Auestardt, Friedland, etc.).
La decisión de aislar a su principal y más peligroso enemigo, Gran Bretaña, mediante un bloqueo continental, le hizo dirigir sus miras hacia España y Portugal. Rápidamente consiguió Napoleón imponer a su hermano José en el trono español, aprovechando la debilidad de los borbones Carlos IV y Fernando VII y realizando una hábil política de intrigas entre ambos. Sin embargo, a partir de 1808 se sucedieron los levantamientos populares, al mismo tiempo que una táctica militar desacostumbrada -la guerra de guerrillas-, ponía en serios apuros a las tropas francesas en suelo español hasta el punto que el mismo Napoleón hubo de trasladarse para dirigir las operaciones.
Un año más tarde, al no tener hijos de su matrimonio con Josefina, estéril desde los treinta y cinco años, se hizo efectiva la separación y declarada nula la unión. Deseoso de tener un heredero, rápidamente concertó su segundo matrimonio, esta vez con una princesa austriaca, María Teresa, hija del emperador Francisco I. La unión se hizo posible como acuerdo establecido en la paz de Viena, firmada tras la derrota austriaca en la batalla de Wagram. El 20 de febrero de 1811 nacía por fin su anhelado heredero, Francisco Carlos José Bonaparte, destinado a suceder a su padre al frente de un imperio que comprende la mitad de Europa y que incluye, además de Francia, las anexionadas Bélgica, Holanda y la margen izquierda del Rhin. Además, Napoleón gobierna en la Confederación Helvética, la del Rhin y el Reino de Italia, sin olvidar los estados que controla mediante la imposición de algún familiar o colaborador, como el Reino de Nápoles, gobernado por el mariscal Murat, o España, por su hermano José.
El gigante ruso marcará el principio del fin napoleónico. En 1812 emprende su conquista haciendo cruzar territorio polaco un ejército de más de 500.000 hombres, obligando a los ejércitos del zar Alejandro I a replegarse y practicar una política de tierra quemada que, a la postre, fue uno de los factores decisivos de la derrota francesa. Las victorias menores de Napoleón en Smolensko y Borodino le permitieron entrar en Moscú, que debió rápidamente abandonar por la falta de provisiones y avituallamiento. La retirada fue cruel y penosa para los ejércitos franceses, acosados por el enemigo, el extremo invierno ruso y el desánimo. Sólo 18.000 soldados consiguieron llegar a Polonia y, lo que fue peor aun para el Emperador francés, quedó abierto el camino para su derrota definitiva. Las victorias de la coalición antifrancesa comienzan desde entonces a ser habituales, comenzando por España, de donde son desalojados, y continuando por la misma invasión de Francia, que culmina con la entrada en París de los aliados el 31 de marzo de 1814 y la abdicación del mismo Napoleón 6 días más tarde.
Tras la derrota militar, el otrora mayor soberano europeo quedó confinado en la isla de Elba, si bien su destierro fue momentáneo. Su popularidad aun no había decaído en Francia y era muchos los que anhelaban su vuelta. Así, sin mayores dificultades, consigue recuperar el poder en febrero de 1815. Inaugura un período denominado los Cien Días en que, aclamado por las multitudes, prepara de nuevo a sus tropas para la conquista. Sin embargo, esta vez el fracaso será definitivo, cosechando en la batalla de Waterloo una calamitosa derrota.
Tras entregarse a los británicos, huyendo de la persecución a que era sometido por parte de los prusianos, fue de nuevo confinado a una isla, esta vez Santa Elena. Así, tras escribir sus memorias, el 5 de mayo de 1821 falleció de causas que aun despiertan controversia entre los especialistas. Tradicionalmente atribuida su muerte a una úlcera que le provocó un cáncer de estómago, análisis toxicológicos de sus cabellos parecen demostrar que sufrió un envenenamiento por arsénico continuado, probablemente ordenado por la coalición antimonárquica, que temía una nueva intentona por recuperar el poder. Cierta o no la teoría, con Napoleón murió uno de los grandes personajes de la Historia y uno de los mayores genios en el ámbito de la estrategia militar.
Nasser, Gamal Abdel
Nacionalidad: Egipto
Asiut 15-1-1918 - 1970
Presidente 1956 - 1970
De origen humilde, estudia en la Real Academia Militar, finalizando sus estudios con veinte años. En estos años establece una estrecha relación con algunos oficiales y crea en secreto un movimiento revolucionario, al que llama "Oficiales Libres". El presencia de los ingleses y el poder en manos de los terratenientes más poderosos, junto con la escasa influencia del rey Faruk, motivó a este grupo para provocar un golpe de Estado en 1952. Con esta iniciativa lograron expulsar al monarca de su trono. Desde este momento las tierras pasaron a manos del estado para acabar con los terratenientes y en 1954 Nasser se convirtió en primer ministro. Respecto a la ocupación británica se alcanzó un acuerdo con Gran Bretaña que significó el final de este control. De este modo en 1956, Nasser asumía la presidencia de Egipto. Bajo su gobierno se nacionalizó el canal de Suez. Uno de sus sueños fue crear una República Arabe Unida, pero finalmente no lo consiguió. Nasser fue responsable de la fundación del partido gubernamental, al que llamó, Unión Socialista Arabe. Nacionalizó bancos y empresas para potenciar la economía del país y su industrialización. En 1967 los lazos de unión entre los árabes e israelíes se rompieron. Con la Guerra de los Seis Días, Nasser tuvo que aceptar su culpa y presentó la dimisión. Pero regresó al poder por petición del pueblo.
Nacionalidad: Roma
Anzio 37 - Roma 6-6-68
Emperador 54 - 68
Hijo de Domicio Ahenobardo y de Agripina menor y sobrino de Calígula, Nerón es el último representante de la familia Julia-Claudia. Cuando Claudio murió, los pretorianos eligieron a Nerón como emperador, elección que fue confirmada por el Senado. Nerón tenía apenas 17 años cuando accedió al trono, siendo sus primeros años de gobierno bastante positivos. Los asuntos de Estado estuvieron a cargo de Burro y Séneca, este último educador y hombre de confianza del emperador. Ambos dirigentes pretendieron seguir el espíritu del gobierno de Augusto aunque la burocracia implantada por Claudio alcanzaba cada vez más poder.
En el año 55 moría Británico en extrañas circunstancias, apuntándose al asesinato. Pronto empezaron a surgir dos importantes grupos de presión en la corte dirigidos por Burro y Séneca por un lado y Agripina por otro. Dos mujeres influían directamente en el emperador: su esposa Octavia vinculada a Agripina y su amante Ates, ligada a Burro-Séneca. La relación entre madre e hijo se fue distanciando, culminando cuando Nerón conoció a Popea Sabina quien incitó al joven a divorciarse de su esposa para casarse con ella. Al obstaculizar Agripina el divorcio Nerón la hizo matar.
Casado con Popea y abandonado por Séneca, el emperador inició una etapa de gobierno caracterizada por los desmanes, el libertinaje y las pasiones teatrales.
En el verano del año 64 a.C. tiene lugar en Roma un espectacular incendio que duró seis días, consumiendo por completo tres de los catorce barrios de la urbe, salvándose sólo cuatro. El pueblo apuntó como culpable al propio Nerón, acusándolo de querer reconstruir la ciudad. El emperador buscó culpables y acusó a los cristianos del incendio. Sin embargo, las acusaciones no cesaron ya que Nerón adquirió un amplio espacio entre el Palatino y el Esquilino donde levantó la famosa "Domus Aurea".
Desde este momento el emperador inauguró un régimen de terror con numerosas condenas y confiscaciones, lo que motivó la organización de un complot dirigido por Calpurnio Pisón y en el que participaron algunos jefes pretorianos, Lucano y el propio Séneca. El complot fue descubierto y todos los participantes fueron ajusticiados. La extravagancia y la dureza de su gobierno llegaron hasta límites insospechados. Un buen ejemplo fue el periplo organizado por Nerón por Grecia para participar en los Juegos Olímpicos y Délficos y en las representaciones teatrales, regresando con 1.800 coronas.
En las provincias no dejaron de estallar revueltas como en Britania o Judea. Será precisamente en las provincias de Hispania y Galia donde se geste el golpe de Estado que acabará con el gobierno de Nerón. Julio Vindice y Sulpicio Galba se rebelarán apoyados por las legiones de Germania. Los pretorianos se vincularon al movimiento y el Senado depuso a Nerón, declarándolo fuera de la ley. El emperador huyó de Roma y se suicidó -o se hizo matar por uno de sus esclavos- en una de sus villas el 6 de junio del año 68.
Pedro II El Católico. Pedro II
Nacionalidad: Aragón
1177 - 1213
Rey 1196
Coronado rey en 1196, heredó de su padre Alfonso II derechos sobre los territorios al sur de Francia, anexionando en 1204 el señorío de Montpellier gracias a su matrimonio con María de Montpellier. La propagación de la herejía albigense en el Languedoc fue aprovechada por la monarquía francesa para intervenir y anular la influencia catalano-aragonesa. En 1210 Pedro II intervino también, declarando bajo su protección a los condes y territorios de Tolosa, Foix y Cominges. La derrota posterior en la batalla de Muret frente a los ejércitos de Simón de Montfort, en la que murió el propio monarca, significó el final de la influencia catalano-aragonesa en el sur de Francia.
Fue coronado en Roma por Inocencio III, declarándose así vasallo de la Santa Sede. Durante su mandato, se alió con la corona castellana, colaborando en las luchas de ésta con las monarquías de León y Navarra y participando en la batalla de las Navas de Tolosa. Su política intervencionista en cuestiones externas fue muy gravosa para las arcas del reino, por lo que la hacienda pública hubo de verse incrementada con nuevos impuestos como el del monedaje, muy contestado por la nobleza y los representantes de las ciudades.
Nacionalidad: Aragón
1319 - 1387
Rey 1336 - 1387
Hijo de Alfonso IV, a quien sucedió, alcanzó el trono en 1336. Los primeros años de su reinado se coligó con el rey castellano Alfonso XI para enfrentarse a los benimerines. Como sus predecesores, estuvo interesado en expandir el dominio del reino sobre el Mediterráneo. Así, en la batalla de Llucmajor, en 1349, incorporó los territorios de Mallorca, el Rosellón y la Cerdaña. En pugna con Génova por el control del Mediterráneo, con seguridad el espacio económico más importante de la época, ruta hacia el rico y exótico Oriente, se alió con Venecia y consiguió firmar en 1356 firmar una paz en Cerdeña. Su matrimonio con Constanza, hija de Federico IV de Sicilia, incorporó ésta al reino y aseguró el control sobre los ducados de Atenas y Neopatria.
La antigua política de colaboración con Castilla se tornó en enfrentamiento abierto, al ayudar a la rebelión de los nobles castellanos encabezada por Enrique de Trastámara contra Pedro I de Castilla.
Las guerras externas tanto peninsulares como en el Mediterráneo, las revueltas de nobles aragoneses y valencianos (sofocadas en Épila y Mislata, 1348) y la gran peste negra de 1348, provocaron cuantiosas pérdidas económicas, por lo que el rey hubo de solicitar numerosos subsidios a las Cortes. Para controlar la recaudación de impuestos y el sufragio a los gastos del monarca surgió en 1359 la Diputació General de Catalunya, organismo que pronto se convertirá en un parlamento político.
Nacionalidad:
1180 - 1275
Dominico y jurista
Ingresado en 1222 en la orden de los dominicos, fue proclamado general de la orden en 1238, cargo al que renunció para convertir a judíos y musulmanes. Fue llamado a Roma por Gregorio IX para reunir los "Decretales", compilación de las epístolas o decretos papales desde Alejandro I hasta 1134. Fundó escuelas para la preparación de misioneros en Barcelona, Murcia y Túnez. Junto a San Pedro Nolasco participó en la fundación de la Orden de la Merced.
Nacionalidad: Grecia
Queronea 46 - 120
Escritor e historiador
Miembro de una familia acomodada, se formó ampliamente en historia, filosofía, literatura y ciencia. Viajó por Egipto y Grecia y vivió temporalmente en Roma. Sus obras más famosas son las "Vidas paralelas", en las que compara a un griego y un romano ilustres, así como sus "Escritos morales", donde mezcla política, historia, astronomía, música, medicina, etc.
Nacionalidad: Roma
Roma 106 a.C. - Pelusio 48 a.C.
Triunviro
Cneo Pompeyo era hijo del cónsul Cneo Estrabón, dedicándose desde su juventud a los asuntos castrenses. Su interés por establecer un principado de carácter militar en Roma le llevó a aliarse con Sila y participar en la guerra contra Sertorio y Cinna en el año 87 a.C. y en la sumisión de la península Itálica cinco años más tarde. La fama alcanzada en estas campañas le llevó a luchar en Sicilia y Africa, enfrentándose a los numidas y a Domicio Ahenobardo. Para reforzar su alianza con Sila contrajo matrimonio con su hijastra, Emilia, tras repudiar a su primera mujer, Antistia.
La muerte de Sila motivó que Pompeyo reaccionara para convertirse en el restaurador del orden constitucional y en el hombre más influyente de la República. Esta es la razón por la que se le confió la represión de la revuelta de Sertorio en Hispania que fue sofocada por Pompeyo de manera satisfactoria en el año 71 a.C. Al año siguiente el cargo de cónsul recaía en Pompeyo, sin haber sido pretor ni cuestor, rompiendo de esa manera el cursus honorum impuesto por Sila. Sus acciones militares fueron exitosas: la campaña contra los piratas del año 67 y la guerra contra Mitrídates del Ponto. Esta lucha le mantuvo alejado de Roma entre los años 66 y 61, regresando a la capital de manera triunfante tras la conquista de Siria. En Roma pudo comprobar como la plebe había encontrado en Julio César a un importante líder. La habilidad política de Pompeyo le llevó a aliarse con César, contrayendo matrimonio con su hija Julia y estableciendo el llamado Primer Triunvirato en el que participaron el propio Pompeyo, Julio César y Craso. En el año 56 a.C. se renovó el pacto y se encomendó a Pompeyo el gobierno de Hispania mientras que César recibía la Galia. Pero ese pacto no se volvió a renovar lo que motivó el estallido de diferencias entre ambos políticos y el estallido de la guerra civil. Pompeyo se retiró a Grecia para organizar una revuelta contra su enemigo y César se lanzó en su persecución. El enfrentamiento definitivo tuvo lugar en Farsalia en el año 48, saliendo Pompeyo derrotado. Se trasladó a Egipto en compañía de su mujer y su hijo Sexto, donde fue asesinado a traición por el rey Ptolomeo XII cuando desembarcó en Pelusio para obtener el monarca egipcio las simpatías de César.
Nacionalidad: Egipto
306 a.C. - 246 a.C.
Rey 285 a.C. - 246 a.C.
Tras el fallecimiento de Ptolomeo I el trono de Egipto recayó en su hijo Ptolomeo II (308-246), llamado Filadelfo o "el que quiere a su hermana", pues contrajo matrimonio con Arsínoe II (hermana de su esposa) tras diez años de matrimonio con Arsínoe I, ambas hijas de Lisímaco. Su reinado abarcó desde el 285 al 246 a.C. y destacó, más que por su labor política, por la cultural, pues fundó un museo para acoger a los sabios griegos y, sobre todo, la biblioteca de Alejandría, que contaba con más de 400.000 volúmenes, convirtiéndose en la más grande del mundo antiguo. Se dice que el monarca dictó una disposición que obligaba a cada barco que llegaba al puerto a entregar todo texto que llevara a bordo para que fuera copiado. No es de extrañar tal medida en un monarca que sólo se compadeció de la esclavitud judía. Se trató de un guerrero cruel y al mismo tiempo protector de las letras y las artes, era también respetuoso adorador de los dioses y de las cosmogonías orientales. Ptolomeo tuvo que librar una serie de batallas con los asirios.
Nacionalidad: Egipto
306 a.C. - 246 a.C.
Rey 285 a.C. - 246 a.C.
Tras el fallecimiento de Ptolomeo I el trono de Egipto recayó en su hijo Ptolomeo II (308-246), llamado Filadelfo o "el que quiere a su hermana", pues contrajo matrimonio con Arsínoe II (hermana de su esposa) tras diez años de matrimonio con Arsínoe I, ambas hijas de Lisímaco. Su reinado abarcó desde el 285 al 246 a.C. y destacó, más que por su labor política, por la cultural, pues fundó un museo para acoger a los sabios griegos y, sobre todo, la biblioteca de Alejandría, que contaba con más de 400.000 volúmenes, convirtiéndose en la más grande del mundo antiguo. Se dice que el monarca dictó una disposición que obligaba a cada barco que llegaba al puerto a entregar todo texto que llevara a bordo para que fuera copiado. No es de extrañar tal medida en un monarca que sólo se compadeció de la esclavitud judía. Se trató de un guerrero cruel y al mismo tiempo protector de las letras y las artes, era también respetuoso adorador de los dioses y de las cosmogonías orientales. Ptolomeo tuvo que librar una serie de batallas con los asirios.
Nacionalidad: Egipto
185 a.C. - 145 a.C.
Rey 173 a.C. - 145 a.C.
El hijo de Ptolomeo V fue derrotado por Antíoco IV de Siria por lo que solicitó ayuda a los romanos para recuperar su reino. La ayuda brindada por Roma permitió a Ptolomeo VI recuperar el trono perdido, compartiendo la corona junto a su hermano Ptolomeo VIII. La alianza con Demetrio II le fue bastante útil para defenderse de sus enemigos. Ptolomeo continuó la tradición faraónica al casarse con su hermana Cleopatra II y falleció en una acción militar.
Nacionalidad: Egipto
1326 a.C. - 1234 a.C.
Faraón 1301 a.C. - 1234 a.C.
El reinado de Ramsés II posiblemente sea el más prestigioso de la historia egipcia tanto en el aspecto económico, administrativo, cultural o militar. No en balde fue el vencedor de la batalla de Qadesh, siempre según las fuentes egipcias. Ramsés nace hacia el año 1326 a.C., accede al trono imperial hacia 1301 a.C. y muere alrededor de 1234 a.C. por lo que se trata también de uno de los reinados más largos. Gobernó sobre un mundo en plena transformación lo que hace más interesante este momento histórico. Su abuelo es el faraón Ramsés I, general del ejército y visir, elegido rey de Egipto por Horemheb al no tener éste descendencia. Su padre fue Sethi I, maestro político y militar, siendo su madre la reina Tui, miembro de una ilustre familia de militares.
Ramsés II pasó su infancia en Luxor en compañía de sus dos hermanos y sus dos hermanas. Desde pequeño fue educado para heredar la doble corona; un preceptor le enseñaría a escribir e interpretar las imágenes escritas (leer), a conocer los astros, matemáticas y geometría rudimentarias así como profundizar en materia religiosa.
Hacia los diez años fue nombrado heredero y comandante en jefe del ejército como primogénito que era; desde ese momento tuvo un harén a su disposición y acompañó a las tropas en algunas campañas contra los hititas y los libios.
A los 16 años fue asociado al trono imperial por Sethi, continuando con su educación política. El visir de Sethi, Paser, posiblemente participó en esta educación, manteniéndose durante veinte años en el cargo tras el fallecimiento de Sethi. Por estas fechas Ramsés participaría en la supervisión de las construcciones de Abidos, iniciándose su afición a las edificaciones.
Su primera esposa será una joven de noble familia llamada Nefertari. Tenía 17 años Ramsés cuando casó por primera vez; fruto de este matrimonio nació su hijo primogénito llamado Amonherunemef. Paralelamente tomó una segunda esposa, Isetnefret, quien también le dio un hijo llamado Ramsés. Las dos mujeres continuaron procreando, asegurándose así el futuro de la dinastía. La tercera esposa será Hentmire, la propia hermana de Ramsés, siguiendo la tradición faraónica para conservar la pureza de la sangre. Como cuarta esposa eligió a su propia hija, Merytamón, fruto de su matrimonio con Nefertari, casándose también con una de las hijas de Isetnefret, Bentanat.
A finales del mes de junio del año 1301 a.C. fallece Seti I y Ramsés II sube al trono como rey del Alto y Bajo Egipto y Sol de los Nueve Arcos. Tenía 25 años. Sus primeros esfuerzos están encaminados a mantener la paz interior alcanzada en los reinados anteriores, manifestando a los sacerdotes de Amón su deseo de ejercer todos los poderes, evitando en la medida de lo posible influencias del poderoso clero. Para ello elegirá como sumo sacerdote a Nebumenef, persona de su absoluta confianza. Desde ese momento pondrá en marcha un faraónico plan para recuperar las fronteras del Imperio en la época de los Tutmosis y asegurar la paz interior, al tiempo que iniciaba su programa constructivo, símbolo evidente de poder en la época. Ordenó la construcción de un gran templo en Luxor consagrado a Amón-Ra, formando un conjunto con el construido por Amenhotep. También inició la edificación del Ramesseum, en la colina de Sheij abd el Gurnah, junto al que se levantaría un palacio donde supervisar las obras. Para llevar a cabo estas empresas arquitectónicas era necesario un abundante flujo de oro, procedente en su mayoría de la zona sur del país. Uno de los problemas con los que contaba esta vía aurífera era la escasez de zonas de avituallamiento, especialmente de agua, dedicándose Ramsés a la perforación de pozos para solucionar el problema hidráulico. De esta manera pudo aumentar la llegada de oro para mantener su programa arquitectónico, con el que se congratulaba con los dioses.
La recuperación del antiguo imperio provocaría el enfrentamiento con Muwattali, rey de Hatti, conflicto que se prolongaría por un periodo de 17 años. Con el objetivo de concentrar todas sus fuerzas en este frente, Ramsés se apresuró en instaurar con firmeza su hegemonía en Libia y Nubia. En el cuarto año de su reinado inició la expedición contra los hititas, llegando hasta Biblos con el fin de establecer bases marítimas de avituallamiento. Mientras Muwattali había establecido una alianza con los príncipes del Asia Menor y Siria para enfrentarse a los egipcios. El enfrentamiento de ambos ejércitos será en Qadesh, desarrollándose una importantes batalla (hacia 1295 a.C.). La batalla no tiene un vencedor claro, aunque Ramsés II se autoproclamó como el gran triunfador, según se desprende de las inscripciones encontradas en los templos de Luxor, Karnak y Abidos. La reacción de Muwattali será establecer una poderosa alianza contra Egipto, involucrando especialmente a Benteshina de Amurru, tradicional aliado egipcio.
Durante doce años Ramsés se dedicará a reconquistar el imperio asiático y africano. Las revueltas de Canaan, Moab y Edom fueron rápidamente sofocadas, recuperando Egipto la soberanía sobre estos lugares, logrando preservar el imperio asiático hasta el río Orontes. El siguiente paso dado por Ramsés será aprovechar el momento de debilidad de los hititas, tras el fallecimiento de Muwattali y el enfrentamiento sucesorio entre Mursil y Hattusil. Ramsés atravesó Canaan, tomando el puerto de Ascalón y la ciudad de Jaffa. Reafirmó el control sobre los puertos fenicios del Mediterráneo y penetró en la zona sur de Siria, tomando la ciudadela de Dapur, en el reino de Amurru. Tras asentar en cada una de las plazas tomadas una potente guarnición armada, Ramsés decidió ocuparse de sus posesiones en Africa. Estableció una serie de colonias en las costas de Libia y construyó un amplio frente de fortalezas con el fin de tener vigilada a la población y evitar revueltas.
En el décimo año de reinado surgen nuevos incidentes en Asia por lo que Ramsés vuelve hacia Fenicia, recuperando algunas plazas que habían caído bajo soberanía hitita. Para evitar entrar en un conflicto mayor, Ramsés regresó a su capital, para vivir un breve periodo de paz y prosperidad económica.
Tras algunos años de tensa paz en Asia, surge un nuevo conflicto entre Egipto y Hatti. Babilonia se alía con los hititas y rompe relaciones con Egipto. Ramsés se colocó de nuevo al frente del ejército y partió en dirección al sur de Siria donde tuvieron lugar duros enfrentamientos que se decantaron del lado egipcio. La solución a estas constantes luchas vendrá de la mano de un tratado de paz firmado entre Ramsés II de Egipto y Hattusil de Hatti (hacia 1280 a. C.), uno de los mayores éxitos del reinado, inaugurando un periodo de paz y prosperidad económica y cultural. La frontera de ambos países quedaba limitada por el Orontes, mientras Hatti mantenía su soberanía sobre Qadesh y Amurru y Egipto dominaba los puertos fenicios. El tratado incluía ayuda militar recíproca, asumiendo la lucha contra enemigos comunes. Desde ese momento, Ramsés dedicará su tiempo al mantenimiento de su Imperio, un imperio que abarcaba desde Sudán en el sur hasta el Mediterráneo en el norte, desde Libia en el oeste hasta el Orontes en el este. La supremacía de este amplio territorio estaría en Egipto y en manos de su faraón. Para controlar todo este territorio ordenó la construcción de una nueva ciudad llamada Per-Ramsés en la región de Tanis, en el delta del Nilo, y la convirtió en la capital del Imperio al tiempo que se engrandecía y embellecía Menfis gracias a la labor llevada a cabo por Jaemuaset, segundo de los hijos de Isetnefret. Tebas quedaba así alejada del poder político. De esta manera se pretendía alejar del gobierno del país, en la medida de lo posible, a los pretensiosos sacerdotes de Amón, cuyo centro de poder era la ciudad de Tebas. Otra de las importantes empresas llevadas a cabo por Ramsés será la construcción de dos templos excavados en la roca de Abu-Simbel: uno dedicado a Ptah, Ptahtatenen, Hathor y el propio Ramsés mientras que el otro se dedica a Hathor y Nefertari.
Con el fin de mantener la paz entre Egipto y el reino de Hatti, Ramsés contraerá matrimonio con una princesa hitita a finales del año 33 de su reinado. Ya había celebrado sus dos primeros jubileos - fiesta que se realizaba después de 30 años de reinado y posteriormente cada tres - llegando a celebrar hasta 11 jubileos. La primogénita del rey Hattusil se convertía en la quinta Gran Esposa Real con el nombre de Mathorneferure, al margen de las numerosas concubinas que tenía el faraón, hablando algunas fuentes del nacimiento de más cien hijos en el harén de Ramsés. El matrimonio con la hija de Hattusil sirvió para fortalecer la paz, impulsando el comercio y las relaciones culturales entre ambos países. Con el fin de reforzar la amistad entre Hatti y Egipto, Hattusil ofreció otra segunda hija en matrimonio a Ramsés, convirtiéndose ésta en una concubina.
El periodo de paz será aprovechado por Ramsés para favorecer la prosperidad económica y cultural de Egipto, al tiempo que estrechaba la vigilancia sobre los instrumentos de gobierno de su reino. Para ello se rodeó de un amplio grupo de estrechos colaboradores, miembros de las familias más cercanas a su persona, creando una élite burocrática.
En los últimos años de su reinado, Ramsés pudo apreciar como se iniciaban las presiones de los pueblos procedentes de Europa, pueblos que llegarán a tomar Egipto en el año 1200 a. C. Dentro de estos movimientos demográficos encontramos la huida de la población judía de Egipto, liderada por Aarón y Moisés.
Tras 67 años de reinado y a la edad de 92 años, Ramsés II fallecía a causa, según el egiptólogo Esteban Llagostera, de una caries del maxilar inferior que le provocó una infección sanguínea definitiva. En el trono de Egipto dejó a su hijo Mineptah, fruto del matrimonio con Isetnefret, nombrado heredero tras el fallecimiento de algunos de sus hermanos mayores
Reyes Católicos. Isabel y Fernando
Nacionalidad: España
1451-52 - 1504-16
Reyes 1474-79 - 1504-16
Isabel, hija de Juan II de Castilla y de Isabel de Portugal, y Fernando, hijo de Juan II de Aragón y de Juana Enriquez, contrajeron matrimonio en Valladolid el 19 de Octubre de 1469, entre fuertes oposiciones al mismo. Isabel heredaría el trono de Castilla en 1474 después de la muerte de su hermano Enrique IV, autoproclamándose reina, ya que había un conflicto sucesorio entre ella y Juana, hija de Enrique IV, de la que se decía era hija de D. Beltrán de la Cueva y no del rey, este conflicto prosiguió después de la coronación, ya que Alfonso V de Portugal, esposo de Juana, lanzó una ofensiva en apoyo de ésta, ofensiva que se disputó en las batallas de Toro y Albuera tras las cuales Isabel, que salió vencedora, fue reconocida reina por las Cortes de Madrigal. Mientras tanto Fernando era nombrado heredero a la muerte de su hermano Carlos. En 1468 recibió el trono de Sicilia y a la muerte de su padre en 1479, el de la corona de Aragón. Participó en las luchas a favor de su esposa Isabel y a partir de esta fecha se produjo la unión dinástica de Aragón y Castilla y el comienzo del reinado conjunto, siguiendo los acuerdos que se habían firmado en 1475 en la concordia de Segovia por los que ambos monarcas mantenían su igualdad en lo tocante a Justicia, moneda y expedición de privilegios, pero reservaba a Isabel la fidelidad de los tenedores de Castillos y las cuestiones de Hacienda. Este matrimonio ha sido considerado como el punto de partida de la unidad y de la grandeza de España. El primer objetivo de los nuevos monarcas fue el de restablecer la autoridad real para lo cual se sirvieron de una poderosa organización la Santa Hermandad creada en 1476 que era una especie de policía judicial que perseguía a los perturbadores del orden. También constituyeron el Consejo Real que sustituía a las Cortes y nombraron corregidores para controlar las ciudades y vincularon la dirección de la Mesta al Consejo Real. De este modo quedaba controlada la política del reino, aunque estas medidas pesaron más sobre el reino de Castilla que sobre el de Aragón. La siguiente misión era concluir la reconquista en el reino nazarí de Granada lo que consiguieron en 1492. La paz interior y la buena organización del reino permitieron que las arcas reales se llenaran y con ellas se acometieran nuevas empresas como el apoyo al almirante genovés Cristobal Colón que descubriría América en 1492, aportando riquezas para el reino y un fuerte expansionismo exterior. El éxito de la guerra antimusulmana y la presión de los confesores de la reina indujeron a los Reyes a unificar la religión de sus súbditos por lo cual en 1492 se procedió a expulsar a los judíos y los mudéjares granadinos, obligados a convertirse. Ya en 1478 se había creado La Inquisición para perseguir a los cristianos nuevos que volvían a sus antiguas creencias. El reino continuó ampliándose al conseguir Fernando de Carlos VIII de Francia la restitución de la Cerdaña y el Rosellón en virtud del tratado de Barcelona de 1493. Así mismo en Italia se enfrentó al monarca francés consiguiendo la conquista del reino de Nápoles en 1504. En ese mismo año fallecía la reina Isabel y aunque dejaba como regente de la heredera al trono, Juana I, a su marido Fernando el Católico, la nobleza castellana no lo apoyó por lo que éste marchó a sus estados de Aragón. De este modo quedaba encargado del gobierno de Castilla Felipe de Austria, el Hermoso, esposo de la reina Juana I de Castilla, la Loca. Pero la muerte de Felipe en 1506 obligó a restituir a Fernando, llamado por el Cardenal Cisneros a Castilla en 1507. Los últimos años de su reinado se caracterizaron por los enfrentamientos con Francia en terreno italiano. A la muerte de Fernando el Católico heredó el trono su nieto Carlos I de España.
Desde el punto de vista artístico esta etapa se caracteriza por la supervivencia de la tradición gótica y la lenta penetración de los nuevos moldes renacentistas. Bajo el impulso de los monarcas o de la alta nobleza se erigieron numerosos edificios, iglesias, universidades, hospitales, castillos, etc., especialmente en tierras castellanas dada la supremacía económica de dicho reino en aquella época. En el campo de la pintura se superpusieron el estilo flamenco y la novedad renacentista. En este período continuaron desarrollando su obra pintores que ya habían comenzado tiempo atrás como Huguet, Gallego, Bermejo a la vez que el nuevo estilo renacentista asomaba a las obras de artistas como Rodrigo de Osona el Viejo o Pedro Berruguete.
Nacionalidad: Holanda
1469 - 1536
Humanista
Escritor en lengua latina, cursó primero estudios en Deventer y posteriormente en el colegio de Montaigu, en París (1495). Tomados los hábitos menores, viajó a Oxford (1498) y regresó a Francia, donde publicó sus "proverbios" o "Adagios" (1500) y el "Enchiridion militis christiani" (1504), traducido al castellano por el Arcediano del Alcor. Marcha a Bolonia en 1506, viajando por Italia y residiendo en Roma durante un año. De nuevo en Londres, fue recibido por Tomás Moro en 1509, escribiendo aquí el "Elogio de la locura" (1509-1511).
Aunque tuvo relación con las principales figuras de su tiempo, como los papas Julio II y Clemente VII o el reformador Lutero, su espíritu libre y crítico le ocasionó la enemistad tanto de católicos como protestantes. Contra estos, refutó la teoría que defendía el libre albedrío del ser humano, escribiendo ""De libero arbitrio diatribe sive collatio" (1524). Una obra anterior, sus "Colloquia familiaria", fue en parte censurada por la Curia romana a través de la Sorbona. Muy criticado dentro de la Iglesia romana, criticó la Reforma y la misma corriente humanística que él mismo representaba para no ser excomulgado. Sus ideas influyeron en España a través de una minoría selecta, entre la que se contaban los Valdés, J. de Vergara, el Arcediano del Alcor o A. de Virués. Contra el erasmismo se convocó en 1527 la Junta de Valladolid, sin que llegara a ningún acuerdo a causa de su disolución por miedo a la peste. El papa Paulo IV prohibió en 1559 la difusión de la obra erasmista.
Nacionalidad: Holanda
1469 - 1536
Humanista
Escritor en lengua latina, cursó primero estudios en Deventer y posteriormente en el colegio de Montaigu, en París (1495). Tomados los hábitos menores, viajó a Oxford (1498) y regresó a Francia, donde publicó sus "proverbios" o "Adagios" (1500) y el "Enchiridion militis christiani" (1504), traducido al castellano por el Arcediano del Alcor. Marcha a Bolonia en 1506, viajando por Italia y residiendo en Roma durante un año. De nuevo en Londres, fue recibido por Tomás Moro en 1509, escribiendo aquí el "Elogio de la locura" (1509-1511).
Aunque tuvo relación con las principales figuras de su tiempo, como los papas Julio II y Clemente VII o el reformador Lutero, su espíritu libre y crítico le ocasionó la enemistad tanto de católicos como protestantes. Contra estos, refutó la teoría que defendía el libre albedrío del ser humano, escribiendo ""De libero arbitrio diatribe sive collatio" (1524). Una obra anterior, sus "Colloquia familiaria", fue en parte censurada por la Curia romana a través de la Sorbona. Muy criticado dentro de la Iglesia romana, criticó la Reforma y la misma corriente humanística que él mismo representaba para no ser excomulgado. Sus ideas influyeron en España a través de una minoría selecta, entre la que se contaban los Valdés, J. de Vergara, el Arcediano del Alcor o A. de Virués. Contra el erasmismo se convocó en 1527 la Junta de Valladolid, sin que llegara a ningún acuerdo a causa de su disolución por miedo a la peste. El papa Paulo IV prohibió en 1559 la difusión de la obra erasmista.
Saladino
Nacionalidad: Egipto y Siria
Tikrit, Bagdad 1138 - 1193
Sultán
Salah-al Din ("honrando la Fe"), nacido en Tikrit en el seno de una familia kurda que emigró a Irak, prestó sus servicios al sultán de Siria, Nureddin, y comandó una misión militar de defensa de Egipto frente al ataque de los francos y con el objetivo de eliminar del poder a la dinastía de los fatimíes, considerada herética. Tras tomar Egipto en 1169, obtuvo el cargo de visir del sultán fatimí, a quien sucedió en 1171. A la muerte de Nureddin en 1174 tomó Damasco, Emesa y Hamah, y un año más tarde conquistó Baalbek y los territorios cercanos a Alepo, concediéndole el califa el título de sultán de Egipto, Nubia, Cirenáica, Yemen, Palestina y territorios de Siria. Conquistado definitivamente Alepo en 1183, y obtenido el vasallaje del príncipe de Mosul en 1186, lo que le procuraba el contro sobre Siria, emprendió la conquista del Reino latino de Jerusalén. En 1187 venció en la batalla de Hattin, lo que le permitió invadir todo el Reino menos los sitios de Antioquía, Trípoli y Tiro. Jerusalén cayó en 1187, lo que provocó la reacción de las potencias occidentales y el inicio de la Tercera Cruzada. Derrotado en Arsuf, Jaffa y Cesarea por los cristianos liderados por Ricardo Corazón de León, ambos contendientes firmaron un tratado de paz en 1192 que aseguraba la existencia del Reino latino de Jerusalén, si bien circunscrito a una franja costera y un estrecho corredor hasta la ciudad, ésta en poder de los musulmanes.
Nacionalidad: Chartres
1115 - 1180
Obispo
Obispo de Chartres, fue también secretario del arzobispo de Canterbury y amigo de Tomás Beckett. Discípulo de Abelardo en París y Chartres, entre sus obras destacan "Polycraticus", una crítica de costumbres, "Metalogicus" y "Entheticus", crítica de los falsos filósofos, "Historia pontificalis" y sendas biografías de San Anselmo y Tomás Beckett.
Nacionalidad: Israel
Rey 970 a.C. - 931 a.C.
Uno de los reyes más populares de la historia israelí es Salomón, conocido por su justicia a partir del veredicto dictado en el caso del hijo disputado por ambas madres. Salomón era hijo de David y fue nombrado rey por su padre hacia el año 970 a.C. La situación en aquellos momentos era bastante estable, alterada con un leva enfrentamiento con Egipto que fue solventado con el matrimonio entre el rey israelí y la hija del faraón. Desde ese momento, Salomón se dedicará a organizar sus dominios y mantener la integridad de los mismos. Las principales ciudades fueron fortificadas y el ejército se reorganizó, dotando de unidades de carros. La economía recibió un potente impulso al llevar a cabo importantes acuerdos comerciales con Tiro. Las riquezas afluían al reino israelí lo que permitió la construcción de un palacio real y el inigualable templo decorado con "paneles de cedro recubiertos de oro, columnas y capiteles de bronce, altar, candelabros y vajilla de oro". El auge económico trajo consigo una reactivación de la cultura, especialmente la literatura, la música y la poesía.
El país fue dividido en 12 provincias que pagaban cuantiosos impuestos para sufragar los enormes gastos de la corte. Las tribus iban perdiendo su independencia y la estructura social y económica cambiaba rápidamente. Estas transformaciones no eran del agrado de los más conservadores, provocando un cisma en el pueblo israelí durante el reinado de Roboam.
San Bernardo de Claraval
Nacionalidad: Iglesia Católica
Fontaines (Francia) 1090 - 1153
Doctor
Nacido en Fontaines (Francia) en el seno de una familia ilustre, fue fundador de la célebre abadía cisterciense de Claraval (Clairvaux) y predicó en Francia la Segunda Cruzada. En el cisma entre Inocencio II y Anacleto II, se declaró a favor del primero y le hizo triunfar. Dejó "Cartas" muy notables y excelentes "Tratados de Teología". Consiguió poder y prestigio para la Orden de los Caballeros del Temple. Su fiesta se celebra el 20 de agosto.
Nacionalidad: Sevilla
570 h. - 636
Obispo
La mayor parte de la infancia y juventud de san Isidoro transcurrió en Sevilla, donde su familia llegó exiliada de su Cartagena originaria. Hermano de san Leandro, fue éste quien tuteló a los hermanos pequeños cuando los padres murieron. San Isidoro se interesó desde joven por la cultura clásica, dominando el latín, el hebreo y el griego, realizando estudios eclesiásticos que le llevaron a desempeñar el obispado sevillano en el año 600, sustituyendo a su hermano. Se interesará especialmente por dotar de unidad eclesiástica y cultural al reino visigodo, continuando la labor de san Leandro. Para ello fundó las escuelas episcopales en Sevilla que más tarde se crearon con buen éxito en Toledo y Zaragoza. También fomentó la creación de escuelas monacales y elaboró el conjunto de normas que regían la vida de los monasterios (Regula Monachorum). Fue el responsable de la reorganización de la Iglesia visigoda y de la elevación cultural del pueblo a través de las escuelas episcopales y monacales.
Como escritor san Isidoro es uno de los más destacados de la literatura universal. En sus "Etimologías" intenta recoger los conocimientos humanos como si de una enciclopedia se tratara; "De Natura Rerum" trata de conocimientos básicos de la naturaleza; y en "Historia de Regibus Gothorum" estudia la historia del reino visigodo. Continuará la labor iniciada por san Leandro en la escuela de Sevilla, siendo uno de los responsables del florecimiento teológico que se produce en España durante el siglo IX.
Las etimologías son la obra magna, aunque inconclusa, de Isidoro, destinadas, al menos en una primera versión, al rey Sisebuto. Al parecer, la división en veinte libros se debe a Braulio, pues Isidoro la habría dispuesto en capítulos. De carácter enciclopédico, recoge el saber clásico y cristiano para transmitirlo al mundo y que éste se enriquezca con la civilización, pues en la obra se compilan diversos conocimientos -al hilo de múltiples vocablos estudiados-, tanto de técnicas como de datos: gramática, retórica, dialéctica, matemáticas, medicina, derecho, cronología, religión, lenguas y pueblos, origen de algunos nombres, el hombre, los animales, los elementos y la geografía, las ciudades y construcciones, la mineralogía, la agricultura, las guerras, los espectáculos, los juegos, las naves, oficios, edificios, vestimentas, comidas y bebidas, instrumentos, ajuares. Su influjo fue inmediato, Isidoro se convirtió en una gran autoridad y las Etimologías en una de las obras más leídas y apreciadas en la Edad Media.
San Pablo
Nacionalidad: Iglesia Católica
- 67
Apóstol y santo
Miembro de una importante familia judía y llamado Saulo, se educó bajo los rígidos principios fariseos a pesar de ostentar la ciudadanía romana. En Jerusalén recibió las enseñanzas de unos de los más importantes rabinos quien le inculcó ideas contrarias a los primeros cristianos al negar la ley mosaica. Durante un viaje a Damasco recibió una visión que le convirtió al cristianismo y en uno de los más importantes difusores de la doctrina cristiana. Entre los año 45 y 49 inició su primer viaje apostólico en el que recorrió Cilicia, Panfalia y Jerusalén, mientras que en años sucesivos visitó Grecia, Macedonia y Anatolia. En el año 58 fue apresado en Jerusalén y trasladado a Roma para ser juzgado. Se piensa que recibió la absolución y se trasladó a Hispania para continuar su labor evangelizadora. Su papel como difusor de la religión cristiana se recoge en las catorce epístolas que escribió.
San Pedro Nolasco
Nacionalidad:
1206 - 1252
Religioso
Nacido en una pequeña población cerca de Barcelona (algunos autores han afirmado que nació en el Languedoc francés), fundó en 1218 junto Ramón de Peñafort la Orden de la Merced o de la Misericordia, encargada de recaudar fondos y realizar el pago del rescate de cautivos de los musulmanes. Dirigió la orden durante treinta y un años, con el cargo de primer maestre. Fue canonizado en 1655 por Alejandro VII.
Nacionalidad: Navarra
Rey 1005 - 1035
La ruina del poderío cordobés tras la muerte de Almanzor y la sucesión de sus hijos Abd al-Malik y Sanchuelo será aprovechada por Navarra. Sancho Garcés III, heredero de García Sánchez II, emprenderá una política de unificación en su reino que tendrá sus frutos en la expansión al resto de los reinos cristianos peninsulares. Gracias a su hábil política matrimonial conseguirá extenderse por Sobrarbe, Ribagorza, Castilla y León, titulándose "rey de las Españas" y "poseedor del Imperio". La corriente europeísta que impregnó su reinado se pone de manifiesto con la entrada en la península de los usos feudales, la aplicación de la reforma cluniaciense a los monasterios y la potenciación de la ruta a Compostela.
Sancho III El Deseado. Sancho III
Nacionalidad: Castilla
1135 - 1158
Rey 1157 - 1158
Hijo de Alfonso VII, ocupó el trono en 1157 a la muerte de su padre, quien dividió sus posesiones entre sus hijos Fernando II, a quien correspondió León, y Sancho, a quien dio Castilla. Estableció con su hermano un tratado de amistad y no-agresión que evitó enfrentamientos entre ambos reinos. Logró que Ramón Berenguer IV se reconociera vasallo suyo mediante un acuerdo firmado en 1158, ratificando el "Regnum Caesaragustanum" establecido por Alfonso VII con el conde de Barcelona. Fundó la Orden de Calatrava y protegió al reino de la invasión de Sancho IV de Navarra.
Sancho VII El fuerte. Sancho VII
Nacionalidad: Navarra
1154 - 1234
Rey 1194 - 1234
Apodado el Fuerte, sucedió a su padre Sancho VI en 1194. Como en tiempos de su padre, nuevamente Aragón y Castilla acordaron repartirse los territorios del reino de Navarra. Así, la ofensiva de Alfonso VIII de Castilla y Pedro el Católico de Aragón hizo huir al monarca navarro y solicitar ayuda al califa almohade, quien envió recursos financieros. Aun así, Castilla logró incorporar Álava y Guipúzcoa, si bien algunos años más tarde firmó un acuerdo de paz con el monarca navarro en Guadalajara (1207) por el que finalizaban las disputas entre ambos reinos. La paz con Aragón se suscitó en 1208, y facultó la intervención en la batalla de las Navas de Tolosa de 1212 contra los almohades. Firmó tratados con el monarca inglés Juan Sin Tierra y con Jaime I de Aragón.
Rocaseca (Italia) 1225 - 1274
Filósofo y teólogo
Nacido en Rocaseca (Nápoles), ingresó entre los dominicos en 1224. Discípulo de Alberto Magno, junto a quien estudió en París entre 1245-48 y Colonia entre 1249-52, es a su maestro a quien debe la influencia más penetrante de su formación. Se licenció en teología en París, en 1256, regresando a Italia donde se dedicó a la enseñanza. El papa Urbano IV le adjudicó la reorganización en Roma de las enseñanzas de los dominicos, volviendo a París en 1269 para enseñar en su Universidad. Consiguió ser admitido en el plantel de profesores de la Universidad parisina, pese al rechazo suscitado hacia los profesores de las Ordenes mendicantes, junto a San Buenaventura. Regresó a Nápoles en 1273 y murió un año más tarde mientras viajaba para asistir al Concilio de Lyon convocado por Gregorio X.
La aportación principal de Santo Tomás consiste en la ligazón que establece entre filosofía y teología, o dicho de otra manera, entre razón y fe. En este sentido, incorporó plenamente el pensamiento aristotelico, en especial el mecanismo lógico deductivo como heramienta del conocimiento, a un mundo medieval dominado por el platonismo y el agustinismo. Considera la filosofía como una ciencia subordinada a la teología, si bien su papel y objetivo fundamentales son complementarios. Así, aceptando como cierta la religión revelada y todos sus contenidos, la filosofía y el conocimiento humano pueden, por medio de las herramientas precisas (el método lógico-deductivo), probar y dar por ciertos los dogmas de la fe, entre ellos el mayor de todos: la existencia de Dios. En su demostración, utilizó la analogía para explicar las relaciones de orden y causalidad entre Dios y el hombre.
Estableció la posibilidad de un orden moral basado en la idea del Bien, alcanzable libre y voluntariamente por el hombre mediante el conomiento del mundo. Escribió numerosas obras, entre las que destacan los comentarios al pensamiento de Aristóteles, obras teológicas como "Summa Theologica", "Summa contra gentiles" o "De ente et essentia", entre muchas otras.
Leptis Magna 146 - Ebucarum 211
Emperador 193 - 211
La conspiración que acabó con Cómodo eligió como sucesor a Publio Helvio Pertinax pero su reinado sólo duró 87 días al rebelarse contra él los pretorianos, los cortesanos y el pueblo. Los pretorianos abrieron un concurso para adjudicar el título imperial, presentándose dos candidatos: Marco Didio Juliano y Tito Flavio Sulpiciano. Juliano fue elegido emperador gracias a las promesas realizadas, promesas que no pudo cumplir, siendo abandonado por sus apoyos. Tres personas fueron proclamadas emperadores por sus respectivos ejércitos. Lucio Septimio Severo ocupó rápidamente Roma y recibió el nombramiento del aterrorizado Senado. Se enfrentó con Pescenio Nigro, su más directo rival, saliendo vencedor. Albino, el tercero en discordia, recibía el cargo de césar pero en el año 196 se proclamó augusto con el beneplácito del Senado, mientras Septimio estaba en guerra contra los partos. Regresó a occidente para vencer en la Galia a su rival e impuso duras represiones para acabar con posibles conatos de rebelión.
Una vez asentado en el poder, Severo regresó a luchar contra los partos que fueron expulsados fuera de las orillas del Tigris, ocupando para Roma Ctesifonte y Seleucia. La paz firmada permitió la toma de Mesopotamia. Una vez aseguradas las fronteras y establecida la autoridad, Septimio se embarcó en la reorganización administrativa, manifestando una considerable militarización del poder central. El ejército se convertirá en la pieza clave del puzzle. La guardia pretoriana fue reorganizada y los matrimonios de los soldados fueron legalizados, permitiendo a sus esposas vivir cerca de los campamentos. Las provincias fueron equiparadas casi por completo a Italia y las ciudades provinciales serían liberadas de numerosas servidumbres. Septimio fue uno de los mayores impulsores del arte de su tiempo, construyendo el Septizonium -que fue destruido en el Renacimiento- y reforzando el muro fronterizo construido por Adriano en Britania. Será en esta provincia donde fallezca en el año 211, posiblemente envenenado. Su sucesor sería Caracalla quien debía compartir el poder con su hermano Geta.
Nacionalidad: Imperio Otomano
Sultán 1520 - 1566
Con Solimán II la potencia imperial otomana alcanzará su máximo apogeo y su mayor poderío. Por su expansión en los Balcanes, Oriente Medio y el Mediterráneo oriental, recibirá el sobrenombre de "El Magnífico".
Sucedió a Selim I y en sus primeros años de mandato demostró su fuerza de empuje al orientar su política hacia el Continente europeo. La expansión balcánica se inició con la conquista de Belgrado (1521) y la toma de Rodas tras la rendición de los Caballeros Hospitalarios de San Juan (1522), completándose tras la victoria sobre Luis II de Hungría en la batalla de Mohács (1526), consiguiendo la desaparición del reino de Hungría y haciéndose dueño de la cuenca del Danubio. El trono húngaro sería ocupado por Juan Zapolya, candidato otomano, quien rindió homenaje al sultán.
Intentó en dos ocasiones apoderarse de Viena (1529 y 1532), sin resultados positivos, aunque llegó a las murallas de la ciudad. La facilidad con que los turcos llegaban a las puertas del Imperio Alemán supuso un duro varapalo psicológico para la Cristiandad ya que la Sublime Puerta podía alcanzar con facilidad el corazón de Europa.
Al no poder superar la barrera europea, Solimán se dirigió hacia Oriente Próximo, tomando Bagdad y Mesopotamia (1536) y llegando hasta la costa sur de la península arábiga, aceptando su supremacía los monarcas persas. En 1538 avanzó hacia la India. El Mediterráneo occidental fue el centro de los enfrentamientos con Carlos V. Solimán contó con la colaboración de Francisco I de Francia y el corsario berberisco Khair Eddin Barbarroja, artífice de la conquista de Argel y Túnez, plaza fuerte ésta que será reconquistada por el emperador en 1535.
La década de los cuarenta será también destacable para el Imperio, anexionando el reino de Hungría tras la muerte de Zalpoya. En 1543 el último rey abasí renuncia a su corona a favor del turco y Fernando de Austria deberá satisfacer un tributo anual al califa otomano. La negativa de Maximiliano II a efectuar esta imposición provocará el asalto a Sigetz en el que perderá la vida el Magnífico.
Fruto del amor de Solimán hacia la cultura es la magnífica mezquita que lleva su nombre en la actual Estambul.
Tamerlán
Nacionalidad: Tartaria
Kesch, Samarcanda 1336 - 1405
Khan 1370 - 1405
También conocido como Timur Leng en Oriente y como Kei Mon Eul en China, esperó a que falleciera Togluk para enfrentarse a su hijo y autonombrarse Khan de los tártaros en 1370. Su principal ambición era ver como crecía su imperio. De este modo, dedicó el resto de su vida a conquistar otros territorios. Llegó al Este del mar Caspio, al Sur de Rusia, Persia, Egipto, Bagdad, etc.. Después de muerto, su imperio se dividió. Su pasión por las ciencias, la teología mahometana y la poesía le animaron a fundar una escuela en Kesch. Se cree que pudo ser el autor de un Tratado de política y de táctica.
Teodosio el Grande. Teodosio I
Nacionalidad: Roma
Cauca 347 - 395
Emperador 379 - 395
Hijo de uno de los generales de Valentiniano I también llamado Teodosio, en su juventud acompañó a su padre en numerosas acciones militares. Teodosio fue nombrado por Graciano "magister militum", cargo con el que obtuvo una importante victoria sobre los sármatas en Panonia. Este triunfo le valió el nombramiento de augusto para oriente al año siguiente (379). Su primera medida fue reclutar un potente ejército con el que expulsar a los bárbaros de Tracia. La pacificación de los godos vino de la mano del permiso para establecer la residencia en Mesia, en calidad de federados, estando obligados a prestar servicio militar.
La pacificación del territorio le permitió participar en los asuntos eclesiásticos, defendiendo con fuerza la ortodoxia frente al arrianismo. Los últimos restos del culto pagano fueron destruidos y el cristianismo entró en la dinámica de la persecución.
La muerte en Lyón de Graciano (383) permitió a Teodosio participar abiertamente en los asuntos occidentales durante una década. En el año 392 Eugenio era proclamado augusto para occidente, iniciando una política defensiva del paganismo. Teodosio actuó con contundencia y venció a las tropas occidentales en el año 394. El Imperio era reunido de nuevo bajo un solo mando, aunque de manera efímera ya que Teodosio moría a principios del año 395. Sus dos hijos Arcadio y Honorio se convirtieron en emperadores de cada una de las partes del Imperio.
Tutmosis III
Nacionalidad: Egipto
Faraón 1504 a.C. - 1450 a.C.
Al fallecer la reina Hatshepsut -oficialmente regente, aunque ella hizo todo lo posible por ser considerada rey, por lo que siempre vistió como un hombre y suprimió en sus nombres y títulos las desinencias femeninas-, Tutmosis III ocupaba el trono de Egipto en solitario. Hijo ilegítimo de Tutmosis II, el tercero de los Tutmosis fue declarado heredero siendo un niño, pero Hatshepsut lo desplazó unos 20 años del poder. Quizá por eso su reinado sea uno de los más importantes, conduciendo a su país a una cota nunca superada por sus sucesores.
Sus primeras medidas están encaminadas a borrar la memoria de su antecesora, eliminando los nombres de los lugares donde habían sido inscritos. Desde ese momento se pondrá en marcha una fiebre constructora que sólo será superada por Ramsés II.
La política exterior será uno de los puntales de este reinado, rompiendo con la inactividad militar de su antecesora. Las fronteras en la zona sur del país se amplían hasta las cercanías de la cuarta catarata, hasta la ciudad de Napata. En Asia, Tutmosis se encontró con una sólida alianza anti-egipcia liderada por Mitanni. El faraón organizó una expedición para atacar a los aliados, tomando Megiddo. Dieciséis campañas seguirán a esta primera, siendo sólo cinco de carácter estrictamente militar. Su objetivo era alcanzar la frontera del Éufrates y acabar con el poder de los mitanios. Tutmosis acabará venciendo en esta larga lucha tras conquistar Retenu, el país de Djahi, Qadesh y la costa fenicia. Curiosamente, aunque no realizara ninguna campaña militar, Tutmosis vivía durante una temporada al año en Asía con el fin de vigilar el cobro de impuestos y evitar conatos de revuelta. Los países limítrofes - Babilonia, Assur, Kheta, Chipre o Mitanni - empezaron a enviar tributos al rey de Egipto reconociendo su poder, intentando evitar campañas de ataque. Pero parece que Tutmosis sólo deseaba consolidar la frontera del Eufrates y sofocar las continuas revueltas que se producían en este territorio.
Tras un glorioso reinado de 54 años, Tutmosis III, casado con Merire Hatshepsut, fallecía dejando la Doble Corona a su hijo Amenofis II.
Urbano II
Nacionalidad: Iglesia Católica
Chatilon sur Marne 1042 - 1099
Papa 1088 - 1099
Nacido en Chatilon sur Marne, fue elegido papa en 1088. Benedictino, antes de ascender al solio pontificio desempeñó misiones diplomáticas en Alemania al servicio de Roma. Se opuso al antipapa Clemente III, uno de los más importantes, y fomentó la guerra santa contra el Islam en los concilios de Clermont y Piacenza, dando así origen a la Primera Cruzada a Tierra Santa, en la que los cruzados lograron conquistar Jerusalén. En los concilios de Melfi (1089) y Clermont (1095 renovó los decretos contra la simonía, el concubinato de los clérigos y la investidura eclesiástica a cargo de laicos, y prohibió la obligación de los eclesiásticos de prestar juramento de fidelidad a los laicos. Dichos acuerdos deben enmarcarse en el contexto de las tensiones entre Papado e Imperio y de la reforma gregoriana, donde se dirime el papel que la Iglesia jugará en los próximos siglos y su lugar entre el resto de poderes terrenales. Igualmente, la promulgación de la Primera Cruzada prestigiará el papel de la Iglesia al aunar en torno a sí las voluntades e intereses de las monarquías occidentales, objetivados sus esfuerzos en la derrota de un enemigo común. Excomulgó al emperador Enrique IV y al rey Felipe I de Francia.
Valente, Flavio
Nacionalidad: Roma Oriental
Emperador 364 - 378
Para ser elegido emperador, Valentiniano recibió la condición de elegir a un co-regente debido a la ruina que sufría el Imperio y su práctica división en dos mitades. El elegido fue su hermano, Flavio Valente, quien recibió el gobierno de Oriente. Sus primeros pasos fueron luchar contra el usurpador Procopio, pariente de Juliano el Apóstata, que se había hecho coronar emperador en Constantinopla. Sus apoyos eran importantes y numerosos pero la llegada de Valente a Asia Menor con un potente ejército motivó que Procopio fuera abandonado por sus partidarios y entregado a Valente. Su siguiente objetivo será la guerra con los persas pero las campañas se vieron interrumpidas por el asentamiento de importantes contingentes de godos en Mesia desde el año 375. En un primer momento Valente les permitió el asentamiento a condición de abandonar las armas pero en el año 378 se rebelaron debido a la corrupción de los funcionarios. El emperador solicitó ayuda a Graciano y se dirigió a poner frente a los godos, siendo derrotado en la batalla de Adriánopolis el 9 de agosto del año 378. Valente murió en el encuentro, posiblemente abandonado por la mayor parte de su ejército, compuesto por bárbaros, que se pasaron al enemigo
Vitrubio, Marco
Nacionalidad: Roma
Siglo I a.C.
Arquitecto
Gracias a Plinio el Viejo conocemos uno de los tratados arquitectónicos más importantes del mundo antiguo. Se trata de "De architectura" escrito por Vitrubio y que tuvo una importancia crucial para los arquitectos renacentistas en su búsqueda de fuentes para conocer más de cerca el arte griego y romano.
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